Tal como estaba previsto, y como consecuencia de la política en materia de comercio exterior llevada adelante por Guillermo Moreno —que ya generó tensiones con Brasil, Paraguay y Uruguay, el Gobierno de Pepe Mujica— implementó algunas medidas proteccionistas de su industria y otras que le permitan compensar de algún modo las trabas impuestas desde Argentina a sus exportaciones.
Entre ellas, se destacan el incremento de hasta el 4% del reintegro adelantado de impuestos a las exportaciones y el estricto control de la Aduana para garantizar el cumplimiento a la Ley de Envases.
La decisión de Moreno frenó el ingreso al país de casi un 50% menos de productos uruguayos con relación al año pasado, lo que motivó que la administración de Pepe Mujica haya comenzado una campaña orientada a la búsqueda de nuevos mercados.
El rubro más castigado fue el de la vestimenta, frente a lo cual Uruguay creará un fondo para la diversificación de exportaciones, en procura de colocar sus productos en Chile, México, Colombia, Perú, la Unión Europea y EE UU, y estudia el otorgamiento de un subsidio adelantado.
Asimismo, otros sectores también fuertemente afectados fueron el papel, la madera y la marroquinería.
Entre las medidas a adoptar por Uruguay, se destacan además, la reforma al régimen de adelanto del IRAE —Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas— y un anticipo del subsidio a la vestimenta, vinculado éste último con la demora al otorgamiento de la licencia no automática y declaraciones juradas de importación por parte de la Aduana argentina.
Nidia Osimani
Twitter: @nidiaosimani