El poder de la iglesia evangelista ya casi va superando al de la católica y volvió a poner la mano donde no le corresponde, aunque esta vez apretando para lograr sus objetivos de evitar que la ley de educación sexual integral (2006) finalmente se aplique obligatoriamente en las escuelas.
Es que la semana pasada y sin repercusión, el presidente Mauricio Macri se reunió con pastores evangélicos.
En el encuentro (aún si comunicar de forma oficial) participaron la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y la ministra de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley.
En el mítin, el Presidente se llevó un apriete del poderoso pastor evangelista Jorge Seneewald, sobre la ley de educación sexual que se debate en el Congreso y en la Legislatura provincial, según él mismo se jactó en una comunicación a publicada por el sitio Letra P.
Sin ponerse colorado, Seneewald, ahora de estrecho vínculo con Vidal, confirmó el apoyo al Gobierno para otorgar ayuda alimenticia y social en el conurbano bonaerense, aunque le aclaró a su interlocutor que "aprovechó" y le manifestó a Macri el rechazo de la Iglesia al avance de la negociación por la modificación de la ley de educación sexual a nivel nacional.
Lo que hizo el pastor, en otras palabras, fue apretar al dúo macrista a cambio de ayuda social.
“La Iglesia Evangélica está siempre ayudando al prójimo y ayudando a los demás. Disfrutamos de eso y le confirmo que podían contar al 100% con nosotros en ese aspecto porque tenemos iglesias en todos los barrios”, contó el pastor Jorge, encargado de la Iglesia El Encuentro.
En un lento pero seguro avance de poder, la comunidad evangélica ostenta un buen vínculo con Cambiemos y de hecho ha colaborado activamente en los barrios.
El jefe evangelista planteó que su comunidad resistirá y se manifestará para frenar la modificación de la ley de educación sexual.
“Aproveché y le dije que estábamos preocupados y que la Iglesia iba estar muy firme y no íbamos a negociar bajo ningún punto de vista todos los ataques constantes a la familia, la Iglesia y todo lo que tenga que ver con Dios. Le dije que lo que se viene es peor que lo del aborto y la manifestación de la Iglesia va a ser mucho más fuerte porque están queriendo modificar la ley de educación sexual”, cnfesó sin sonrojarse Seneewald.
La iniciativa ya fue sancionada por la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires pero, según advierte el pastor, Vidal se comprometió a frenar su avance en el Senado bonaerense.
"Ella es diferente, porque automáticamente dijo que ya mismo lo paro y se comprometió a que esto no va a avanzar", sostuvo sobre Vidal.
“Quieren modificar el artículo N°5, el único que nos quedaba como resguardo, donde dice tenemos que enseñar educación sexual pero respetan el ideario de las instituciones; lo quieren sacar por completo y meter un copia y pegue del LGTB”, se quejó Seneewald.
“Se habló sobre el compromiso de la Iglesia para colaborar en la entrega de ayuda alimenticia para evitar el sistema de punteros y que la comida llegue a los comedores sin intermediarios”, dijeron las fuentes gubernamentales.