Ante las declaraciones que formuló la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad –Elizabeth Gómez Alcorta- en relación al caso de abuso sexual en Palermo ocurrido el lunes pasado, y que provocó críticas encendidas en general, denuncia y en especial de la titular del Pro Patricia Bullrich que solicitó la renuncia de la ministra, salió al cruce la portavoz presidencial Gabriela Cerruti que se encuentra aislada por dar positivo Covid-19.

De tal modo manifestó que “las declaraciones de Patricia Bullrich no están ni siquiera a la altura de su habitual bajeza y está hablando sobre un tema absolutamente delicado donde ella comprende perfectamente que es lo que dijo Gómez Alcorta y que este no es un tema para dar en las redes sociales”

Cabe recordar que lo que expresado por Gómez Alcorta en su cuenta de twitter fue “No son monstruos, son varones socializados en esta sociedad, no son una bestia, ni una manada, sino tu hermano, tu vecino, tu papá, tu hijo que responden a la misma matriz cultural

Frente a esto, Bullrich dijo “que millones de jóvenes estudian, trabajan y generan relaciones de amor respeto y pidió la renuncia de Gómez Alcorta”

Añadió Cerruti que la discusión debe darse “con mucha calma y tranquilidad, como todos los debates sociales y hay que sacarla de la grieta y del griterío de Twitter”. “Debemos entender que estamos hablando de un sistema que durante muchos años oprimió a las mujeres y fue generando prácticas sociales y culturales permitidas que hacen que se lleguen en determinadas situaciones a hechos en los que personas comunes cometen delitos aberrantes porque forman parte de un grupo y están avalados por un sistema que ancestralmente les da a los hombres el poder sobre las mujeres, sobre sus vidas y sobre sus cuerpos”

Recalcó Cerruti, que el hecho tuvo un alto nivel de impacto porque “ocurrió en el barrio de Palermo, en la Ciudad de Buenos Aires, aunque sucede todos los días, permanentemente y en la mayoría de los casos no se llega a denunciarlo por la vergüenza de la víctima, porque sucedió en grupos intrafamiliares o en grupos de amigos”. “Que la violación es un practica constante y permanente de los hombres con respecto a las mujeres en muchísimas situaciones y sobre todo en situaciones grupales y descontroladas donde la mujer no tiene los recursos y herramientas para poder llegar después a denunciarlo”

Como si nada más faltará a estos dimes y diretes nuevamente la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad , Elizabeth Gómez Alcorta, salió a explicar sus dichos sobre los violadores de Palermo en un medio radial -AM 990-.

De esta forma Gómez Alcorta señaló que Bullrich está de campaña por eso tuitea mientras nosotros trabajamos, lamento que la presidente del partido de la oposición especule con el dolor, tendría que llamarla un poco a la vergüenza".

Añadió “que Patricia Bullrich me pida la renuncia habla bien de bien, o me puedo quedar muy tranquila porque estoy en las antípodas ideológicas, políticas y de responsabilidades que tiene ella, Eso es un tema que para mí es secundario y lo que estoy pensando es en el daño que se hace cuando se trata de decir que no son personas, que son animales y que en todo caso lo que tenemos que pensar es que se trata de enfermos. No se trata de enfermos quienes hacen estas cosas, son personas con responsabilidades penales

Y que es “bienvenido el debate respecto de si se trata de animales o no a los violadores.

Agregó que “Obviamente, hay que trabajar en la prevención, la Ciudad de Buenos Aires, tiene que preguntarse muchas sobre la seguridad de todos los vecinos y vecinas, obviamente el Poder Judicial tiene que intervenir eficazmente y que debe actuar de una manera rápida, para que no quede ninguna duda de la responsabilidad de los seis varones que participaron, porque eso también es un modo de comunicar socialmente”

Que es necesario trabajar con el Poder Judicial, no solamente por la puerta giratoria sino por la falta de credibilidad de las mujeres que denuncian, los tiempos que manejan cuando alguien acaba de atravesar una situación de abuso de violación.

Llamó a modificar los tiempos, las interpretaciones y las situaciones que colocan a las mujeres en lugar de víctimas en vez de cuidarlas.  

Son situaciones delicadas para tratar de una manera ligera, con pases de facturas entre ellas y siempre la misma temática “culpas ajenas”, desvalorizaciones, ninguneos constantes que predican con una seguridad que sorprende, y que no conduce a ningún lado. Se olvidan del respeto y dignidad entre ellas y otra vez la sororidad, empatía de la que tanto se habla y acompañamiento entre las mujeres no está presente porque están excedidas en importancia y poder.

“No hay respeto por los demás sin humildad en uno mismo”

Hernri Frederic Amiel.