Mauricio Macri encendió la mecha cuando aseguró que no descarta competir en las PASO con Ernesto Sanz y Elisa Carrió. Lo hizo al elogiar a los precandidatos de FA-Unen y considerar que las PASO pueden ser "la herramienta" que necesita la oposición para encontrar "cosas en común".
"Las PASO pueden ser la herramienta que necesitamos, no lo descarto", escribió Macri, al tiempo que advirtió que una eventual competencia no necesariamente hará que "cada uno deje de ser quién es". En ese sentido, afirmó que el camino "para cambiar la Argentina necesita ser lo más ancho que podamos construir".
"Somos muchísimos los que queremos un cambio verdadero y que no estamos dispuestos a renunciar a esa oportunidad. Veo esa vocación en Ernesto Sanz, la veo en Lilita Carrió, y en otros dirigentes de todo el país", agregó el líder del PRO.
Las palabras de Macri ocurren en medio de la implosión del frente UNEN y cuando su propio espacio intenta dar resistencia a pactos extra partidarios.
El radical Oscar Aguad es uno de los que admite la posible disolución de ese espacio. “Si no conseguimos un candidato, UNEN corre el riesgo de disolverse. Con cinco candidatos, el país ya va a tener su candidato fuera de UNEN. El ruido de UNEN es la multiplicidad de candidatos. Es una debilidad y no una fortaleza como dijo Sanz”, aseguró hace algunas semanas.
En ese mar de incertidumbre, el mendocino Julio Cobos también aportó su granito de confusión, al asegurar que mantener el Frente Amplio "sin revisión" es como "echarle agua a un balde lleno de agujeros", con lo que abrió la puerta a su salida.
En este sentido, Cobos criticó con fuerza a la conducción de la UCR, encabezada por el también precandidato Sanz y descalificó a Gerardo Morales, que le abrió la puerta de la alianza opositora a Sergio Massa.