Pablo Moyano, hijo del líder del Sindicato de Camioneros, Hugo Ídem, el pasado martes 18 de agosto captó todas las miradas tras asegurar que “la marcha fue algo vomitivo” en referencia a la movilización del 17A que tuvo lugar en distintas partes del país con epicentro el en Obelisco, en el microcentro porteño.

En la entrevista que fue realizada por El Destape Radio, dejó algunas declaraciones que dan cuenta del gran respaldo que desde Camioneros se le está brindando al oficialismo de turno.

“El día que los trabajadores podamos salir a la calle vamos a ser miles y miles de argentinos diciendo que no queremos que nunca más vuelva la derecha. Ya vivimos cuatro años de políticas en contra de los laburantes, en contra de los jubilados”. Supo manifestar el dirigente gremial.

Ello hizo que se planteen algunas cuestiones: ¿Quienes salieron a la calle a protestar no era gente de trabajo? ¿Hay que estar de acuerdo y ser obsecuentes con las decisiones del Gobierno aunque estas indiquen un paso más hacia el autoritarismo?

Quizá la parte más resonante es la que refiere a los haberes de los jubilados, ya que sus palabras fueron pronunciadas el mismo día que el diario La Nación dio a conocer que con la suspensión de la fórmula de movilidad previsional, las jubilaciones para los meses de septiembre, octubre y noviembre, tendrán una caída de entre 994 y 18.100 pesos.

Al margen de ello, es dable destacar que la palabra “vomitivo” fue tendencia en la red social Twitter en referencia a la alocución realizada por Pablo Moyano.

Resulta llamativo –o no tanto- que el secretario adjunto de Camioneros realice estas declaraciones teniendo en cuenta que hace apenas unas semanas, un grupo de personajes que se encuentran bajo la protección de dicho gremio trabó las entradas de los distintos depósitos que utiliza Mercado Libre con el propósito de robarle afiliados a la Unión de Trabajadores de Carga y Descarga que conduce Daniel Vila.

El apriete por parte de Camioneros a Mercado Libre aquí referido no careció de violencia, aquel método siempre endosable al gremio que dirige Moyano.

Por caso, luego de lo acontecido, se viralizó un video en el que se puede ver a una de las manos derechas de Hugo, quien ostenta el cargo de secretario de la “Rama Logística”. Se trata de Oscar Alejandro Borda.

En las mencionadas imágenes se lo puede ver con un barbijo verde con el logo del gremio de Camioneros, arengando a una multitud de trabajadores a tomar el predio ubicado en Avenida Rivadavia al 77, en Valentín Alsina.

En las escenas puede advertirse la agresión a un encargado, quien salió a recibirlos pacíficamente, para ultimar el “copamiento” del predio entre empujones y corridas.

Borda había quedado cara a cara con el encargado a quien le propinó una trompada –o al menos lo intentó- con el objetivo de amedrentarlo.

Pero parece que la intención del Pablo respecto de tildar a la movilización del 17A tiene por objetivo desviar la atención de otra cuestión. Resulta que el martes pasado fue notificado sobre un pedido de indagatoria que se llevará a cabo el viernes próximo.

Este exhorto fue realizado por un grupo de fiscales de Lomas de Zamora en el marco de la causa por presunta asociación ilícita en su ejercicio como vicepresidente del Club Atlético Independiente.

Según le comentó el fiscal adjunto de la Fiscalía General de Lomas de Zamora, Sebastián Scalera, -uno de los cuatro que citó a indagatoria para este viernes a las 11:·30 a Pablo Moyano- a Tribuna de Periodistas, “a lo largo de la investigación , en función de la prueba que se fue agregando, y con el fin de  garantizar la congruencia y la defensa en juicio, se les amplió la imputación a todos los procesados, es decir, a los que ya están elevados a juicio, siempre en el marco de la misma calificación: asociación ilícita. Restaba hacerlo respecto de Pablo Moyano antes de resolver su situación procesal”.

Tras ello, Scalera aseguró que “luego de esto se evaluará pedir la elevación a juicio”.

La mencionada se trata de una causa en la que barras como Pablo “Bebote” Álvarez, Damián Lagaronne y Roberto Petrov; y dirigentes del Club como Noray Nakis y Héctor Maldonado han declarado en contra del tándem Hugo-Pablo Moyano.

En ese sentido, lo que habría buscado hacer Pablo es, no sólo desviar la atención de este hecho en particular, sino también brindarle apoyo al gobierno que supo dignificar a su padre tildándolo de “ejemplar” e “inmenso”. ¿Será para ser favorecidos con la eventual aprobación de la reforma judicial que impulsa el oficialismo?

Dicho sea de paso, en la misma entrevista hizo referencia a la iniciativa: “Cada vez que (el Gobierno) saca una medida para que los grupos económicos que más ganaron desde la dictadura pongan algo de todo lo que ganaron, salen. Como lo de Vicentin y ahora con la Reforma Judicial, sale esta derecha recalcitrante”.

Todo indicaría que sí, ya que en la causa Independiente, Pablo resulta estar más que complicado. De hecho, ese es el expediente más prometedor a la hora de consignar una condena firme para quien fuera el hijo primogénito de Hugo Moyano.

Quien más ha apuntado contra los Moyano, y con más elocuencia contra Pablo, fue el ex líder de la barrabrava del Club de Avellaneda Pablo Alejandro “Bebote” Alvarez.

Fue quien se encargó de denunciar fraude en las elecciones que se llevaron a cabo en el 2014 y que llevó a Hugo Moyano a estar al frente de la institución deportiva. De hecho, en el expediente figuran puntuales declaraciones que hacen referencia al apriete ideado por los Moyano hacia el ex presidente Javier Cantero para que éste abandone su sueño reeleccionista.

Pero “Bebote” fue más allá y dijo que, por ejemplo, para lavar dinero los Moyano compraban jugadores lesionados y los hacían pasar por sanos. Incuso ejemplificó sus dichos mencionando al uruguayo Cristian “Cebolla” Rodríguez y a Walter Daniel Erviti Roldán.

Además menciona que los viajes de la barra se realizaban mediante la empresa Martín Tur, con la cual se sobrefacturaba el valor y los retornos, según la declaración, quedaban en manos de Pablo Moyano defraudando, de esta forma, al Club.

Como si ello fuera poco también se denuncia la venta de entradas por fuera del sistema de recaudación de la institución y se pone como ejemplo un partido disputado entre Independiente y Flamengo.

En aquella disputa deportiva, según la contabilidad del CAI, se habían vendido 36 mil entradas. Sin embargo, acudieron a la misma un total aproximado de 54 mil personas, por lo que se estima que el 33% de las entradas fueron vendidas mediante un circuito ilegal.

En fin, parece que Pablo Moyano es la última persona que podría definir algo como “vomitivo”, ya que si hay algo a lo que se le puede adjudicar dicha palabra es a la corrupción y está de más asegurar que sobran elementos para asegurar que padre e hijo han cometido un abanico de hechos ilícitos.

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