En lo que parecería ser un estudiado intento del oficialismo a la hora de cambiar la estrategia sobre la existencia de una supuesta "embajada paralela" en Venezuela y el presunto pago de coimas, el kirchnerismo pretende desactivar la investigación que lleva adelante la oposición y propuso que el ministro de Planificación, Julio De Vido, y el canciller Héctor Timerman concurran "a la brevedad posible" a la Comisión de Relaciones Exteriores de Diputados.

La apuesta, que fue anunciada en el día de ayer por el jefe de los diputados oficialistas, Agustín Rossi, tiene como objetivo principal demostrar que la oposición no cuenta con pruebas fehacientes que incriminen a funcionarios argentinos en el escandaloso Venezuelagate. Dicha decisión habría sido tomada ante la embestida que pretendía la oposición de volver la semana próxima al ruedo con las citaciones a la Comisión de Relaciones Exteriores en el mismo tenor con el que se manejaron con el ex embajador en Venezuela, Eduardo Sadous y el ex defensor del pueblo, Eduardo Mondino. Recordemos que en sus testimonios, respaldaron la teoría de que existen "gestiones comerciales paralelas" entre la Argentina y Venezuela al margen de la Cancillería y que se habrían pagado comisiones ilícitas de hasta el 20 % por parte de empresarios para poder exportar al bolivariano país.

Por lo que, en un intento de tapar un ruido con otro, la semana entrante será noticia la presencia de ambos Ministros dando explicaciones frente a la oposición ante una comisión que todavía no completa su lista de testimonios.

"Los opositores no podrán negarse a la presencia de los funcionarios a la comisión. Ellos mismos lo pidieron", incitó Rossi refiriéndose al hecho de que la diputada Margarita Stolbizer (GEN) reclamó hace casi un mes la interpelación de Timerman y de De Vido por el caso Venezuela, propuesta que recibió la acogida pública de todos los bloques opositores, salvo de la centroizquierda.

Algunos legisladores opinan por lo bajo que no era conveniente apurar la presencia de los ministros al Congreso hasta que no se reunieran pruebas contundentes, o sea, la confesión de algún otro testigo. "Avanzar en la interpelación sin elementos suficientes es regalarle el escenario al oficialismo. El oficialismo lo sabe y por eso apura la concurrencia a la cámara de Timerman y de De Vido", admite un encumbrado diputado opositor a diario La Nación.

"Si el oficialismo piensa que trayendo a los dos ministros va a frenar la investigación, se equivoca. Esto recién empieza", dijo Eduardo Amadeo del PJ Federal.

Por otro lado, con esto se espera fogonear la popularidad de Timerman luego de una fracasada labor frente al conflicto con Uruguay. Mientras que en el oriental país se referían al encuentro de Olivos entre el presidente uruguayo y Cristina Kirchner como un “acuerdo donde no se llegó a nada”, Timerman twitteaba su “orgullo y alegría”, por haber logrado un arreglo. Por estas horas, el ex periodista, ofrece nuevamente una reunión con los asambleístas.

Equipo de Política
Tribuna de Periodistas