Ya hemos dicho que hace rato que el Gobierno está en campaña. Con toda lógica, habida cuenta de la importancia absoluta que revisten para todo gobierno no peronista las elecciones intermedias. Recordemos sino el final precipitado del Gobierno de Fernando de la Rúa, al que le soltaron la mano ni bien perdió feo sus elecciones intermedias. ¿Les suena 2001? E incluso Raúl Alfonsín, que debió irse seis meses antes, tras perder las presidenciales de 1989 que adelantó, pero -dato clave- habiendo perdido antes las elecciones de 1987, cuando los mandatos eran de 6 años y había entonces dos intermedias.
Mauricio Macri las ganó (en 2017), y se convirtió en el primer gobierno no peronista en concluir su mandato en los últimos cien años.
Con solo 39 diputados y 6 senadores, nadie podrá objetarle a los Milei que se preocupen muy anticipadamente por cómo pueda irles en las elecciones venideras. Por eso se ha especulado con la posibilidad de que haya iniciado la campaña con el Pacto de Mayo, en julio pasado; o bien el 15 de septiembre en el Congreso, cuando presentó el Presupuesto “no nato” 2025; o más cerca en el tiempo con la cadena nacional del pasado 10 de diciembre, al cumplir su primer año de gestión.
Pero si vamos a hechos concretos, el anuncio que metió de lleno a la política en modo electoral fue el anuncio del jefe de Gobierno porteño del viernes pasado, sobre el desdoblamiento electoral en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Hasta entonces, solo se sabía que las elecciones nacionales se realizarán el 26 de octubre del año que viene. Y que las PASO, si no las levantan, serán el 3 de agosto. Jorge Macri acaba de sumar lo que por ahora será la primera elección distrital del calendario 2025: el 6 de julio se elegirán 30 diputados porteños.
Habrá otras que se irán anunciando en el futuro inmediato, aunque no habrá tantos desdoblamientos como en elecciones ejecutivas, cuando los gobernadores buscan ponerse a resguardo del eventual arrastre que pueda llegar a tener el presidente de turno, y ahí sí adelanta la gran mayoría, como viene dándose cada vez con mayor intensidad.
El adelantamiento en la Ciudad era más que previsible y los últimos chisporroteos entre el oficialismo local y La Libertad Avanza lo hicieron irreversible. El tiro de gracia lo dio la votación de las huestes de María del Pilar Ramírez -mujer de máxima confianza de “El Jefe” Karina Milei- en contra del Presupuesto 2025 enviado por el Gobierno porteño. Ahí los Macri se convencieron de las intenciones del mileísmo de desbancarlos de la Ciudad y actuaron en consecuencia.
Mientras Mauricio Macri resuelve qué camino adoptar a nivel nacional, su primo Jorge no tuvo dudas respecto de ir a la pelea en el bastión donde el Pro nació, allá por 2005.
Y para curarse en salud adelantan las elecciones, cuestión de despegarlas del efecto arrastre que puedan llegar a tener las elecciones nacionales. Porque si bien La Libertad Avanza no tiene demasiadas figuras para ofrecer en el resto de los distritos, en la Ciudad, donde se ponen en juego además senadores, sí tiene mucho para ofrecer, y puede llegar a poner toda la artillería. De hecho, esta semana Manuel Adorni admitió que será candidato si el presidente se lo pide. Y el vocero presidencial da muy bien en las encuestas.
Además, no hay que descartar la posibilidad de que Patricia Bullrich sea también candidata en ese distrito que puede ser para La Libertad Avanza “la madre de todas las batallas”. No desvela esa posibilidad a la ministra de Seguridad, que en el Legislativo podría perder protagonismo, pero estará donde consideren necesario. Y pensándose en 2027 candidata a jefa de Gobierno o compañera de fórmula de Milei para la reelección.
Dato al margen: en 2021 Bullrich quería encabezar la lista legislativa porteña, y el entonces jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta hizo todo lo posible para impedirlo, pues en tren de independizarse de Mauricio Macri quería apropiarse de los eventuales triunfos de JxC en CABA y provincia de Buenos Aires, donde puso candidatos propios. La convenció a María Eugenia Vidal de encabezar en la Ciudad, pero la exgobernadora terminó haciendo una elección apenas discreta -para las expectativas del Pro- y en la provincia el candidato fue Diego Santilli, que a pesar de haber ganado, dos años después tuvo que ir a una interna fratricida que perdió. A Bullrich, Larreta la convenció de que se reservara para ser precandidata presidencial en 2023, cosa que fue mortal para él, pues ella lo venció.
Otro dato imperdible: hoy abanderada de la derogación de las PASO, en 2023 Patricia Bullrich fue la que más bregó por sostenerlas, pues en ello se jugaba su destino. Nunca quiso saber nada de internas partidarias, pues en ese caso Larreta, con su aparato, se la comía con fritas. Y fue más allá al exigir pelea para todos los cargos, cuestión de generar lealtades.
Hoy eso le permite hurgar en lo que fueron las listas de Juntos por el Cambio para sumar adhesiones al nuevo oficialismo, como hizo con los “radicales peluca” a los que acompañó el jueves en la reunión con Milei.
