Cuando estalló el escándalo por las coimas en el
Senado, la gran mayoría del pueblo salteño tenía la plena seguridad de la
responsabilidad que en el caso tenía Marcelo Emilio Cantarero. Si en el orden nacional las
encuestas señalaban que un 80% de la población creía que el suceso había
existido, en Salta más del 90% opinaba que el hijo “adoptivo” de Roberto Romero
era uno de los principales involucrados. En una larga conversación que mantuve
con el periodista Jorge Urien Berri del Diario La Nación, publicada en
parte el 26 de noviembre de 2000, le explicaba que era difícil saber después de
la muerte de Don Roberto, quién era el Jefe de la Organización: Juan Carlos o El
Gallego. Era una manera de hacer comprender a los lectores del diario, la
importancia fundamental que el ex senador tenía en el entramado de los negocios
sucios que se sucedieron desde el principio de esta incuestionable asociación
ilícita. Emilio se había convertido desde hacía mucho tiempo en el cerebro y
manipulador financiero del Grupo Romero.
No nos explayaremos demasiado tiempo en este
tema que ha sido ampliamente difundido por la prensa nacional, sólo diré que
fuimos consultados por numerosos medios de todo el país y, a su vez,
entrevistamos en nuestra emisora a los principales protagonistas del caso: María
Fernanda Villosio, Mario Pontaquarto y la senadora Silvia Sapag -que había
denunciado a Cantarero por sobornos en torno a la renegociación de contratos
petroleros (una prórroga a favor de YPF- Repsol por valor de 12 mil millones de
dólares y en la que involucraba también a los gobernadores Juan Carlos Romero y
Jorge Sobisch).
Hicimos una transmisión directa desde Comodoro
Py cuando Cantarero fue a prestar declaración. Hablamos con El Juez Federal
Rodolfo Canicoba Corral y, entre otros, con los fiscales Eduardo Freiler y
Federico Delgado. A este último funcionario le entregué en mano una copia de
números telefónicos a los que se había comunicado Cantarero durante esos días
calientes. A partir de esto la justicia determinó que un amigo del ex senador,
Domingo Avellaneda, a su vez ex diputado provincial salteño y ex director del
Banco Nación, había realizado: “Un sospechoso viaje a Nueva York, una de las
plazas financieras más grandes del mundo” ( Clarín-domingo ll de
enero de 2004). En esa misma nota del diario Clarín, se da cuenta de las
declaraciones juradas de Cantarero y Avellaneda correspondientes al año l999: en
la primera se mencionan bienes por valor de unos tres millones de dólares:
- una casa en Salta valuada en 20 mil pesos dólares
- un chalet construído sobre un cerro salteño valuado en 800 mil
- una casa en Villa Allende, Córdoba, valuada en 80 mil
- un departamento en Callao 1983 (El mismo donde se habrían pagado las coimas), valuado en 200 mil
- Otros dos inmuebles en Córdoba, 230 mil
- Finca La Candelaria, Salta, 999 mil
- un Mazda 94 (15 mil), Un BMW (31 mil), un Renault 19 (13 mil), un Peugeot 406 (25 mil) y una Mitsubishi Montero (48 mil)
- acciones, dinero en efectivo y otros valores por 272 mil y deudas hipotecarias por 323 mil.
Actualmente, Cantarero también figura como accionista de la Inmobiliaria Altos Tres Cerritos. Con respecto a Domingo Avellaneda figuran los siguientes bienes:
·
Inmuebles por 190 mil
pesos-dólares
·
Una finca de 269 hectáreas en
Salta, valuada en 60 mil pesos
·
Una Isuzu de 27 mil y un Honda CRV
de 28 mil.
El amigo de Cantarero “puso en marcha” o
participa de seis empresas. Trialco Sur, Camerún, Maquiwan, Agencia de Turismo
Humboldt, Grupo Comercial del Sur y Buaisa.
Podemos asegurar que los datos suministrados por
el diario, basados en la declaración jurada de Cantarero, están minimizados y
que, la cifra estimativa de tres millones de dólares, debe multiplicarse varias
veces.
