Como no soy Alberto Fernández, perdón por ser referencial, sé de qué se trata. Alberto F. dijo que, “No sé lo que está pasando en Cuba, pero terminemos con los bloqueos”. ¿Nadie de cancillería le explicó al presidente la situación cubana? Difícil de creer.
¿Y por qué el plural en “terminemos con los bloqueos”? ¿Argentina bloquea a Cuba? No. Alberto F debería saber que Bloqueo, según la RAE es: Interceptar, obstruir o cerrar el paso. Mientras que Embargo, según la RAE es: Retención, traba o secuestro de bienes por mandato de un juez o autoridad competente.
EEUU no bloquea a Cuba, eso hoy sería imposible, tiene un embargo sobre la isla. Cuba puede comerciar con todos los países que quiera, de hecho lo hace con 120 países. La crisis cubana es hija del gobierno comunista que solo genera pobreza. Es la Argentina la que bloquea la entrada al país de sus ciudadanos en el exterior.
Fulgencio Batista, militar de baja graduación, asumió la presidencia a través de un golpe, 1952/1959. Gobierno corrupto y dictatorial. Fidel Castro lideró la revolución fallida del Movimiento del 26/7/1953, fue encarcelado. Salió. Luego la “epopeya” de Sierra Maestra.
Desde enero de 1959 hasta hoy, se sucedieron Fidel Castro, su hermano Raúl Castro que dejó en su lugar a su asistente de años, Miguel Díaz-Canel. Sucesión monárquica lejos del pueblo, por la gracia de un dios marxista, implacable.
Cuba, pre revolucionaria era un país que vivía a la sombra de los EEUU y de sus intereses en la isla. Era próspera, el 3º país en el ranking latinoamericano. Más adelantado que la Argentina (de 1959, no la de hoy) en comunicaciones, TV, telefonía, autos y aires acondicionados. La revolución castrista se casó con la URSS que mantuvo a la isla con millones de US$ diarios. La caída de la URSS hizo que Cuba entrara en el “periodo especial”, donde faltó lo esencial.
A eso le sigue la ayuda chavista a partir del 2002. Entre 2008 y 2011 Venezuela le entregó a Cuba US$ 18.000 millones. Y el petróleo. Hoy Venezuela no puede ayudarse a sí misma. Cuba está abandonada y muy mal educada.
El pueblo cubano educado en el marxismo, sabe que depende del Estado benefactor. Todo le pertenece al Estado. El sistema ha dejado a los cubanos sin poder crecer, crear, ser en libertad. El sistema les ha privado de iniciativa.
Y ahora, ante la tormenta perfecta, sin ayuda externa, con una economía miserable y en pandemia, o sea sin turismo, Cuba tiene hambre, carece de medicamentos y padece un colapso energético. Y no está Fidel, ni Raúl, está Miguel.
Miguel Díaz-Canel es un personaje sin el fuego feroz de Fidel ni el pragmatismo ortodoxo marxista de Raúl, no tiene carisma. Su oratoria es pobre en un país del Caribe que ama las palabras, pero sabe reprimir. Eso lo hace bien.
En 2018 cuando el gobierno aprobó el Decreto 349 que regula la actividad artística y determina qué es arte y que no, un grupo de artistas creó el Movimiento San Isidro. Al castrista “Patria o muerte” le opusieron una canción que dice “Patria y vida”, que el 11/7/2021 fue el himno de las manifestaciones. La letra de “Patria y vida” creada por un grupo de artistas el 16/2, fue acompañada por el grito de “libertad”.
Fl cantante Yotuel Romero escribió en su cuenta de Instagram: “SOSCuba”. “Les pido a todos los cubanos, a toda la gente que me sigue, no importa de dónde vengan, porque Cuba necesita ayuda. La dictadura cubana no deja que el mundo entero sepa que necesitamos ayuda”. “Recemos por Cuba, mi gente, y que el mundo sepa que Cuba necesita del mundo”. Romero vive en Miami.
Las redes sociales han tenido un enorme impacto en Cuba. Permitieron la comunicación ciudadana en temas de políticas públicas. Por eso el gobierno corta Internet. Periodistas e intelectuales independientes se sumaron a los jóvenes. Esta suma de redes sociales, internet y pueblo, pone la contra revolución en marcha.
Yoami Sánchez, quizás la más famosa bloguera cubana tuiteó: “De tanto hambre que padecemos, nos hemos comido el miedo”. De eso se trata señor presidente Alberto Fernández, del hambre, de la falta de medicamentos y del colapso energético sumados a la pandemia. Perdone, con respeto a su investidura, pero se trata de algo muy simple, “¡es el sistema, estúpido!”.