En la dinámica del ahorro en una economía cerrada, la demanda agregada o PBI es igual al consumo, la inversión y el gasto, como parte del gasto interno. En una economía ideal cerrada, la condición de equilibro se da cuando el ahorro es igual a la inversión. Pero esto es solo teoría.
La balanza comercial o saldo de cuenta corriente muestra el flujo de intercambio comercial que tiene un país con el resto del mundo, es decir, exportaciones e importaciones.
A la ecuación de demanda agregada se añaden las exportaciones y se restan las importaciones, y a la ecuación de ahorro se le suma ese mismo saldo. Si las exportaciones superan a las importaciones en una economía abierta, se genera un ahorro externo.
El ahorro nacional se conforma por el ahorro público y el ahorro privado. El destino del ahorro privado se analiza mediante la ecuación que iguala la suma de ahorro público y ahorro privado a la sumatoria de inversión, más el saldo de la balanza comercial (diferencia entre exportaciones e importaciones).
El ahorro público es igual a los recursos tributarios menos el nivel de gasto público. El ahorro privado es igual a la inversión, más el saldo de la balanza comercial o cuenta corriente, menos los impuestos, más el gasto.
Resumiendo, el ahorro privado financia al sector público, mucho más cuando éste último gasta en exceso, o lo que es lo mismo, presenta déficit operacional, que se traduce como déficit fiscal.
Mientras la microeconomía estudia el comportamiento particular de bienes, servicios y demandantes bajo ciertas condiciones, la macro estudia el comportamiento de las variables en su conjunto a través de los llamados agregados económicos, definidos básicamente como la suma decisoria de empresas, privados y el Estado, reflejada en la dinámica económica de un país.
Hasta la irrupción de la teoría keynesiana en 1936, el modelo económico general era el capitalismo, en el cual el rol intervencionista del Estado había sido prácticamente nulo.
En 1929, frente a la crisis del mercado, Keynes aporta como solución la participación activa del Estado, a partir de lo que se incorpora el análisis de las variables macroeconómicas: Crecimiento, Inflación y Desempleo, medibles a través de indicadores.
El crecimiento es la cantidad de bienes y servicios producidos por un país en un período determinado, generalmente un año, y su indicador es el Producto Bruto Interno.
Dicho crecimiento depende de factores condicionantes, por ejemplo la disponibilidad de los recursos productivos como los recursos naturales, el capital y el trabajo.
Otro factor importante es la productividad. La productividad se conforma por la capacidad tecnológica, el nivel de conocimiento y destreza de los trabajadores, lo que se define como capital humano dentro del concepto de mejora continua, y la eficiencia con que se combinan estos elementos de modo que perfeccionen la economía de escala.
En este punto es importante señalar los ejemplos de China y Venezuela, porque la eficiencia productiva está tomada precisamente del modelo capitalista. De hecho, el comunismo chino para empezar a crecer, debió adaptar su forma de producción a la del sistema capitalista, lo que le permitió llegar a ser lo que es hoy.
El otro caso es Venezuela, que contando con importantísimos recursos naturales, implementó políticas inhibitorias en su progreso tecnológico, ineficiencia, desmedro del capital humano y por supuesto, carencia de capital financiero destinado al desarrollo productivo.
En una economía de escala los costos unitarios de producción se reducen, porque al crecer el mercado crece la producción, alcanzando un ritmo óptimo, concepto también tomado del capitalismo industrial, cuando se superó el modelo de producción artesanal y eso redujo sustancialmente los precios de bienes y servicios para comercializarse masivamente.
A los factores de crecimiento económico mencionados se pueden agregar otros factores, pero ya de tipo más subjetivo.
Así por ejemplo está la confianza que inspira un sistema financiero, la seguridad jurídica del país, el nivel de corrupción y de justicia, el grado de inversión en investigación y desarrollo, y el funcionamiento natural de las instituciones sin cooptaciones ideológicas.
Un factor subjetivo importante es la cultura del ahorro de una población en directa proporción con su historia.
En países como Argentina, las políticas implementadas durante décadas han promovido una suerte de descuento hiperbólico, esto es, la urgencia preocupante del presente que resta, y hasta anula la capacidad para planificar una mejor calidad de vida a futuro. En realidad, las políticas referidas están pensadas para desincentivar el ahorro proveniente del trabajo formal y productivo. De hecho a decir de Keynes “a largo plazo todos estaremos muertos”.
Se desincentiva reforzando cada vez más la presión tributaria para que grandes sectores de la población no puedan ahorrar. Consecuentemente, el único que debería poder ahorrar sería el Estado, que en vez de hacerlo despilfarra cuanto centavo le ingresa, por ende, cada vez exige más impuestos que asfixian al sector productivo.
Se desincentiva con la inflación, que solo recompensa a quien contrae deudas en moneda local, porque al cancelarlas devolverá muchísimo menos de lo que recibió.
Estas deudas contraídas por la implementación de programas sociales que a priori suenan a oportunidades invaluables para sus destinatarios, pero que financiamos todos, en el fondo forman parte del mismo sistema repetido de parches.
