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The Master

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LA PSICOPATÍA DEL PENSAMIENTO MÁGICO TRAE CONSECUENCIAS
LA PSICOPATÍA DEL PENSAMIENTO MÁGICO TRAE CONSECUENCIAS

Ficha técnica:    

 

Título para Latinoamérica: The Master.

Título original: The Master.

Dirección y Guión: Paul Thomas Anderson.

Género: Drama- Apta para mayores de 16años.

Reparto: Joaquin Phoenix (FreddieQuell), Philip Seymour Hoffman (Lancaster Dodd), Amy Adams (PeggyDodd), Laura Dern (Helen), JessePlemons (Val Dodd), RamiMalek (Clark), Ambyr Childers (Elizabeth Dodd), Kevin J. O’Connor (Bill William), Christopher EvanWelch (John More).

Web oficial: www.themasterfilm.com

Distribuidora: Alta Classics - Montaje: Leslie Jones, Peter McNulty.

Productora: Ghoulardi Film Company, Annapurna Pictures.

Música: Jonny Greenwood - Fotografía: MihaiMalaimare Jr.

País: EE.UU.- Año: 2012. Duración: 137min. – Estreno Argentina: 28-02-2013.

The Master (2012), es un drama psicológico basada en la vida de L. Ron Hubbard, fundador de la pseudociencia dianética / cienciología. Curiosamente en el guión, no se hace mención a estos términos, ya que relata los instantes previos. Es la gestación del movimiento sectario y sus fundamentos teóricos anticientíficos, los que se revelan en la pantalla.

Paul Thomas Anderson, plasma una crítica aguda de la “irracionalidad organizada”, en detrimento de la comunidad. Pone claro sobre oscuro, en un relato central que conmueve a la platea, la relación de un médico-psiquiatra-encarnado por Philip Seymour Hoffman (Lancaster Dodd)-, y su paciente Joaquín Phoenix (Freddie Quell). Una psicosis manifiesta en plano detalle y sus intrincadas relaciones que desnudan otras carencias. Toda una familia disfuncional, encabezada por el fundador de una escuela sectaria destructiva. El Dr. Lancaster Dodd (representando a Hubbard), ¿es la causa o consecuencia de la psicopatología que pretende tratar?

 El film aborda la vida profesional y privada del escritor, médico y psiquiatra Lancaster Dodd, que da vida a un relato mitológico mayúsculo: la construcción de una religión originada por extraterrestres, unido en pareja a una joven y bella mujer: Amy Adams (Peggy Dodd), contrapunto imprescindible en un triángulo enfermizo. “El maestro” (The master), así llamado por su feligresía, consume drogas, es paranoico y termina viviendo en un barco con toda su familia.

En "El Maestro", Philip Seymour Hoffman interpreta a Lancaster Dodd, el creador de una religión llamada "La causa". Es también el nombre de su primer libro, un tomo religioso muy parecido al de Hubbard: "Dianética".

Lancaster es tratado por sus discípulos de “Maestro”. Un rebelde veterano naval, Freddie Quell (Phoenix), que se pasea en su yate; y Lancaster lo toma bajo su ala como su mano derecha y su conejillo de indias (experimentará con el desdichado bipolar). Los trabajos de Joaquin Phoenix y Philip Seymour Hoffman, son antológicos. Este último, entiende como nadie el rol del actor: hace fluir una corriente empática extensa entre sus colegas. Es primus inter pares, en la trama. Lo sabe y lo demuestra magistralmente.

 La historia es bifrontal: el maestro y sus discípulos por un lado, y la singular relación (por no decir enfermiza) con su asistente Freddie (un vagabundo, un “cuentapropista”, que se convierte en su fiel compañero de ruta), por otro. Quien más temprano que tarde, empezará a tener dudas sobre la metodología de abordaje de su mentor. El maestro lo usará como objeto de estudio de sus experimentos y en el tratamiento de su psicosis.

Los métodos de Dodd son polémicos: regresiones a “vidas pasadas”; confrontación dura (verbal y gestual), rayana a maltratos violentos que a menudo, ponen en peligro la integridad física del paciente.

