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Esta semana nos dejó algunas postales del subdesarrollo. Los celulares quedarían afuera del Ahora 12. Cuestan demasiados dólares. Se los embale o no en Tierra del Fuego, son importados.
¿El teléfono móvil será el nuevo Ford Falcon? Un coche emblemático –por buenas y también por tenebrosas razones– que salió al mercado en 1957 y que en Argentina, sólo en Argentina, se fabricó hasta 1982.
Era un diamante en un país donde el proteccionismo y la falta dólares congelaron en el tiempo el modelo industrial de sustitución de importaciones, ya perimido en la posguerra.
No llegamos al exótico paisaje del parque automotor vintage de Cuba, anclado en los 50 y los 60. Pero le pegamos en el palo.
El celular es una herramienta inescindible de nuestra cotidianeidad. Y una conexión con la revolución tecnológica que multiplica la productividad y abre la puerta a una calidad de vida más deseable. Es un cable tendido al futuro.
Treparnos a esa revolución es una oportunidad de saltearnos el atraso. Si, en cambio, cavamos una brecha tecnológica más profunda seguiremos en el tobogán del subdesarrollo.
El presidente se congratuló de que ahora podamos pagar un corte de pelo en 12 o hasta en 18 cuotas. No debe haber ironía más eficaz que la literalidad de ese relato.
El INDEC informó ayer que una familia tipo necesita 45.477 pesos para no ser pobre y 18.792 para comer. Hasta ayer, un empleado de comercio en blanco ganaba 35.800 pesos. El sindicato celebra el acuerdo que lo llevará a 50.000 pesos, apenas por encima de la línea de pobreza.
Se entiende por el contexto, marcado por el cierre de negocios, destrucción y precarización de empleos. Un proceso que lleva al menos tres años, pero que agudizaron la pandemia y la cuarentena.
El subdesarrollo económico es primo hermano del subdesarrollo político, que también nos dejó algunas postales inquietantes.
Esta semana se publicó una edición extra del Boletín Oficial. Al estilo de los diarios, en tiempos de supremacía del periodismo gráfico, cada vez que un acontecimiento, de esos que dejan huella, sacudía a la sociedad. El terremoto de Caucete, el ataque a las torres gemelas, la explosión de Río Tercero.
La edición extra del Boletín Oficial atendió al interés de una sola persona. La más poderosa del país. Alberto Fernández paró las rotativas para publicar de urgencia el decreto que traslada a tres jueces.
La decisión, cuestionada en su legalidad por el fondo y por las formas, construye el argumento para buscar la nulidad, entre otras, de la escandalosa causa de los cuadernos de la corrupción.
La fuerza es el derecho del poder. Impudicia propia de las autocracias o de sus parientes, el subdesarrollo político y la precariedad institucional.
Impunidad, cepo y cuarentena sobresalen en la nube de palabras que grafica este momento histórico indeseado.
Definen privilegios obscenos y restricciones a la libertad.
Con todo, es un momento indeseado, no es el fin de la historia.
Periodista de córdoba, porque nos interesa tanto lo que hagan a Nivel Nacional si vivimos en córdoba. Porque escribir sobre las restricciones a las libertades que impone la Nación si nosotros vivimos un Gobierno FACHO en córdoba y los Periodistas de acá SORDOS, CIEGOS Y MUDOS. Se preocupan por las florcitas , masetitas y robo de plantines en juna plaza o porque ponen más mesas en las calles, cuando los niños por ejemplo siguen encerrados en sus casas, sin poder concurrir a las aulas y cada vez más burros. Porque dicen en córdoba que van a suspender las reuniones sociales desde ayer y hoy calladamente los funcionarios mandan a barrer las miles de botellas y vasitos encontrados por todos lados. Engtonces, no nos crean tan IDIOTAS A LOS CORDOBESES los señores que se dicen ser Periodistas.
La nota es bastante insustancial. En cuanto a lo económico, me impactó más el hecho de que la bonaerense se movilizó por un reclamo de sueldos, porque ganaban 200 dólares, les aumentaron, y con la devaluación siguen ganando 200 dólares....... ¿más subdesarrollo que eso? Obviamente, el objetivo del gobierno es hacerse de los tres poderes. En cuyo caso sí, si lo logran es el fin de la historia o al menos el fin de la república. Y la CSJ sigue en cuarentena, aislada, amordazada y lavándose las manos.