La mesa de conducción de Juntos por el Cambio (JxC) se reunirá el jueves de manera presencial para formalizar su apoyo al acuerdo entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero exigirá que toda la coalición gobernante también avale esta postura.

Así lo hizo saber el titular de la UCR, Gerardo Morales, el del Peronismo Republicano, Miguel Ángel Pichetto, y de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, en diversos reportajes.   Además, es postura, contaría con el aval de dos de los referentes económicos del espació, que son el senador Martín Lousteau, y el ex ministro de Economía, Hernán Lacunza.

La idea es que “este es un plan sui-generis”, para que Alberto Fernández termine su mandato con un ajuste fiscal y monetario que todos consideran posible, y que el nuevo Gobierno, que asuma en el 2024, va a tener que volver a negociar, ya no solo con el fondo, sino también con los acreedores privados interno y externos, debido al pesos de los pagos de la deuda que deberá enfrentar el próximo presidente.

“Nadie cree que esto se arregle con un plan a dos año y medio”, dijo una fuente de la mesa de JxC consultada por ANP, y fue más allá al decir que : “Si ellos dicen que el acuerdo con el FMI fue para lograr la reelección de (Mauricio) Macri, este nuevo plan es para que Alberto (Fernandez) termine su mandato, y luego veremos cómo sigue”.

“Tenemos que renovar US$ 44.000 millones que el debemos al Fondo, pero tenemos otros US$ 44.000 millones de deuda en pesos, que se reajustan, año tras año, por inflación. Nadie puede pensar que esto se soluciona solamente poniendo en orden la economía. Eso es solo el comienzo “, dijo el integrante del ala económica.

En tanto,  el presidente de la UCR, Gerardo Morales, cree que “no sólo hay que dar quórum, sino también garantizar que el oficialismo pueda aprobar el entendimiento” pese a las diferencias internas que vislumbra luego de que el jefe de “La Cámpora”, Máximo Kirchner, renunciara a la presidencia del bloque.

Una vez aprobado, “luego será el Gobierno el responsable de que se cumplan las pautas para no entrar en default”, precisó Morales, en diálogo con Radio Mitre.

Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica, al afirmar que “se deben honrar las deudas porque es lo que corresponde. No acordar sería la bancarrota. Sabemos que este gobierno no tiene política económica, pero tenemos que apoyar la intención de alcanzar un arreglo por la deuda”, expuso “Lilita” durante la reunión partidaria.

En tanto, Pichetto aseguró que “el Gobierno tiene que unirse, tiene que cohesionar sus filas para asegurar el resultado positivo” del acuerdo con el Fondo.

“Estamos frente a una decisión de naturaleza política que trae aparejado efectos secundarios y que es el comienzo de un conjunto de acciones que tienden a ir diferenciándose nítidamente del gobierno de Alberto Fernández para marcar un rumbo político electoral de cara al 2023″, advirtió Pichetto en declaraciones a la misma emisora.

Adelantó que el jueves “nos reuniremos presencialmente los que componemos la mesa de Juntos por el Cambio y de allí van a surgir definiciones importantes sobre la línea a seguir del partido frente al principio de entendimiento entre Argentina y el FMI”.

“Lo fundamental es evitar el default” por que “implica el aislamiento, la pérdida de empleo y la pérdida de financiamiento de las empresas, para la sociedad argentina. Nuestro rol opositor es darle la organización que el oficialismo no tiene”, dijo Pichetto.

Para tranquilizar las aguas de la coalición de Gobierno, el presidente Alberto Fernández realizó ayer una entrevista desde Barbados donde aseguró que “No pongo en duda que nuestra fuerza política mayoritariamente nos va a acompañar», dejando abierta la posibilidad de que “La Campora” se abstenga.