El fiscal Paulo Starc que investiga al ex
senador por enriquecimiento ilícito pidió al Colegio de Escribanos de Salta que
le suministrara la lista de propiedades que figuran a nombre de su mujer, de
sus hijas y al suyo. Sólo los catastros correspondientes a lo conocido por el
apelativo “Valle Escondido”, tienen una valuación cercana a los 10 millones de
dólares. La Institución envió el siguiente informe:
Catastros |
|
|
140.205 |
Salta Capital |
María Adriana Cantarero |
45.986 |
Salta Capital |
Emilio Marcelo Cantarero |
21.051 |
Tartagal |
Emilio Marcelo Cantarero |
21.064 |
Tartagal |
Emilio Marcelo Cantarero |
21.114 |
Tartagal |
Emilio Marcelo Cantarero |
47.198 |
Salta Capital |
María Paola Cantarero |
132.666 |
Salta Capital |
María Soledad Cantarero |
71.927 |
Salta Capital |
Purificación Cantarero (Hna) |
45.986 |
Salta Capital |
María del Huerto Eleti (Mujer) |
98.565 98.566 |
Salta Capital |
María del Huerto Eleti (Mujer) |
104.950 |
Salta Capital |
Emilio Marcelo Cantarero |
80.552 “ |
Salta Capital |
Emilio Marcelo Cantarero |
140.139 |
Salta Capital |
Altos de Tres Cerritos |
140.140 |
Salta Capital |
Altos de Tres Cerritos |
140.176 |
Salta Capital |
Altos de Tres Cerritos |
80.744 |
Salta Capital |
Altos de Tres Cerritos |
80.745 |
Salta Capital |
Cantarero y Señora |
80.746 |
Salta Capital |
Cantarero y Señora |
140.138 |
Salta Capital |
Cantarero y Señora |
21.122 |
Tartagal |
Marcelo Emilio Cantarero |
Lejos habían quedado los días en que María del
Huerto “Maruja” Cantarero, montada en el asiento trasero de la motito del
periodista Juan Carlos Guiñez, partía rumbo a la casa del prestamista Juan José
Palomo a pedir unos pesos.
Ni República ni Democracia
Las corruptelas cometidas por Cantarero
tienen por denominador común el hacerse de dinero sin importar cómo. Siendo Ministro de Economía de Roberto
Romero, fue el inspirador del bono salteño, dinero espúreo, que luego imitarían
otras provincias. De hecho, se recuerda la amansadora que soportó Erman
González, -por aquel entonces, un desconocido funcionario provincial de La
Rioja, que había venido para saber cómo funcionaba este fantástico instrumento-.
Como era de preveer, el bono salteño devino rápidamente en un mercado negro
manejado por delincuentes que respondían al poder. De alguna manera, el falso
circulante había sustituído al genuino, y los comerciantes que tenían que pagar
sus obligaciones en efectivo, padres y parientes que debían enviar dinero a sus
hijos y, en general, casi toda la población, caían en manos de especuladores
que, sin parpadear, llegaban a descontar hasta el 20% de esos papeles para
entregar el efectivo. El Gallego concretaba negociados con la obra pública, con
licitaciones truchas y, como dijimos, fue el Presidente de Proesa, una sociedad
del estado que según la DEA se utilizaba para enviar cientos de kilos de cocaína
a Europa y Estados Unidos.
Pero el suceso más escandaloso en lo
institucional y que trituraba el principio republicano de la división de poderes
estaba por llegar.
El 21 de Julio de l988, el entonces
presidente del Colegio de Abogados de la Provincia de Salta, Ricardo Reimundín,
entregó al Gobernador Hernán Cornejo una cinta grabada en donde, de manera
inconfundible, se escuchaba a Cantarero, a la sazón diputado provincial,
hablando con el Presidente de la Corte de Justicia, Luis Adolfo Saravia. Éste le
pedía insistentemente que le manden “aquello” que -luego se supo a través de la
misma grabación- era dinero que el legislador le ordenaba a su hermana “Puri” le
fuera enviado al cortesano, pero en bonos. El Dr. Reimundín recibió el cassete
anónimamente pero se cree que la grabación fue ordenada por el empresario
Federico Méndez, quien fuera socio de Romero en una mesa de dinero y que
denunciaba haber sido estafado en una cifra millonaria. Dicho sea de paso, hasta
hoy, algunas personas le reclaman a Juan Carlos Romero que les devuelva el
dinero que quedó atrapado en esa cueva financiera.
La cinta en cuestión es vomitiva,
sobretodo el diálogo con Saravia, que habiendo pertenecido al Holding como
abogado, había llegado a la Presidencia de la Corte, impulsado por el propio
Roberto Romero. También se menciona al “Turco” (Restom Abraham), quien luego
sería asesinado y que, en ese entonces, era juez del máximo tribunal. Federico
Méndez, asegura a quien lo quiera escuchar, que el crimen de Abraham está
relacionado con esta trama que aquí relatamos, y afirmó la noche del 28 de
setiembre de 2000 en el programa “Fuego Cruzado” conducido por Marcelo
Longobardi, que Restom estaba arrepentido de haber participado en la maniobra
para nombrar un magistrado. Son patéticos los diálogos de Cantarero con los
senadores Estrada y Machuca, pues los presiona para que acuerden el nombramiento
del abogado Sergio David como Juez, porque presuntamente sería funcional a los
intereses del Grupo Horizontes. Y aunque al lector le cueste creer, no sólo
obtuvo su nombramiento, sino que, hasta hoy, sigue a cargo del Juzgado de 1º
Instancia en lo Civil y Comercial de 2ª Nominación.