El director, creador de Boogie Nights (Noches de placer 1997); Magnolia (1999), Embriagado de amor (Punch-Drunk Love, 2002); y el superlativo film Petróleo sangriento (There will be blood, 2007), construye con “El Maestro” (2012), una narración donde la ambigüedad es central. Las relaciones asimétricas nos aleccionan de los peligros del pensamiento mágico en progreso. Contrastes y contrapuntos, como pilares de una ética que asedia a la racionalidad.

 El guión y la “construcción del verosímil” es exitoso. Lo mejor: los protagónicos; lo más flojo, el ritmo que decae. Propio de los textos descriptivos. Quieren explicar mucho y terminan explicando poco, por afectación. El entramado, parte de los minutos posteriores de la Segunda Guerra Mundial, donde la atmósfera ambigua de la desesperanza y la reconstrucción social, dan rienda suelta a todo formato nuevo de relaciones interpersonales. Es en ese contexto, donde la escuela del maestro se desarrolla y prospera. Un árido relato desde el prisma de un mesías posmoderno, y su ad látere lumpen, forzados a encontrarse y quizá a “curarse” mutuamente.

 No es la primera vez que el tópico de la “Cienciología”, o “Cientología” (Scientology, en inglés), es tratado por Hollywood. En la serie de TV. Los Simpson –temporada 9- el episodio: “Thejoy of sect", el protagonista, Homero, es cooptado por un grupo sectario llamado "Los Movimentarios", que lo llevan junto a su familia a un campo de trabajo. “Bombardeados” por técnicas de manipulación (persuasión coercitivas), los dejan sin patrimonio y se apoderan de todo Springfield. Pero sí, la primera ocasión, que ahondan en la profundidad de la psiquis de su fundador y su comunidad.

Las miserias y las contradicciones de su líder se corporizan en el metraje. Rescato una escena: el maestro, en el baño con su mujer. La fémina le pone coto a las “locuras” de su pareja, al tiempo que masturba digitalmente el sexo del líder para tranquilizarlo y convencerlo; limitando las terapias excéntricas del terapeuta. Toma conciencia de su ser “chanta”. Todo un logro.

 La banda sonora del film (de Jonny Greenwood), es uno de los puntos fuertes a resaltar. La música es inquietante y propiciatoria. Otros lo signan la fotografía y dirección artística. Las imágenes son alucinantes, de una calidad, texturas y un color extremos que seducen. Las secuencias que se desarrollan en el desierto son estéticamente atractivas y más. En ellas, el maestro visualiza el fin del tratamiento psiquiátrico de su amigo y paciente. Hay que saber leer “el campo y fuera de campo” de las distintas tomas. Ahí se desprende la cancelación de la historia. Un dispositivo muy bien utilizado.

En conclusión: un alegato demoledor de los peligros del pensamiento mágico cuando no hay fuerzas “racionalistas” que lo neutralicen. Mucha agua ha pasado debajo del puente de esta fantasía que se apodera del dinero y la cordura de las personas. Es poder en sí; actúa también, como poder supragubernamental. Saludable iniciativa de Paul Thomas Anderson: la anatomía de una pseudociencia a través de la lente de su cine. Muchas celebrities de Hollywood se asocian y militan en la impresentable cientología. El cine como antídoto de la estupidez humana, que no tiene fin.

 

Gustavo Contarelli

 

 

Puntaje del film: 4 Tribunas

Puntaje actor protagónico: Philip Seymour Hoffman (Lancaster Dodd) 5 Tribunas ¡Imponente!

 

Referencias:

5 Tribunas: excelente/imperdible

4 Tribunas: muy buena

3 Tribunas: correcta - buena

2 Tribunas: regular

1 Tribuna: mala/pésima

 

3 comentarios Dejá tu comentario

  1. Josefina, ¿cómo hiciste para no quedarte dormida?, la parte técnica de la película podrá ser fabulosa, pero la historia se torna más densa y lenta que pelea de caracoles en arenas movedizas. Sí, un 10 felicitado para las actuaciones magistrales de los tipos, pero el guionista... viejo, ¡dale ritmo, dale!

  2. HE VISTO PELICULAS MUY DENSAS Y SIN EMBARGO NO ME DUERMO ESTA ESPECIALMENTE ME MANTUVO ATRAPADA POR LAS ACTUACIONES, DENSO EL LIBRO, PERO, ME GUSTA MUCHO VER LAS PELIS EN EL CINE , AUNQUE A VECES NO LA PASO BIEN. SALUDOS

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