Finalmente, como era previsible, la Mesa de Enlace de entidades agropecuarias resolvió anoche extender el paro de actividades hasta la hora cero del lunes 9 de junio.
La medida consistirá en el bloqueo al transporte de granos con destino a la exportación, pero se levantarán las restricciones a la hacienda vacuna para faena. Así lo informó el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luciano Miguens, luego de una reunión que las entidades convocaron al término del cese general de actividades en diferentes localidades del interior del país.
Al respecto, el presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, destacó el "impresionante" acto realizado en la localidad santafesina de Armstrong, al que también consideró "un llamado de atención" para que el Gobierno abandone "medidas rayanas con la inconciencia".
Después de casi cinco horas de reunión en un hotel de esta ciudad, la Mesa de Enlace ofreció una conferencia de prensa en la que, además de dar a conocer un comunicado conjunto de las entidades, hicieron referencia a temas específicos de la actividad, entre las que destacaron los riesgos de posible desabastecimiento de leche.
"En la mayoría de los casos, los productores estaríamos trabajando por debajo de los costos, lo cual estaría acentuando la crisis de la lechería argentina", alertó Buzzi.
Asimismo, los dirigentes advirtieron que "la Comisión de Enlace no analiza sólo el tema de las retenciones" y precisaron al respecto que en la reunión hubo un relevamiento de la situación de las economías regionales, como el azúcar, peras, manzanas, arroz, tabaco, uva, algodón y citricultura.
También destacaron la importancia de la actividad porcina como "transformador de proteína vegetal en carne", y se reclamó al Gobierno el cumplimiento de los acuerdos para trigo y carnes, "que lamentablemente no se están cumpliendo", dijo Buzzi.
Miguens y Buzzi compartieron la mesa de conferencia con el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías, los vicepresidentes de Confederaciones Intercooperativas Agropecuarias (CONINAGRO), Carlos Garetto, de la FAA, Pablo Orsolini, y de la SRA, Hugo Biolcati, además del titular de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo de Angeli.
Dos habrían sido las razones de mayor peso para no continuar con el paro cárnico: la posibilidad de que los frigoríficos comiencen con suspensiones de personal y los contactos que los ruralistas tuvieron con supermercadistas, quienes les advirtieron sobre los riesgos de desabastecimiento, con lo que podría alterarse la buena relación con sectores urbanos. Por su parte, el Gobierno atenuó las declaraciones en relación con las de días pasados, con la falaz advertencia del ministro de Justicia, Aníbal Fernández, acerca de que el Gobierno "no promueve, ni a escondidas, una política de represión" en los cortes de ruta como el realizado el viernes último por productores agropecuarios en la ciudad bonaerense de San Pedro.
Precisamente, en esa ciudad bonaerense se produjo una de las más importantes concentraciones, con la presencia del presidente de la Sociedad Rural sampedrina, Raúl Victores, y los otros productores detenidos y liberados el viernes pasado.
Su par de Interior, Florencio Randazzo, afirmó que en el conflicto con el campo "se está discutiendo por plata", al tiempo que acusó a los dirigentes del agro de querer "imponer" al Poder Ejecutivo volver a las retenciones del 35 por ciento.
Desde Rosario, los dirigentes agropecuarios seguían con atención las informaciones provenientes de Buenos Aires referidas a la reunión del presidente del PJ, Néstor Kirchner, con obsecuentes integrantes de la Concertación Plural, en la que se alistan algunos gobernadores e intendentes de provincias y municipios con una importante actividad rural.
Si bien no formularon declaraciones al respecto, el dirigente de la FAA, Ulises Forte, manifestó en Buenos Aires al canal TN su decepción por lo que consideró un "triste papel" del vicepresidente Julio Cobos, quien ofició de vocero de esa reunión.