Con la democracia… también se calla
“Yo que nací con Videla, yo que nací sin poder, yo que luché por la libertad
y nunca la pude tener, yo que viví entre fachistas, yo que morí en el altar
yo que crecí con los que estaban bien, pero a la noche estaba todo mal”.
Demoliendo hoteles (Charly García)
No es un misterio. Algo se sabe. No está demasiado claro, pero…hay sospechas, hay susurros, pero de “eso”…
Con la democracia se come, se educa…pero de los hijos de la directora de “Clarín” no se habla.
Aún, se cuenta que desde el inicio de la democracia alfonsinista circula por algunas redacciones un informe, que se supone difunden los servicios de inteligencia que dicen que los hijos de Herrera de Noble serían hijos de subversivos nacidos en cautiverio. Un médico apellidado Katz habría entregado a los menores durante la dictadura. El dossier ridiculiza la historia oficial de la caja de cartón en la puerta de “la Viuda Negra”. Además, se nombra a un amante de “la dire”, tema que dejamos para los “chusmólogos” vernáculos, quienes por temor tampoco tocarán.
Sobre sus afectos precisa la execraría del fundador de “Clarín”, en
Agrega la autora de “Las que mandan. El poder de las mujeres en la Argentina menemista” que “del otro amor, nunca se supo”. 6
Ventura pasa luego a describir, con el estilo clásico de la revista “Gente”, algunos datos de la vida de la empresaria hasta que la cita textualmente: “El diario era mi motivación principal, pero aun así sentí que no era bastante, que tenía mucho amor para dar”. A lo que agrega motu proprio la socióloga y ex “Clarín”: “Adoptó entonces a Marcela y Felipe, que hoy [1996] tienen veinte y diecinueve años”. 7
[La negrita no corresponde al original]
Al referirse a sus hijos dice la viuda entrevistada sin repreguntas: “soy una mamá con mayúsculas (…) a mí me han condenado mucho, pero no como la mejor mamá del mundo. Mi mayor deseo es poder ver a mis hijos felices, formando una familia. No volví a casarme porque estuve profundamente enamorada de mi marido, lo amé toda mi vida, y, tras su muerte, concentré mis esfuerzos en consolidar su proyecto. Nunca volví a enamorarme y hoy mis hijos llenan con creces el espacio de mi corazón”. 8
En 2002, formula Horario Verbitsky en “Página
[La negrita no corresponde al original]
Entonces ¿sospecha desde hace años el periodista y presidente del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) sobre la posible apropiación de ambos menores?
Parece que sí, por eso lo fustiga el periodista Juan Salinas: “sabe de la apropiación de ambos niños (…) al menos desde 1984 (sino desde el mismo momento que se produjo tal delito imprescriptible, ya que, como recordó Osvaldo Bayer, cuando Verbitsky trabajaba en ‘Clarín’ pasaba muchas horas en el despacho de Octavio Frigerio... a cuyo padre, Rogelio, Verbitsky le atribuye ahora ambas ‘adopciones’ a fin de librar de culpa y cargo a la viuda de Noble y a su canciller Magnetto)”. 10
[La negrita no corresponde al original]
El 16 de octubre de 2008, declara ante la justicia Llonto – abogado-apoderado de David Lanuscou, hermano de Roberto Lanuscou, querellante en la causa 4012 que se lleva a cabo en el Juzgado Federal Nro. 2 Criminal y Correccional de San Martín, donde se investiga la apropiación de la beba Matilde Lanuscou, secuestrada en San isidro en 1976- que “desde 1977 en que pisé por primera vez la redacción del diario ‘Clarín’ hasta el día de hoy he recibido al igual que otras personas, informaciones, indicios que señalan que Marcela Noble y Felipe Noble son hijos de víctimas de la represión (…) y que podrían ser hijos de desaparecidos anteriores al 24 de marzo del 76 o posteriores al 24 de marzo del 76 (…)