Volvamos a las elecciones porteñas. Una derrota del Pro allí no solo sería un pésimo presagio para 2027, sino también le complicaría la vida en la Legislatura a Jorge Macri los dos años siguientes. De ahí que con su primo expresidente coincidieran en la obvia necesidad de desdoblar los comicios. Los reproches que se han hecho ante la decisión anunciada por Jorge Macri han venido fundamentalmente desde LLA. Pero si bien es cierto que nunca la Ciudad separó las elecciones legislativas de las nacionales, casi siempre lo hicieron cuando se eligió jefe de Gobierno: en 6 de las 8 elecciones desde 1996. Únicamente no desdobló la Ciudad en 2019 y 2023, para acompañar en ambos casos la estrategia nacional del fenecido Juntos por el Cambio.
La jugada tiene también sus costos y probablemente tenga que resignarse el Pro ahora a apoyar la estrategia del Gobierno de eliminar las PASO a nivel nacional. Porque resulta contradictorio que el partido amarillo pida suspenderlas para el próximo año en CABA y rechace hacer lo mismo a nivel nacional cuando la Casa Rosada lo demanda. Claro que en un caso se habla de suspensión y en el otro de derogarlas.
Como sea, el Pro se metió solito en una disyuntiva que el propio jefe de Gobierno -atento solo a sus intereses- abonó al señalar el viernes que le pidió al Gobierno nacional que también suspenda las PASO en todo el país. “Con el jefe del Gabinete nacional, Guillermo Francos, coincidimos en el ahorro de 200.000 mil millones de pesos que significaría eliminarlas. Los argentinos no podemos darnos el lujo de gastar ese dinero cuando hay otras prioridades más relevantes”, aseveró. ¡Chan!…
A partir de esos dichos, recobró fuerza la posibilidad de que el Gobierno avance con la eliminación de las elecciones primarias en febrero, y ya se están haciendo cuentas para verificar si con los votos del Pro -que hasta ahora hablaba de “modificarlas”, mas no eliminarlas- le alcanza al oficialismo para lograr su objetivo.
Dicen que Jorge Macri lo habló con su primo. Obvio; otros en el Congreso -donde resistían la eliminación de las PASO- piensan que en realidad Mauricio Macri siempre quiso derogarlas, a partir de lo que sucedió en 2019, cuando las elecciones de agosto adelantaron el final prematuro de su gobierno.
El Pro colaborando con La Libertad Avanza en febrero para aprobar la reforma política, remite a esas personas débiles de carácter que una y otra vez prometen que “es la última vez” que aceptan algo de quien en definitiva los domina, y una y otra vez terminan cediendo…
Esto, mientras el presidente le dio a la oposición en general y a Macri en particular un ultimátum respecto de las próximas elecciones: o juntos en todos los distritos, o separados en todos. El líder del Pro se tomó su tiempo para contestar, pero finalmente lo hizo diciendo que esa siempre había sido su posición: “Poner todas las ideas sobre la mesa, cumplir con la palabra como nosotros hicimos este año, ser absolutamente transparentes con el electorado y, ante todo, cuidar la República”.
No es algo que desvele a Milei y su triángulo de hierro -sobre todo eso último-, que sigue viendo cómo se le alinean los planetas. Pero no se limita a mirar: actúa en consecuencia, como cuando después de Navidad, invitó a los diputados radicales a visitar (otra vez) la Casa Rosada. Por lo que contaron los participantes, no se habló de nada específico, ni mucho menos surgió alguna promesa concreta. Pareció, más que nada, otra señal de fuerza de un gobierno que siente que terminó el año como nadie imaginaba que lo haría, y se dio el lujo de enviar un mensaje a sus aliados legislativos principales: casi, casi que no los necesitamos más a ustedes.
¡Que negocio es CABA! Consumen recursos dinerarios de TODAS las provincias y no generan NADA. Pero buenos aportes reciben. Si hubiese un gobierno en la provincia con pelotas y no intereses políticos, el engendro CABA, sería el Municipio 136 de la provincia, ya que ese territorio fue cedido en comodato mientras funcionara la Capital y luego de la "Reforma" del 94, la "Capital" dejó de existir, por si algún despistado no lo sabe todavía. Pero algunos (son varios) vivillos la usan para negocios particulares y catapultarse a cargos mejores.
Lafinur,no entiendo el concepto.Es la capital o como la quieran llamar.¿que queres que genere?¿Que se siembre soja en los bosques de Palermo?.¿ Paris que produce?turismo.Ochenta de millones de personas al año.Roma,Madrid,Londres,no sera lo mismo pero muy lejos no estaran..Pregunta ¿que se fabrica en Rio de Janeiro?.CABA es lo mismo.turismo y empresas radicadas en ella con oficinas , comercios,sanarorios de primer nivel,donde se atienden pacientes de todas.las provincias(que alli no tienen,parece increible, los medios necesarios). que generan empleo.Vida nocturna y espectaculos idem. Seguramente produce mas que Formosa o algunas provincias del norte.
Cual es el problema, que el PRO vaya solito. Ahora, respetar a todos lo de ese partido, que se quieran ir del mismo, sin chistar , como debe ser. Y por favor, a MARÍA EUGENIA VIDAL, si la quieten de candidata a algo, que largue los postres y se corte ese cabello, que está HORRIBLE.
No me interesa lo que sucede en otros paises. Parece que mal de muchos consuelo de sonsos. Los habitantes de ella, se jactan de ser "generadores de riqueza" (Marra Dixit) CABA es solamente, un receptáculo de Oficinas Públicas con gran variedad de ñoquis. El turismo no genera un carajo. FELIZ AÑO.