La política fiscal determina el gasto público y la adecuación, según criterio dominante, de los impuestos para estimular o contraer la economía.
El gasto agregado como función del PBI real muestra el comportamiento de la producción agregada y del gasto agregado, que es igual al consumo más la inversión más el gasto público más las exportaciones netas, o diferencia entre exportaciones e importaciones. Ambas variables en algún punto se equilibran.
Sin embargo, también existe una capacidad potencial de la producción que puede superar el punto de equilibrio anterior, lo que da lugar a una brecha recesiva.
Del mismo modo, la demanda agregada o gasto agregado puede ser superior, dando lugar a lo que se llama brecha inflacionaria. Y aquí aparecen los conceptos de fugas e inyecciones. Hay fugas del ahorro cuando se pagan impuestos y se importa, y hay inyecciones cuando se exporta y mediante el gasto público, herramientas políticas que se usan para contraer o expandir la economía.
En países como Argentina la economía no crece porque los recursos se dilapidan. Se asfixia la fuente de ingresos que los financia, el sector privado, y se desincentivan de todas las formas posibles el ahorro y la inversión.
Sin embargo, quienes defienden con tanta obstinación el modelo keynesiano, quizás olviden que si bien “El mercado puede permanecer irracional más tiempo del que usted puede permanecer solvente”, exactamente lo mismo suele ocurrir con los políticos en países como Argentina, y con mucha mayor facilidad cuando logran ganar las elecciones.
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Según entendí de otros economistas de que el tal "modelo keynesiano" era para "taparle el ojo al macho" al desastre de 1929, nunca había sido concebido como un modelo a largo plazo.
De la cotización del viernes del dólar ilegal a $ 195, cayó el martes a $ 181, que pasó con los que compraron el viernes?
maría, inútil, la nota habla del desastre de las teorías keynesianas en manos de los delincuentes peronistas, ¿Qué corno tiene que ver la cotización del dólar?
Parece mentira, pero la EXPRESION "AHORRO NACIONAL" está ausente en la mayoría de los comentarios economicos, cuando es sabida la IMPORTANCIA de este en las FINANZAS PUBLICAS DE CUALQUIER PAIS QUE PRETENDA EVOLUCIONAR TANTO EN TERMINOS DE INVERSION COMO DESARROLLO HUMANO. Los populismos solo se han concentrado en el cortoplacismo, fomentando el CONSUMISMO y despreciando la moneda por lo que viven realimentando los procesos inflacionarios. Esto viene de años y muchos bajo la zanahoria del DISFRUTEMOS HOY.....¡MAÑANA VEREMOS!, pasan los gobiernos y se reeditan los fracasos.
La Agentina no crece por la desmesurada presion fiscal, motivada por el gasto excesivo, que provoca emision y endeudamiento, y eso es imposible de continuar. En general, estamos ante una disyuntiva que nos ofrece la crisis, queremos ser un Pais dependiente de los burocratas socialistas que nos dicen cuanto valen no solo las divisas sino tambien el pan, la leche, todo bien de consumo, automoviles etc, los alimentos en general, controlando precios y hasta alquileres o queremos ser un pais libre apoyado en el mercado libre ? es decir la libertad que nos ofrece el mercado. El mercado " somos todos " quienes libremente con nuestras compras y ventas fijamos los precios. Es decir o laissez faire o dictadura. Es mucho pedir por la LIBERTAD ????? Es mucho pedir por el respeto irrestgricto a la Constitucion Nacional ? Es mucho pedir que la propiedad privada sea inviolable ? Es mucho pedir que los usurpadores, sean desalojados por la fuerza publica ? Todavia no cayeron los peronistas que Perón fué socialista? Es decir repartidor de miseria.? Sigue aún la falacia, con que se entronizaron los socialistas? amigo - enemigo. Asi decia Peron, al amigo todo al enemigo NI JUSTICIA, y los atolondrados aplaudian. Estos personajes, llamense Castro, Chavez, Maduro, etc etc, SIEMPRE tienen un enemigo comun externo CAPITALISTA, IMPERIALISTA, QUE QUIERE VIVIR DEL ESFUERZO DE LOS CIUDADANOS, o inventan el enemigo interno, al opositor, al que piensa diferente, lo llaman EL TRAIDOR, EL ENEMIGO COMUN, EL ENTREGADOR, EL QUE QUIERE TODO PARA EL. etc etc etc. No es hora de decir BASTA, basta de dadivas, de planes autistas que hacen mas dependientes al que los recibe, o que hace rico a los que los dirigen. Hay mas de 150 sellos de goma que reciben subsidios del estado, sin contra prestacion. El Estado no tiene planes para el tema falta de viviendas. Esta bien hoy dia ayudar al que lo necesita debido a la pandemia, y a la mala y excesiva cuarentena decretada por el lamentable Alverso. Si por lo menos recordaran los dirigentes que supimos conseguir lo que decia su lider: " Cada argentino debe producir por lo menos lo que consume " Pondrian manos a la obra con las reformas que el Pais necesita.