[un chofer]de apellido García, había sido inducido y obligado a firmar un texto preparado por los abogados para ser presentado en un juzgado civil relatando un hecho falso que era el hecho de ser testigo de algo que no había presenciado [ver supra en la historia oficial del caso]. Otro de los choferes de apellido Farías, también nos había relatado episodios similares y comentarios escuchados en la residencia de Ernestina de Noble sobre el sospechoso origen de los chicos”. 11
Agrega el autor de la mejor investigación sobre las “irregularidades” del Mundial de Fútbol de 1978: “La vergüenza de todos”, que “una de mis fuentes en la investigación para el libro [“La Noble Ernestina”], (…) muy cercana a la Sra. de Noble, me relató el procedimiento por el cual los chicos llegaron a sus manos (…) fue en 1976 [la directora del medio le da una directiva a Rogelio Frigerio ] para que consiguiera dos bebes para adoptar [quien] se dirigió a (…) Marco Antonio Cúneo, quien, en 1976, era el militar que tenía los más estrechos vínculos con (…) ‘Clarín’ porque era amigo de Frigerio y además era desarrollista (…) afín al mismo partido político al que adherían, en aquel momento, Rogelio Frigerio y Ernestina de Noble”. 12
José Ignacio López, durante seis años columnista político y responsable de la sección semanal de temas religiosos de “Clarín”, publica en 2008, una “hagiografía” sobre Héctor Magneto en la que al tratar sobre los hijos de la viuda expone que “con la asistencia de Frigerio [Rogelio] y el asesoramiento de Sofovich [Bernardo] (…) la directora pudo alcanzar su deseo de adoptar. A mediados de 1976, (…) logró la guarda de dos bebés (…) y un año más tarde, obtuvo la adopción. Se trataba, claro, de una cuestión personalísima de la que Magnetto, aunque conocía aquel hondo deseo, sólo tuvo noticias cuando la directora le confió que los chicos ya vivían en su casa. Del mismo modo lo hizo con otros referentes del diario como con Joaquín Morales Solá que veinte años después, ya en ‘La Nación’, pudo vestir con su pluma un vibrante testimonio [ver Infra columna de Morales Solá] cuando la señora de Noble fue injustamente detenida en una causa instruida por el juez Marquevich”. 13
Bien escueto el ex -vocero de prensa de Raúl Alfonsín. Pocos renglones y políticamente correctos como para que nadie quede “pegado”. Sin embargo, el CEO del diario, previo a la salida de “El hombre de Clarín. Vida privada y pública de Hector Magnetto”, sostiene que ignora los trámites de la adopción en 1976, cosa que contradice su biógrafo.
Ante este contrasentido, el juez Conrado Bergesio, los carea el 15 de mayo de 2009, pero como es previsible no aportan nada nuevo a la causa.
Sobre el particular, el abogado de Abuelas de Plaza de Mayo, Alan Iud “propuso preguntarle al hombre de ‘Clarín’ si le constaba el rol de Frigerio y Sofovich en las adopciones, pero el juez no hizo lugar a la pregunta. Bergesio también evitó carearlos sobre la relación de la viuda con Frigerio, uno de los dirigentes políticos que con mayor entusiasmo defendió a la dictadura y sus crímenes, imputado en la causa hasta su fallecimiento. Según la declaración de Magnetto, era un vínculo ‘de desconfianza mutua’. Su biógrafo le entendió lo contrario. Era ‘una persona de su confianza, de su amistad’, declaró en mayo ante el juez. ‘Se confirmó que Frigerio y Sofovich intervinieron en el proceso de guarda y adopción (…) ‘La hipótesis es que su intervención no tuvo que ver con cuestiones legales sino sobre la búsqueda de los niños. Una vez más, los testigos cercanos al círculo de Herrera de Noble no pueden acreditar la versión de la imputada sobre las adopciones y dejan en evidencia las irregularidades’, concluyó el abogado de Abuelas”. 14
El 21 de agosto de 2009, José Pirillo, ex propietario del diario “La Razón” y ex socio de “Clarín” y “La Nación” en la empresa “Papel Prensa”, expone ante el juez Bergesio que, en su momento, Magnetto le consigue los niños a Herrera de Noble mediante contactos con el presidente de facto Jorge Rafael Videla. Y agrega que desconoce que “fueran de padres desaparecidos”.