Transcribiremos a continuación distintos
fragmentos de la desgrabación de la cinta magnetofónica, para mostrar el grado
de impunidad con que se manejaban estos personajes:
Dialogan el diputado provincial Marcelo
Emilio Cantarero y el Presidente de la Corte Luis Adolfo Saravia:
MEC: -Yo le dije, mirá esta mañana estuve reunido con Romero y le dije que no me lo elimine al Turco (Restom Abraham), porque amén que los abogados utilizan un léxico que yo no los entiendo, yo estoy patinando, entonces me ha autorizado, lo fui a ver al Turco, le conté las cosas a medias, porque vos sabés que el Turco este es , Dios mío. Y por ejemplo no le conté que estuve con el chango David, me entendés Luis Adolfo?, sí le dije que estuve contigo, pero no que estuvo esta chica, ¿cómo se llama?
LAS: Sí, no le tiene simpatía.
MEC: No le tiene simpatía, me entendés?, Entonces Restom dice que lo presentemos en Gutiérrez, que pasaría a Cabrera, lo recusarían, no sé el término que se utiliza, y pasaríamos a la Marinaro.
LAS: Lo que te quería decir Emilio, es que te acuerdes en todo de la Circular 1050.
MEC: Sí
LAS: Cerrame la puerta Pilar. Bueno, bueno los Jueces se cansaron de autorizar Medidas Cautelares, y ahí está toda la jurisprudencia que he citado yo.
MEC: Claro, ahora yo le dije a la chica (Jueza Montalbetti), porque ella me dijo que no conocía, bueno yo te puedo traer la demanda, no eso no es ético, me dice, entonces según Restom, que eso significa, como él tiene mucha experiencia en estas cosas medio raras, que eso significa que esta Chica no está predispuesta a ayudar, ahora ella me dijo, mirá, el juicio yo me comprometo demorártelo todo lo que vos quieras.
LAS: Cómo, al contrario, qué estúpida, hay que sacarlo rápido.
MEC: No, quiero serte justo, ella no comparte la lesión, porque ella dice que acá no hay, este... ¿cómo es cuándo uno no conoce algo? ¿es inexperiencia?
LAS: No, hay necesidad.
MEC: Inexperiencia.
LAS: Perdoname Emilio, éstos son los jueces que ustedes han designado, son muy pobres, mirá Emilio el artículo 954 dice: Necesidad, ligereza o inexperiencia.
MEC: Ajá
LAS: Nosotros hemos dicho que la Firma está en un estado de necesidad, no de inexperiencia, no me digás si está o no está.
Los dos personajes siguen hablando de la necesidad de buscar la forma de desactivar la demanda interpuesta por el empresario Federico Méndez y rematan este tramo del diálogo de la siguiente manera:
LAS: No, yo voy a conservar mi Carpeta, lo que yo te quiero señalar a vos, que es todo una demanda bien hecha.
MEC: Claro, eso no lo dudo, pero esta chica no sé si es que se lava las manos, pero la verdad me dolió, vos sabes el arreglo que hice con el marido (se refiere al también Juez Fernando Marinaro), me entendés, y el marido estaba presente, ahora es capaz que ella no obedece a los mandos naturales ¿sabés no?
Reproducimos ahora parte del diálogo de Cantarero con el entonces Senador Arnaldo (Lalo) Estrada:
MEC: Lalo
AE: ¿Qué decís galleguito?
MEC: ¿Cómo te va?
AE: Bien.
MEC: Mirá Lalo, Roberto (Romero) se está haciendo un chequeo en el Sanatorio Güemes, me pidió que te llamara por un pedido para Segunda Nominación de Sergio David.
AE: Sí, sí,sí
MEC: Cómo anda eso Lalito
AE: Bueno, para mañana venían los pedidos, ya está el norte.
MEC: No, ya está, acabo de verificarlo, Lalo.
AE: Pero no dijeron nada acá, que venía eso.
MEC: Recién acabo de cortar con Marcelo (Oliver, Secretario de la Cámara) y ya está el pedido.
AE: Entonces no hay problema.
MEC: ¿Por qué no me ayudás Lalito, y lo pedís para que se formalice?
AE: ¿Pero sabés cuál es el problema?
MEC: Sí Lalo.
AE: De que mañana es la reunión de Cámara, y eso previamente tiene que ser tratado en reunión del Bloque, y ayer estuvo el Ministro.
MEC: Ajá.
