Fuerzas del Cielo abriendo los Avernos
El gobierno no oculta que planea un indulto abierto o moderado para empujar los fallos judiciales que permitirían el regreso a casa de conspicuos represores condenados, como Alfredo Astiz, el “Tigre” Acosta, o Juan Amelong y casi ochocientos detenidos, algunos con prisión domiciliaria, gracias a la gestión macrista, a partir de 2016.
Este posible indulto está prohibido por la ley 27.156 para delitos de lesa humanidad, aunque el Presidente Javier Milei se ampare en el Artículo 99 de la Carta Magna, que le confiere al primer mandatario la facultad de indultar. También la Vicepresidenta Victoria Villarruel está de acuerdo en este punto final actualizado; con la llegada al poder del neofascismo libertario, se dio un viraje drástico del clásico negacionismo a la reivindicación directa de la dictadura cívico militar de 1975 y sus crímenes de lesa humanidad. Este impulso reaccionario volcó la opinión pública a la ultraderecha, sin importar la memoria, verdad y justicia, ni la sentencia a las juntas en juicios ampliamente probados y documentados.
file:///C:/Users/Usuario/Downloads/Causa_13_Sentencia%20(1).pdf
file:///C:/Users/Usuario/Downloads/LH_Dossier_2023_ok-1.pdf
Movilización popular: Antídoto al negacionismo setentista.
La multitudinaria manifestación nacional del 24 de marzo pasado sacudió al gobierno, mostrándole que el pueblo autoconvocado, con memoria histórica, sigue condenando el golpe de la Junta Militar. Como respuesta, ese día el gobierno difundió un video negacionista que le causó una denuncia penal por apología del delito.
La justicia condenó en marzo a cadena perpetua a diez represores de la dictadura, por delitos de lesa humanidad en la causa brigadas, los jueces Walter Venditti, Esteban Rodríguez Eggers y Ricardo Basílico del TOF N° 1 de La Plata, los sentenciaron, luego de probar el genocidio y torturas contra seiscientas diez víctimas en total. Este duro golpe al gobierno le indica que aún hay sectores de la justicia independiente dispuestos a no negociar sus fallos ni ceder a las extorsiones.
Club del falcon vede y uniformados que salen del closet
Esta oleada ultraderechista utiliza un símbolo nefasto, los clásicos falcon verde sin patentes, utilizados por los grupos de tareas de la dictadura, para secuestrar con sus cien vehículos a miles de personas en cacerías ilegales. Un militar retirado en Ramayo subió a redes una imagen de un falcon junto a un avión militar con la frase “la dupla perfecta”; un comisario de Río Negro publicó un falcon con el mensaje “que se agarren lo chorros”; en La Pampa un policía subió la imagen de un falcon verde “antiaborto”; una funcionaria mendocina subió otra de un falcon verde con el baúl abierto y varios dirigentes K abiertos. Aparecen memes reivindicando a Videla, amenazas directas a “zurdos, comunistas y kirchneristas”, posteos blanqueando a la dictadura, promesas de un retorno golpista, apologías del delito por hijos de retirados nostálgicos, todos con forma de club del odio que suspiran por desaparecer y asesinar a los hijos y nietos de la generación diezmada por el exterminio.
Un relevamiento en las redes sociales indica que esta hueste está compuesta por al menos catorce mil miembros, que cuentan con un gobierno que mira para otro lado, fingiendo demencia, pero ven con beneplácito estas demostraciones de revancha.
Thatcher y “jamoncito” tensando cuerdas al límite
El Presidente Milei dijo “Fue una guerra y las fuerzas del Estado cometieron excesos, pero no fueron treinta mil.” La Vicepresidenta Villarruel dice: “No fueron treinta mil desaparecidos”; el coro negacionista a dúo fogonea a sectores reaccionarios envalentonados por estas voces que provienen de la Casa Rosada.
Relatos oficiales con la historia reescrita, declaraciones desafiantes contra los Derechos Humanos, reivindicación abierta de los militares genocidas, se van naturalizando gracias a la operación de los troll centers libertarios y los mercenarios de los multimedios económicos pautados por el régimen.
La feroz interna entre la dama de hierro y el león también alcanza a este tema: Milei representa a la ultraderecha judía Jabad Lubavich, y Villarruel, al tándem del partido militar y el Opus Dei ultracatólico Lefebrista, ambos sectores ven con agrado el indulto, pero difieren en la forma y el tiempo para concretarlo. El detalle de esta interna religiosa puede leerse en mis notas.
https://periodicotribuna.com.ar/35531-el-retorno-libertario-de-margaret-thatcher.html
https://periodicotribuna.com.ar/36160-la-resurreccion-castrense-y-el-pacto-setentista.html
30.000: Trinchera final contra el fascismo LLA
El periodista, escritor y militante político argentino Haroldo Conti, es secuestrado y desaparecido en manos de un grupo de tareas del batallón 601 de inteligencia del ejército, un 4 de mayo de 1976. En una carta dirigida a su amigo Roberto Fernández Retamar, el 2 de enero de 1976, le revelaba una información clasificada de una fuente militar, de que venía un golpe sangriento para marzo y que los servicios de inteligencia calculaban en treinta mil muertos, número que coincide con el de organizaciones internacionales de derechos humanos, de la ONU y Europa, y también con declaraciones del ex general Ramón Camps, en dos periódicos: La Razón, de Argentina y Le Monde, de Francia.
El número tiene sustento por sus variables, como los más de ochocientos sitios de detención clandestinos, la cantidad de prisioneros que pasaron por la ESMA, Campo de Mayo, La Perla, El Olimpo, etc. Y también el número de hábeas corpus presentados, y sumemos la cantidad de los no denunciados por temor durante los ocho años de dictadura, que superan con creces el actual registro de la CONADEP (8.961).
En el archivo de seguridad nacional de Georgetown University de Washington, EEUU, existe un documento desclasificado de julio de 1978, el espía militar chileno Arancibia Clavel, que reportaba a la Dirección de Inteligencia DINA de Chile en Buenos Aires, decía que casi un cien por ciento de los cuerpos NN correspondía a elementos extremistas eliminados “por izquierda” por las fuerzas de seguridad, y se tienen computados veintidós mil entre muertos y desaparecidos desde 1975 a esa fecha (poco después de la copa del mundo) y lo firmó con su seudónimo de espía.
Allen Tex Harris, diplomático estadounidense entre 1976 y 1983, desclasificó documentos, luego de obtener cientos de entrevistas con familiares de desaparecidos.
Un documento de la embajada de los Estados Unidos en la Argentina, firmado por Harris, relata que el 22 de diciembre de 1978, el primer secretario de la Nunciatura Kevin Mullen que un alto oficial del gobierno informó al Nuncio Pio Laghi que se «habían visto forzados a “hacerse cargo” de 15 000 personas en su campaña antisubversiva».
Harris dijo, en la Revista Miradas al Sur (2012): “Estaban matando de quince mil a veinticinco mil de sus propios ciudadanos, casi el 0,1% de la población argentina estaba siendo ejecutada sin juicio. Era una matanza, el número de la gente asesinada es de quizás de 50.000. Fue una campaña de exterminio.”
Fuentes fidedignas varias muestran la falsedad del relato libertario, que es una grave lesión a la democracia. Bajar la cifra, negarla o reivindicarla es un delito grave que debería ser legislado. Fue genocidio y dictadura. Y son, como mínimo, 30.000. Y esta bandera no será arriada jamás. Por esto: NUNCA MÁS ES NUNCA MÁS.