A propósito de lo expresado por Pirillo, el 27 de noviembre de 2009, el genocida Videla presta declaración indagatoria y manifiesta “no tengo nada que ver con el hecho que me imputan. No voy a decir más nada”.
Kelly y “esos dos chicos”
Es el enigmático Guillermo Patricio Kelly quien lleva a los medios el “secreto” de la viuda de Noble en una entrevista que publica la revista “Gente” el 5 de enero de 1984. Allí enuncia que quiere encontrar a Ramón Camps - general durante la dictadura militar llamada Proceso de Reorganización Nacional- para preguntarle por “estos dos chicos” y señala dos tapas de las revistas “Clarín” de 1977, en las que están una nena y un nene de un año de edad aproximadamente. Exige que el militar le entregue la lista de los chicos apropiados, con nombre y apellido de sus padres, del juez que interviene si es que los entregaron y las fechas pertinentes. Y remarca “que me conteste por estos dos”. No hay repreguntas. Mejor dejarla allí. Los elegantes menores son Marcela y Felipe.
Asimismo, Kelly comenta, en tono burlón, en su programa de radio “Sin concesiones” que aquellos oyentes que quieran saber sobre el origen de Marcela y Felipe hablen con la doctora Cadoppi [Norma Nélida Teresa] o con el doctor Katz [Ignacio Pablo]. También, menciona a una tal clínica “Iatros” y a Oscar Camillión.
También, escribe un libro con un título bastante elocuente: “Noble imperio corrupto. Manipulación y engaño.” En la tapa se lo observa con las revistas de “Clarín” de 1977, en las que aparecen los “nobles” niños.
“Página
El 28 de enero de 1990, el diario “Página
Tiempo después, el 20 de marzo, ésta envía una réplica que el medio publica en la sección “Cartas”, bajo el título “Errores”: “(…) Siempre he tenido por norma de conducta mantener las cuestiones personales y familiares al margen de toda polémica, pero en esta ocasión, ante las inexactitudes en que se incurre [declara que] siendo la única hija biológica de Roberto Noble, me asiste el derecho de ser considerada como tal (…) Puntualizo esto ya que al referirse a la herencia de mi padre, se me menciona como ‘hija natural de la anterior pareja de Noble, pero reconocida por éste’. Del párrafo aludido se interpreta que no soy hija de Roberto Noble sino hija natural de mi madre (su anterior pareja), y que Noble me dio su apellido en un acto de magnanimidad (…) le informo que mis padres se casaron legalmente en México en 1958, no pudiendo hacerlo en la Argentina pese a que mi madre estaba separada de su primer marido, pues la legislación vigente por entonces lo impedía (…) el ‘reconocimiento’ (…) fue expresado por Roberto Noble en todos y cada uno de sus actos públicos y privados (…) una paternidad que ejerció cabalmente, procurando por todos los medios hacerla conocer y respetar en todas las instituciones y organizaciones en que tuvo destacada actuación (…) usted no debe ignorar las connotaciones peyorativas que expresiones como ‘concubina’ o ‘hija natural’ revisten para nuestra sociedad (…) [precisa] que los niños adoptados por la señora Ernestina Herrera entre los años 1976 y 1977, recibieron el apellido de mi padre casi diez años después de que éste falleciera”. 17
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Enemigas íntimas I: Herrera ¿de Noble? vs. Zapata ¿de Noble?
