Teresita Di Bari, conocida garantista de Mendoza, se apresta el próximo 4 de enero de 2021 a liberar a un enfermo mental alojado en el Hospital Psiquiátrico El Sauce, el que sufre de un cuadro psicótico esquizofrénico con alucinaciones auditivas e ideas místicas enquistadas, que ya lo llevaron a cometer el homicidio de Paula Giglio en 2014.
El afectado, Yamil Ezequiel Palleres, volverá el próximo 4 de enero a transitar las calles de la localidad de San Carlos, en Mendoza, gracias a Di Bari.
Los habitantes de la localidad volverán a correr riesgos innecesarios frente a un poliadicto con trastornos esquizofrénicos paranoides, que recibe, según dice, indicaciones de satanás para ultimar personas.
Los habitantes de San Carlos, ya advertidos, deberán entonces armarse y estar preparados para cualquier ataque que provenga del enajenado liberado, cuyas actitudes y acciones ya han sido perpetradas a lo largo de las 12 externaciones consumadas durante éstos años y que culminaron con el homicidio de la periodista Paula Giglio.
La ley de Salud Mental, impulsada en Mendoza por el supuesto licenciado Miguel Conocente, ha provocado que estas bestialidades sean de práctica común en la zona de Cuyo, pero que como son efectuadas legalmente evitan ser procesados por homicidas los que participan en la liberación de los enajenados mentales que cometen estos hechos.
¿Que se espera de Palleres liberado? Que abandone la medicación psiquiátrica, que consuma drogas ilegales y que según le indique satanás (en sus alucinaciones auditivas) salga en busca de alguna mujer que no ofrezca resistencia y la asesine sin piedad.
Debemos tener presente que las ideas místicas paranoides enquistadas en el imaginario de Palleres, no son tomadas en cuenta por la jueza Di Bari que por su negro pasado no nos asombra, pero sí nos extraña que aún ostente el carácter de magistrado.
No está de más recordar que la magistrada se tuvo que apartar de la causa del homicidio de Norma Carleti, luego de que la querella denunciara tráfico de influencias entre el abogado defensor de los hermanos Guerrero y ella.
Desde la Asociación Antidrogas de la República Argentina apelamos a los integrantes de los medios de comunicación, sector al que perteneció Paula Giglio hasta su muerte, que pongan un grito ejemplicador en sus medios, para frenar esta locura de liberar enajenados, que matan personas inocentes por el solo hecho de aprovechar la oportunidad que les otorga la ley de Salud Mental.
La inoperante y garantista jueza debería llevárselo a su casa, después de dejarlo en libertad, ya que considera que no se convertirá en un peligro para el resto de los habitantes. Es un hecho aberrante, ya que se sabe que nadie lo controlara, ni seguirá con el tratamiento psiquiátrico que recibe en la actualidad. El asesino es una persona enferma y como tal no puede estar en libertad, debe estar internado en un neuro psiquiátrico como se encuentra en la actualidad para no ser un peligro para los demás y para él mismo. Que lo declare inimputable por su problema mental, pero que pase el resto de su vida en un lugar donde sea tratado y no se convierta en un peligro público. Y que la jueza si es necesario se interne junto a él o deje su cargo por ineptitud.
Como sabe el periodista cual va a ser la sentencia?