AE: El chango Pieve, y él quedó en veremos, no armó todavía el cuadro.
MEC: Pero me dijo Hernán (El Gobernador), que almorzó con ustedes ayer.
AE: Pero no lo armó, no dijo nada en la reunión, estuvo en el almuerzo y nombró nada del tema ése, hoy vino a la tarde Pieve.
MEC: Ajá.
AE: Pero él se llevó un borrador, y lo iba a armar.
MEC: Escuchame Lalito, olvidate del Ejecutivo, te hablo en nombre de Roberto, sacámelo, Lalo.
AE: Espero que venga.
MEC: Pero ya está y me dijo Marcelo que ya está en su despacho, el despacho de Presidencia.
AE: Nosotros hemos estado reunidos hace una hora acá, pero no hubo nada
MEC: Pero hablé al 221244 con Marcelo y me hizo esperar un minuto y me dijo que ya está acá el pedido.
AE: Pero qué, ¿viene únicamente de él?
MEC: Eso yo no lo sé.
AE: Yo hablo con los demás de la Comisión.
MEC: ¿No querés que yo hable con nadie en nombre de Roberto, o hablo contigo nomás Lalito?
AE: Bueno, mirá, sería conveniente que podrías hablar ya sea con Machuca y con Liquín (ambos también senadores del PJ).
MEC: Bueno ¿cómo hago para encontrarlo a uno o al otro?
AE: Bueno están acá, si querés te los llamo.
Cantarero habla con Machuca
en términos parecidos. Todos estos Personajes se fueron reciclando, así Estrada
fue Diputado Nacional y después Diputado Provincial e hizo negocios
sobrefacturados con el Estado Provincial (contratos de desmalezamiento de
escuelas). Machuca fue posteriormente concejal y hasta Secretario de Derechos
Humanos de la Provincia.
En otro segmento de la grabación El
Presidente de la Corte de Justicia dialoga con la secretaria de Cantarero:
LAS: Hola Nilda
N: ¿Cómo le va Doctor?
LAS: Bien, todavía por acá
N: Mire, estuvo viniendo el lunes y martes, pienso que sí va a venir.
LAS: ¿Por qué no lo ubica y le dice que no se olvide de mi pedido?
N: Bueno
LAS: Porque mire que yo mañana a la tarde me voy a Buenos Aires.
N: Ah, bueno, cómo no Doctor.
LAS: Búsquemelo, porque este Emilio por ahí se me va.
N: Quédese tranquilo
Ahora Cantarero conversa con su secretaria Nilda y su hermana Purificación (Puri):
N: ¿Qué tal Contador (Cantarero)? Buen día.
MEC: ¿Alguna novedad?
N: Sí, el Dr. Saravia, que no se olvide de su encargo, que él viaja mañana a Buenos Aires
MEC: Bueno
N: Que lo trate de ubicar, es lo único que tengo.
MEC: ¿La Puri está?
N: Sí, sí está, un segundo Contador.
MEC: Puri, mandale la plata al loco (Saravia)
Puri: Te cobré las letras.
MEC: ¿Sí? ¿qué te han dado?
P: Cuatro mil, me han dado un montón de papeluchos y cuatro mil setecientos, esperate la cosa es más difícil, hay cuatro mil setecientos cuarenta
MEC: Bueno, guardámelo.
P: Todo en bono ¿no?
MEC: Claro, pero tratá de conseguir en efectivo.
P: Bueno
MEC: Es que hoy me tengo que ir a Bolivia, por eso te pido.
P: Bueno ¿cuánto necesitás? para tratar de juntarte
MEC: El viernes a la mañana saldré
P: Para el loco ¿cuánto?
MEC: No sé ¿cuánto le dimos el mes pasado?
P: Me tengo que fijar.
MEC: Yo creo que eran cuatro.
P: Yo creo que también.
MEC: ¿Por qué no le hacés un paquete?
P: ¿También en bonos?
MEC: Sí...
La grabación es mucho más extensa y, como
dijimos, escucharla es simplemente repugnante. En distintos segmentos dialoga
con Tito Romero, con empleados del Holding Horizontes. Se manifiestan en
referencia a distintas mujeres -la Jueza Montalbetti con un marcado desprecio-.
Mientras habla, Cantarero carraspea, escupe, putea y hace chistes que recuerdan
mucho el estilo del cómico Jorge Corona.
Hay que recordar que mientras se daba esta
situación, el Gobernador era Hernán Cornejo, quien había terminado enfrentado
con Roberto Romero. No obstante, esta cinta deja claro, por dónde pasaba y sigue
pasando el poder desde 1983 hasta el 2005, y aún podemos afirmar que desde una
década anterior.
Sergio Poma
Autor del libro "Salta, el narcopoder"