Si bien en 1990, en respuesta a la nota de “Página/12” sale a la luz pública Guadalupe Georgette Noble, alias “Lupita” y “Lupe”, hay un enfrentamiento anterior por la herencia del creador de “Clarín”, que recién cuenta “Ambito Financiero” en 1998. No obstante, un lustro antes, Julio Ramos sobrevuela el tema, pero no hay periodistas de investigación que tomen la posta y sigan las pistas dadas por el fundador del diario especializado en economía: “Se hablaría (…) mucho (…) de problemas de herencia por el domino del diario [“Clarín], porque además de su esposa (…) Herrera, Noble tenía una hija de otra mujer (…) Esto se menciona aquí nada más para ilustrar el clima que se vivía. Estas páginas pretenden describir un monopolio [el de “Clarín”], no intimidades de familia”. 18 Sin embargo, más adelante, hay un giro copernicano en el pensamiento del ex ”Clarín” y el 11 de diciembre de 1998, con el título “Guadalupe Noble retornó a ‘Clarín’”, ilustrado con fotos alusivas pertenecientes al libro de Patricio Kelly “Noble imperio corrupto”, refleja –sin firma- la finalización del juicio entre las Noble. Expone a página entera que “Cuando falleció Roberto J. Noble (…) en su estancia La Loma, en 1967, tenía a su lado a (…) Ernestina Herrera y ‘Lupita’, ésta de 10 años. A partir de allí se produce una fuerte puja por la herencia entre la madre de ‘Lupita’, María Guadalupe Zapata y la señora Noble. Se llegó a un acuerdo [y] la hija recibió casi toda la fortuna que rodeaba la estancia (…) [en tanto que] Laura Ernestina el diario ‘Clarín’ muy endeudado por ese entonces (…) Eso marcó una honda discrepancia y nivel de riqueza entre ambas, sobre todo por existir varios testamentos de Noble continuos, que dieron pie a más disputas judiciales. A esto se agregaba quienes decían que ‘Lupita’ había sido inscrita como María Guadalupe Georgette, nacida el 10 de noviembre de 1958 en Tepoztlan, México, y que no era hija de Noble sino de Guadalupe Zapata y Carlos Stehlin [Kelly, el principal sostenedor de esta teoría] (…) que (…) había nacido el 4 de octubre de 1958. Luego se discutió que fue inscrita en Buenos Aires como hija legítima de Noble y Guadalupe y se usó la fecha de 4 de octubre de 1958, además de sacar a ‘María’ del nombre original. Muchos sostuvieron que en realidad era hija de Noble y nacida ese día de octubre pero fue el mencionado Stehlin quien como esposo de Guadalupe Zapata la anotó como hija. Noble se casa con Guadalupe en Culiacán, México, el 31 de diciembre del mismo 1958 y reconoció a la hija. Esto último dio origen a otro juicio porque Noble no se podía haber casado con Laura Ernestina Herrera, años después, si estaba casado con Guadalupe Zapata. Pero se argumentó que no podía ser porque ésta estaba casada con Stehlin, lo que hacía nulo el matrimonio anterior de Noble y válido el de Ernestina (…) ‘Lupita’ tuvo siempre una prueba incontrastable: su total parecido físico con su padre Roberto J. Noble (…) a fines del año pasado, un juez le dio la razón en primera instancia y se abría por parte de la dueña actual de ‘Clarín’ una apelación difícil ante la Cámara, sobre todo como jóvenes con el apellido Noble quedarían los dos hijos adoptivos de Laura Ernestina y no la auténtica hija. Da la impresión que al acuerdo jurídico amigable le debe la salida esa carta de ayer donde se le reconoce a la hija del fundador el derecho de dirigirse al público desde el diario de su padre, aunque legalmente lo haya perdido en la disputa por la herencia frente a la viuda de Noble (…) Es como si la hija hubiera recuperado la totalidad de su ancestro con una reconciliación tras tres décadas de disputas con Laura Ernestina. Humanamente suena razonable este reconocimiento a una hija en la principal obra de creación de su padre. Podríamos ver, de ahora en más, a ‘Lupita’ junto a Laura Ernestina en actos y en representación de ‘Clarín’. Está bien, parece justo. Este humanismo ¿Llegará a ‘Clarín’ y, sobre todo a Héctor Magnetto? No se sabe”. 19
[la negrita no pertenece al texto original]
También, “Ambito Financiero” incorpora una “Carta emotiva de ‘Lupita’”, que publica “Clarín” un día antes. Se titula “Roberto Noble, mi padre” y cuenta su afectuosa relación:
“Un padre no está hecho de bronce sino de alma, sangre y piel. Aunque sea recordado por su obra, detrás de cada hombre público hay siempre un ser humano que ama, acaricia, besa y trasciende en sus hijos (…) fue un hombre trascendente. Supo crear uno de los diarios más importantes del mundo de habla hispana (…) soy su hija (…) [ y me regaló] una infancia feliz y un ejemplo para toda la vida (…) La vida de mi padre está documentada por entero. Y, sin embargo, el documento más certero, la pintura más fiel, están en lo íntimo de mi corazón (…) Era un hombre colmado de sueños y pasiones, brillante y contradictorio. Riguroso, pero generoso siempre (…) Apasionado periodista, político y funcionario, sembró sus ideas en obras y leyes que todavía disfrutamos (…) Para fundar ‘Clarín’, puso en venta con inigualable fe todo su patrimonio (…) para mí fue algo más importante (…) fue mi padre (…) papá (…) recuerdo a tu gente, esos hombres de campo que te querían, te respetaban y, a veces, también te temían. A esos periodistas que procuraban alcanzar la fuerza de tus convicciones (…) siento (…) que tu espíritu y tu coraje están para siempre dentro de mí. Que tu ternura atravesó la muerte y se proyecta en mi pequeña Sara (…) Ella ya sabe que Roberto Noble fue su abuelo. Un hombre que amó a su país y luchó imaginando transformar la realidad, con la política y el diario como instrumentos. Un hombre con debilidades y grandezas. Las verdades de tu vida serán su mejor herencia. Eso es lo que le transmito a mi niña. Para que ella disfrute el orgullo de ser la nieta de un gran hombre, como yo lo he sentido al saberme hija tuya”. 20
La historia por la herencia del fundador de “Clarín” se inicia cuando Marta María Guadalupe Zapata Timberlake, ex de Roberto Noble, demanda a Ernestina Herrera, en defensa de la menor ‘Lupita’, pues considera que el testamento que deja su ex, no es justo y su hija sale en desventaja. Zapata apunta sus misiles sobre la supuesta ilegalidad del matrimonio Noble/Herrera. Sus abogados son dos conocidos de “Clarín”: Ramón Martos y Juan Carlos Gentile Pace. La idea es sencilla: Noble se casa en 1958, en Culiacán, México, con Zapata, por lo que el matrimonio a posteriori, en 1967, con Herrera debía ser nulo. Por lo que: “Guadalupes”: 1 vs. Herrera: 0.
En tanto, la ex bailarina de flamenco no se queda atrás y sostiene que el matrimonio Noble/Zapata es el nulo, porque la mujer está casada desde 1955, en Buenos Aires, con Carlos José Federico Stehlin y jamás se divorcian. Por lo tanto, el marcador se invierte: Herrera: 1 vs. “Guadalupes”: 0.
En tanto, la madre de “Lupita” guarda un cambio salvador de último minuto: en un juzgado civil presenta una demanda solicitando la anulación de su matrimonio con Stehlin. ¿Motivos? Cuestiones religiosas. Suena muy oportuno e increíble que plantee lo espiritual tres décadas después. Además, agrega que Stehlin está casado desde 1942, con la francesa Viviane Alice Cochery, en Nueva York, datos que ella desconoce en 1955.
Por el otro lado, para aumentar el poderío ofensivo, al equipo legal de “Clarín”: Bernardo Sofovich y Eduardo Busso, Magnetto incorpora a José María Sáenz Valiente, quien halla la pícara demanda de Zapata.
En su libro López destaca que “Noble tenía una hija, Guadalupe, fruto de una relación mantenida a fines de los años 50 con Marta Guadalupe Zapata, con quien nunca se casó, por lo cual, en términos jurídicos de la época, Lupita, como todos conocían a la niña, era hija natural o extramatrimonial y eso reducía significativamente sus derechos hereditarios”. 21 Agrega más adelante que “algunos memoriosos de los tiempos de Noble recordaban aquel tema del casamiento ficticio y por poder al que se recurrió cuando Lupita creció y llegó a la edad escolar. Para cumplir con el insistente deseo de su hermana Sara Noble, que quería que la niña, nacida en México en 1958,estudiara en un colegio religioso, el fundador accedió a que le trajeran a ese país una partida de matrimonio que usarían para inscribir a Guadalupe en un colegio religioso, que todavía no aceptaba hijos extramatrimoniales. Era obvio que Noble no estaba casado (…) Zapata (…) estaba formalmente casada con Stehlin (…) era algo que se sabía y se comentaba por lo bajo, aunque Noble no se ocupaba de ocultar. No hay registro alguno de que Noble hubiera reconocido alguna vez estar casado con Zapata (…) Se trataba casi de una travesura familiar sólo comprensible a la luz de los prejuicios de la época: de hecho ese particular certificado, apócrifo y conseguido a distancia, nunca apareció en ninguna discusión posterior”. 22
[la negrita no pertenece al texto original]
Entonces, tenemos un poderoso que con la excusa de una “travesura familiar” miente en los papeles y en el afecto. En un país machista como la Argentina si la “travesura” la cometiese una mujer: ¿cómo se la llamaría?
