Ya desde púber, la actual Ministra de Seguridad, mostraba uno de sus mejores talentos: no hacerse cargo, a lo avestruz. Fue así que se rateó de aquella reunión en enero del 74, en la que el Presidente Perón fustigó a los diputados afines a montoneros, luego del brutal ataque terrorista al Regimiento de Azul y de que la orga declinara a abandonar las armas en Democracia.
Más acá en el tiempo se borran las huellas de su paso por la fracasada Alianza y cuando los K se acordaron de los Derechos Humanos en 2003, apareció agarrada del Ministerio de Defensa, en una suerte gubernamental de venganza antimilitar.
Hubiese sido mejor tomar sólo el camino de la justicia con aquellos que asesinaron y delinquieron usando el uniforme de la Patria como disfraz, que la estrategia del odio; que sin embargo consiguió un hecho inédito: unir a toda la oposición acerca del desmanejo, el desmadre y el aniquilamiento de las Fuerzas Armadas durante su gestión; lo que ha dejado al país en un grado de indefensión gigante no sólo ante otras potencias, sino contra los capos narcos que lo invaden a gusto, sin tener siquiera los radares adecuados.
Hoy desde el Pro hasta Pino Solanas, todos concuerdan en que el país sólo cuenta con 7 Cazas operativos, por empezar a citar. En ese callejón que es la inseguridad y con 7 años para crear una Escuela de Policía coherente, la mejor idea parece ser desarmarlos, mientras Garré se atrinchera tras las rejas de su casa y culpa desde el PO, hasta Duhalde, pasando por Carrió, Macri, y los ovnis de Fabio Serpa por su incapacidad, sin mirar al enemigo interno desplazado, que cuenta con poderosa logística intimidatoria.
Cada rascar es encontrar bosta, y ahora salta el tráfico de la droga en Morón presumiblemente vía gente corrupta de la Fuerza Aérea, es decir de su responsabilidad debida al tiempo que lleva el descontrol. Y encima se dice “garantista”, insultándonos a los que realmente creemos en las garantías de la Constitución, que poco tienen que ver con su manifiesta ineptitud.
Si le queda algo de dignidad, como primer paso debiera renunciar ya.
Juan Manuel Duarte
DNI 23.464.924