Las provincias de Córdoba y Santa Fe debieron cambiar sus formas de votación luego de sendos escándalos.
La provincia litoraleña tuvo que hacerlo en 1995 luego de un caso que mostraba que había un supuesto ganador en una elección comunal y terminó siendo otro.
En Córdoba, el escándalo se dio en 2007 entre Luis Juez y Juan Schiaretti, con pedido de recuento de votos y todo.
Entonces, ambas provincias abandonaron la boleta tradicional y pasaron a la boleta única. Algo, que a nivel nacional no ocurre. Se sigue con el mismo sistema tramposo de siempre, tal cual revela el siguiente informe:
La trampa no está en el Voto Papel, sino cuando los transformás en digital, ahí hay que apuntar, el software tiene que ser abierto, puesto a disposición y auditado por varios especialistas antes de la elección, sino nos seguirán estafando.