El “dream team” legal de “Clarín” arma dos contragolpes: 1. buscar algún error o falsedad en la documentación Noble/ Zapata (certificado de matrimonio ilegal para que la pequeña ingrese al colegio religioso) o, 2. acusar a Stehlin de bigamia, para que tema y confiese que su relación con Zapata es normal por entonces y que el matrimonio es válido.
Este último contraataque resulta fallido, pues Stehlin, -representante de una multinacional dedicada a la fabricación de armamento- está en Brasil, pero zigzaguea la información que se necesita para “armar” el caso.
Entonces, apuntan a la búsqueda del certificado del matrimonio Noble/Zapata, el que hallan en México, en Culiacán.
¿Contiene realmente vicios de nulidad? Sí, es falso. Y hasta la firma de Noble es apócrifa.
Para evitar una posible embestida por Zapata, los abogados de “Clarín” consiguen, en París, la sentencia de divorcio de Stehlin/Cochery que data de 1944.
Más asombrosa es la información que aporta Guillermo Patricio Kelly, que “refrita”, reconstruye, el sitioweb “Seprin”. Lamentablemente, no deja bien establecido cuándo es textual de Kelly y cuándo opinan los responsables del medio. Se suma esto al desorden del diseño, un caos visual que no permite valorar con precisión la información, pero con buena voluntad y paciencia se puede colegir que:
a. Zapata está divorciada de Stehlin; b. Stehlin es amigo de Noble y le habría sugerido casarse con su ex esposa Zapata. c. se ponen de acuerdo para que la pequeña “Lupita” pase como hija de Zapata y Noble, ya que éste último es padrino de la niña; d. el 31 de diciembre de 1958 se debe casar Noble con Zapata, pero es reemplazado en el Registro Civil de Culiacan por Juan Carlos Gentile Pace, en su momento, miembro de la Justicia Argentina. La simulación se logra por el parecido entre ambos y porque Noble le da como documentación su pasaporte. Gentile firma el acta como si fuese Noble y agrega su huella digital; e. la presunta firma de Noble es arrancada y una parte manchada con tinta; f. Emilio Jaján consigue el acta original, sin alteraciones (ver infra) ; g. “Lupita” nace en dos lugares: México y la Argentina; h. en la Argentina se la “rebautiza “con el nombre Guadalupe Georgette Noble, se le quita “María” como figura en el original; h. la muerte de Noble es sospechosa y también su testamento. Siempre según Kelly “no sólo se sospecha de la falsificación de un testamento que se habría realizado 6 meses antes de morir Noble, sino un interesante testimonio de una reunión y un informe dado a conocer por la sociedad Latinoamérica de Prensa (SIP), que estaba integrada por los principales diarios de América: ‘En el despacho del entonces director del diario ‘La Prensa ‘respondiendo al interrogante del Dr. Agustín Edward de ‘El Mercurio’ de Chile, Gainza Paz (Director de ‘La Prensa’) le respondió <<Clarín dejará de ser un problema en la primera quincena de enero próximo, porque tenemos informaciones precisas, que para entonces Roberto Noble dejara de existir y gente amiga se hará cargo de la empresa>>. Esto le fue transmitido a Reinaldo Bandini, por Michel Iriart, para entonces director regional de la agencia ‘France Press’”. 23
A Juan Carlos Gentile Pace se lo puede ver en una foto que ilustra la nota “Visitó ‘Clarín’ la hija de nuestro fundador” de octubre de 1969. El texto expone, entre otras cosas, que ”el doctor Juan Carlos Gentile Pace (…) acompañaba a la gentil visitante”. Queda bien señalado que se la presenta como la hija de Noble, quien lleva nueve meses muerto. Ya la directora del medio gráfico es Ernestina Herrera de Noble.
