No puedo hacer otra cosa que
aplaudir la decisión de la directora de USA Today, Karen Jurgensen,
de renunciar a su alta responsabilidad luego de descubrir el peor de
todos los delitos que pueda cometer un periodista: inventar, falsificar una
información. El plagio y la calumnia también acompañan
a un oficio sin ética, ni dignidad, y menos, moral.
La información internacional
hoy está en el basurero y mucha gente se traga el anzuelo de lo que
cree que sucede en el mundo. La guerra ha enloquecido a algunos
editores y periodistas estrellas.
USA Today, de Nueva York, es
uno de los diarios grandes de Estados Unidos (2 millones de lectores) y no
puede darse el lujo de falsificar la información, porque el mundo ya tiene
bastante con los mentirosos de oficio gubernamentales para que los medios,
cuya labor es de transparencia social, caigan en el mismo juego.
El New York Time admitió que uno de sus más
grandes reporteros, Jayson Blair, plagió e inventó
parte de decenas de sus artículos, relacionados en su mayoría con la
tragedia del 11 de septiembre, el día que derribaron Las Torres Gemelas en
Manhattan, Nueva York. Detrás de Blair, renunciaron, como correspondía, los
dos principales editores del NYT.
La investigación incluyó 720 artículos, entre 1993-2003,
una década, y el resultado fue la falsificación de datos, dijo Karen
Jurgensen.
Maquillaje, falsificación, los hechos brillando por su
ausencia junto con la objetividad, dos pilares de una nota periodística,
encaminada a encontrar la verdad y divulgarla.
El autor de estas ficciones, novelas periodísticas, Jack
Kelly, fantaseó con el hombre más buscado por Estados Unidos, Osama bin
Laden, y él se presentó como un Indiana Jones, tras el escurridizo musulmán,
que salió ileso de más de un millar
de bombas de todos los calibres lanzadas por el ejército de Estados Unidos,
en su refugio de fantasma aparecido en Afganistán, entre senderos y cuevas
llena de viento, arena y misterios
tribales.
El periodismo errático, inventivo, le ha costado mucho al
pueblo y gobierno norteamericano. Kelly, con 21 años de experiencia
profesional, cinco veces candidato al Pullitzer, llegó a identificar a un
estudiante Pakistaní, inexistente, como un probable futuro autor de un
atentado a las Torres Sears de Chicago: “esta es mía, decía la foto”
La directora Jurgensen, quien laboraba en el USA Today
desde su creación hace 22 años, renunció ante el dueño, Craig Moon, vía
e-mail.
Rolando Gabrielli