Banderas, bombos, petardos, curiosos, militancia, slogans, pañuelos blancos, cascos de los mineros, mucho ruido y algunas nueces. El homenaje a Néstor Kirchner, concluyó con el programa especial de Hebe de Bonafini, en vivo y en directo por la radio de las Madres, en el que le leyó una carta a “él”.
Como estrellas de rock fueron recibidos el futuro vicepresidente Amado Boudou y, en segundo lugar, Abel Fatala, quien intentó no hacer declaraciones y solo dijo que el juicio del día de ayer, en el que fueron juzgados con cadena perpetua, entre otros, el represor y ex niño con cara de ángel, Alfredo Astiz, fue histórico y el mejor homenaje a Néstor.
Al concluir el breve recordatorio atestado de gente deseosa de sacarse una foto con sus ídolos, Abel Fatala dialogó brevemente con este periodista y dijo que "el mejor homenaje que se le podía hacer a Néstor era abrazar a las Madres sabiendo el sentimiento que Néstor tenía con ellas sabiendo que él fue un símbolo de unidad de las Madres". (Ver galería de imágenes).
Acompañado de sus dos hijos varones que, insistentemente le pedían algo para comer, evitó mencionar la palabra “revancha”, dado el recibimiento que obtuvo luego de estar en el ojo de la tormenta tras el escándalo de Sergio Schoklender y la Fundación Madres de Plaza de Mayo y afirmó que "hay una valoración por parte de la sociedad acerca de las cosas que estamos haciendo". Por otra parte, atacó a los "que hicieron oposición implacable del 2007 en adelante" pues "sufrieron un castigo muy fuerte en las urnas".
Anteriormente, los oradores presentes (Amado Boudou, el intendente de Quilmes, Francisco “Barba” Gutiérrez, Víctor Santa María, titular del SUTERH y el citado Fatala) hablaron de los 30 mil desaparecidos y sumaron a Néstor. Un inevitable Dèja Vú me recordó al saliente Schoklender en el Mercado Central.
Sandra Russo con una adolescente, posiblemente su hija, también estuvo presente al igual que el periodista Eduardo Anguita y los funcionarios Luis Eduardo Duhalde y ex abogado de las Madres, Eduardo Barcesat que se retiraron rápidamente. El calor se hacía sentir con la música, los cánticos, el olor a choripán, la garrapiñada y algunos dulces. Los vendedores tuvieron su gran tarde y los que estuvieron más cerca del pequeño escenario, también.
Boudou no paraba de sonreír y de recibir CD’s de jóvenes que le ofrecían escuchar algunos demos de sus respectivas bandas de rock. Por ahí, pasó una señora mayor con cara de pocos amigos y dijo: “Esto parece Macondo”. Pobre, evidentemente, no estaba invitada a la fiesta nacional y popular. Se fue y se quejó de lo difícil que era llegar al microcentro.
La Kolina, La Cámpora, el Movimiento Evita, la Juventud Sindical, los mineros de Río Turbio, el diputado Edgardo Depetri —el más emocionado de la jornada— se iban retirando mientras el humo de los petardos generaba una neblina londinense. Pero claro, acá lo que sobraba era la pasión bien argentina. Las mujeres movían sus caderas y Hebe le hablaba a Néstor.
Por un momento, cerré los ojos y escuché su respuesta. Me despertó la lectora de García Márquez a los gritos: “Es el parlante que está a todo lo que da”. “¿Macri no dice nada?, se preguntó” pero antes que terminara la pregunta Amado le guiño uno de sus celestes ojos y la quejosa mujer cambió de parecer. Hoy somos todos nacional y popular. ¡Vamos por todos!, diría Juan Manuel Abal Medina.
Luis Gasulla
Twitter: @LuisGasulla