Al margen de Kelly cuando todo parece ganado por “la señora”, aparecen en este drama griego los Jaján (ver infra).
Enemigas íntimas II: Piti vs. Lupe
En 1998, cuando “Clarín” del 10 de diciembre de 1998, publica “Roberto Noble, mi padre”, las relaciones entre la esposa y la hija del fundador del “diario para toda la familia” están más calmas.
Guadalupe Noble recibe, en su momento, inmuebles en la República Argentina y el Uruguay, entrega diaria y gratuita del diario “Clarín”, un palco en el Teatro Colón y un valioso carnet de periodista. Seguramente “Lupita”, ya “Lupe”, entiende que le corresponde más de lo acordado y recurre al afamado constitucionalista Germán Bidart Campos. El eje de la discusión es su “apartamiento espiritual y periodístico” del diario.
Se inicia con el expediente N° 4553/98, caratulado “Noble, Guadalupe Georgette c/ Herrera de Noble, Ernestina Laura s/ derechos personalísimos” del registro del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil n° 35 de la Capital Federal.
Una nueva tormenta judicial: Herrera de Noble vs. Emilio Jaján
La viuda de Noble obtiene la documentación adulterada y parece ganar la guerra, pero es un triunfo pírrico...
Hay dos versiones sobre quién rescata la valiosa “prueba”. La oficial sostiene que “el investigador contratado por ‘Clarín pudo comprobar que (…) la heredera del presidente tenía otro cónyuge”. 24 Seguidamente el biógrafo de Magnetto precisa que “Emilio Jaján, un buscavidas de linaje peronista, un personaje de los que pululan por los arrabales de la política, se acercó a ‘Clarín’. Jaján enviaba pretenciosos mensajes a partir de supuestas conexiones que sonaban a fábula. Aunque escéptico, Magnetto sucumbió a la tentación y le pidió a José Aranda que se ocupara de ese traficante de influencias, que se deshacía en promesas. Su único móvil –decía- era evitar la consumación de una estafa pergeñada por su archienemigo Martos, uno de los abogados de Zapata. Martos era un astuto buscapleitos que se había dedicado a construir, a fuerza de imaginación y contratos, el entramado con el que se intentaba impugnar el matrimonio de Ernestina. Misionero y también peronista de la vieja guardia, había sido socio en la política y en los negocios de Jaján. Terminaron peleados a muerte por presuntas desavenencias en las ventas de unos terrenos en esa provincia, operaciones que luego se mezclaron con denuncias de lavado de dinero del narcotráfico. Aunque nunca quiso reunirse con él, Magnetto volvió a morder la manzana y admitió que podía aportar pruebas precisas (…) En uno de sus contactos, Jaján introdujo a un abogado de la Policía Federal, que aseguraba estar en condiciones de conseguir completo el expediente del divorcio de Stehlin y la francesa. El gerente lo consultó con Sáenz Valiente y el abogado fue claro y terminante. ‘Con la copia de la sentencia estamos cubiertos. No necesitamos otra cosa’. Otra vez, no pudo con su genio y quiso tener copia de todas las páginas de la causa (…) Tras aceptar un pago de cincuenta mil dólares ‘exclusivamente para el abogado; yo por esto no cobro nada’, Jaján reapareció con un duplicado de la partida irregular de Culiacán. La misma que ya se había conseguido. Sabía que no arrimaba nada nuevo (…) Cuando Jaján se presentó con la copia, Aranda le reiteró que ya la tenían, y que además, el juicio estaba definido. Jaján se enfureció y desató una enfermiza cruzada judicial y mediática contra ‘Clarín’, que duró varios años, con no menos de cinco denuncias penales contra sus directivos —todas cerradas por inconsistentes— y un juicio civil por un reclamo millonario de ‘honorarios’, que terminó perdiendo con costas en todas las instancias.
Es realmente apasionante, pero no es suficiente, quiero ver, leer y saber más. Saludos Humberto.-