Opinando sobre política me equivoqué "fiero" cuatro veces, a saber:
1) Después del desastre que hicieron los peronistas entre los años 73 y 76, únicos responsables de todo lo que ocurrió después, estaba convencido de que la gente se había dado cuenta de que el peronismo es una farsa. No fue así; el pueblo argentino siguió votando al peronismo.
2) Después de la caída del muro de Berlín, estaba convencido de que los zurdos se habían dado cuenta de que el comunismo también es una farsa. Tampoco fue así; de hecho sigue habiendo partidos de izquierda, y lo que es peor, hasta hay personas que los votan y les dan una banca en el Congreso.
3) La que creí iba a ser la última fue en diciembre de 2001. Ahí pensé que la sociedad había aprendido, pero especialmente la clase política, y fue esa la vez que más me equivoqué, luego superada por la cuarta. No solo no aprendimos nada, sino que los que vinieron después, Néstor y Cristina, fueron lejos los peores de la historia.
4) Y llegamos a mi cuarto error. Creer que Bergoglio iba a ser un Papa ejemplar.
De todas estas equivocaciones, en lo personal, la que más me duele es la decepción que tuve, como muchísimos argentinos, con el entonces Cardenal Jorge Bergoglio. Será, supongo, porque era la menos imaginable. ¿Como podía ser que el Papa se vuelva kirchnerista después de todo lo que ellos le hicieron?
Cuando Bergoglio era simplemente el Cardenal Bergoglio, los K, y especialmente las Madres de Plaza de Mayo lo odiaban e insultaban sin el menor reparo, incluso lo acusaron de formar parte de la dictadura.
Pero más allá de eso, y los desplantes que sufrió Bergglio por parte de Néstor Kirchner y su esposa cuando era Cardenal, hubo operaciones tan despreciables como burdas.
La primera fue que el embajador ante la Santa Sede durante el gobierno de Cristina Fernández, Juan Pablo Cafiero, sabiendo que Bergoglio tenía muchas chances de ser electo como sucesor de Benedicto XVI, se encargó de hacer "lobby" para boicotear su candidatura distribuyendo documentos falsos que lo involucraban con la dictadura del golpe de 1976.
Pero lo más burdo fue lo que hicieron en el diario kirchnerista Página/12. Trucaron una foto -y hasta la pusieron en la tapa del diario- de Bergoglio con el Gral. Videla que se suponía era de la época de la dictadura.
Solo describo algunos hechos concretos, reales y puntuales, que demuestran que clase de personas son unos y otros. Todo lo demás es historia reciente y todos la conocemos, por lo que no creo que valga la pena recordarla.