Días pasados leía una nota titulada “El acoso rural argentino en cifras”, de Emilio Cárdenas, que en términos generales decía que la Argentina, que era considerada el granero del mundo, debido a la aplicación de una política populista y demagógica de pretender generar precios bajos para el consumo interno, consiguió un efecto inverso y la destrucción de todo el aparato productivo.
La carne soportó el primer embate, y la Argentina de ocupar el quinto lugar en el mundo en el 2005 como exportador de este producto, pasó al décimo, y sigue cayendo en picada. Uruguay exportará para este año más del doble que la Argentina, e incluso Paraguay lo superará.
Con estas políticas equivocadas, producto de la tozudez ideológica de los “genios” que manejan la economía, no se consiguió que la carne bajara de precio y en definitiva se perjudicaron los ganaderos y consumidores.
También hacía mención a la situación de los productores de fruta del Valle de Río Negro; y que en los últimos siete años la exportación de manzanas cayó un 63% y la de peras un 34%. En los nueve años de gestión del gobierno de los Kirchner las ventas al exterior bajaron un 70%.
Por el afán confiscatorio del Estado nacional, y por la aplicación de de las retenciones y otros impuestos, los exportadores de soja reciben un valor dólar de 1,01, para el trigo de 0,95 y para la carne de 1,05. Es el socio mayoritario en las ganancias, en la pérdidas se borra.
En síntesis, las políticas económicas que se emplean solo persiguen un fin recaudatorio sin importarles las consecuencias que producen. Y aquí quiero hacer una reflexión.
¿En qué condiciones quedará el país cuando estos ineptos deban dejar el gobierno?
En el sector ganadero, un achicamiento del mismo por la mala rentabilidad, con la pérdida de stock de más de un millón y medio de cabezas de ganado.
En el sector agrícola, desaliento por las trabas que hay, que impiden comercializar las cosechas y obligan al productor a guardarlas en silos, cepo cambiario, dólar mentiroso, obstáculos en las importaciones de los agroquímicos, etc.
En el sector energético, una profunda crisis por falta de inversión, que nos obliga a importar combustibles produciendo una importante sangría de divisas, y la imposibilidad de atender el requerimiento de energía eléctrica que necesita el sector industrial.
En el sector del Transporte Ferroviario: a pesar de los generosos subsidios a los amigos del poder que lo explotaban, no hubo inversión alguna en la renovación del material ni mantenimiento. En el 2005, con la intervención del entonces Secretario de Transporte Jaime, se compró 1.500 millones de pesos en material ferroviario, en realidad chatarra ferroviaria, que se arrumba en distintos galpones sin producir mejora alguna, por lo que llegamos a situaciones previsibles como el accidente de Once, y al levantamiento de ramales por los continuos desperfectos en el material rodante.
Automotor: la poca o casi nula inversión en rutas para un país tan extenso como el nuestro, que al carecer de autopistas, hacen que encabecemos las encuestas como uno de los que tienen mayor cantidad de accidentes fatales en sus rutas.
En el sector financiero: una monstruosa deuda con organismos como el ANSES, a quien se recurre permanentemente para financiar su política de propaganda en programas como fútbol para todos; automovilismo para todos; 678, etc. Negándole la actualización de sus haberes a sus verdaderos dueños, y cometiendo un verdadero genocidio esperando que la muerte de los abuelos cancele sus reclamos.
La apropiación indebida de Fondos, casi 100 mil millones de pesos de los ciudadanos que habían elegido el sistema de las AFJP, y que fueron dilapidados en la construcción del falso relato.
Algo similar pasa con el Banco Central, el Nación, AFIP, PAMI, etc., desde donde el gobierno se financió en este descalabro de la economía que llevaron a cabo, tomando efectivo a cambio de papelitos con la leyenda “que pague el que viene”.
En el sector judicial: el kirchnerismo nombró el 50% de los jueces que hay en la actualidad, lo que le permitió entre otras cosas llevar a cabo parodias de juicios, que violan toda norma jurídica contra los uniformados que combatieron a la guerrilla en los 70. Manteniendo a los que son funcionales al poder de turno como Oyarbide y Servini de Cubría, como garantía de impunidad para todos sus funcionarios y amigos. (Jaime; Hebe de Bonafini; Felisa Miceli, entre otros)
La Corte Suprema de Justicia, con algunos ministros como Zaffaroni que alquilaba varios inmuebles donde se ejercía la prostitución, solo de una rara coincidencia.
Y también heredaremos los juicios por los que deberemos pagar miles de millones de dólares por las expropiaciones de Aerolíneas y de YPF.
Condiciones internas: una escandalosa emisión monetaria sin control que alimenta la espiral inflacionaria, por ello el gobierno modificó
Pero lo más peligroso creo, será para quien intente desactivar la verdadera bomba que significan los diferentes planes sociales otorgados.
En fin, solo un análisis superficial de lo que tendrá que enfrentar el próximo presidente.
Luis Razzolini
luisrazolini@gmail.com