A todos mis conciudadanos el año pasado les auguré un Feliz Año 2011, el año del PJ, es decir, el año del Poder Judicial, esperanzado que durante ese lapso este esencial poder del estado asumiera la responsabilidad de enderezar los desaguisados que hicieron legisladores y miembros del ejecutivo.
Lamentablemente magro fue el resultado por la existencia de una justicia integrada por varios jueces cobardes que neutralizaron algunas acciones aisladas de juezas y jueces valientes que demostraron coraje e independencia.
A comienzos del año pasado, en la crisis de los DNU para saquear las “reservas” del Banco Central, se destacó la jueza Sarmiento dictando una medida cautelar impidiendo el arrebato de esos fondos. Obviamente eso le costó ver cómo detenían a su anciano padre condicionándola al extremo más vil y perverso utilizando estrategias deleznables. También se ocupó de ella y su pareja, el juez Marinelli, la propia Presidente de la Nación, quien por cadena nacional aludió a la relación concubinaria que uniera a ambos magistrados no permeables a los aprietes del Poder Ejecutivo. De antología la desobediencia del Jefe de Gabinete a la orden judicial que requiriera el auxilio de la policía federal y le fuera negado al juez Sudera, pretendiendo justificarlo con una supuesta imposibilidad de cumplimiento de la manda judicial. Más grave aún fue la desobediencia del Gobernador Daniel Peralta al no cumplir el fallo de la Corte Suprema de Justicia Nacional que ordenara reponer en su cargo al ex procurador Eduardo Sosa, eyectado por el difunto Néstor Kirchner molesto por las investigaciones sobre millonarios fondos desaparecidos en la Provincia de Santa Cruz. Pero la frutilla del postre apareció casi al cierre del año 2010 en ocasión de la usurpación de tierras públicas y privadas (Parque Iberoamericano rebautizado por el folclore popular como Parque Indoamericano, el Club Albariño, predios en Quilmes, etc.) cuando no sólo no se cumplieron mandas judiciales sino que, en el colmo de la genuflexión, la juez LIBERATORI declaró que no puede usurparse el espacio público, lo cual implica un disparate jurídico, la comisión del delito de prevaricato y a la vez causal de enjuiciamiento ante el Consejo de la Magistratura por mal desempeño.
Por tal motivo vaticino que 2011 será el año del SI, es decir, del Servicio de Inteligencia, pero del peor servicio de espionaje, aquel que tendrá como objetivo obtener elementos para armar los carpetazos con los que atacar a opositores y “enemigos” del kirchnerismo, esta cleptocracia instalada en la Casa Rosada desde mayo de 2003.
Ello porque en este año “electoral” se juega la suerte de la continuidad del kirchnerato, única condición para no terminar presos desde la presidente hasta el último de sus cómplices en el saqueo del dinero público y privado. Aquí se deberán tener en cuenta no sólo la malversación de caudales pertenecientes al erario público, sino también las dádivas, comisiones, retornos y sobreprecios, especialmente de obras públicas adjudicadas a empresarios amigos del poder que vieron crecer exponencialmente sus patrimonios por manejos espurios en connivencia con funcionarios corruptos.
Esperanzador resulta que la Excma. Cámara Criminal y Correccional Federal de esta Capital haya señalado que son válidos como prueba los miles de correos intercambiados entre el ex Secretario de Transporte Ricardo Jaime y sus cómplices, y alentador resultó que la misma Cámara haya dispuesto la liberación del ex Comisario Fino Palacios, en la causa de las escuchas ilegales que conllevara el procesamiento del Jefe de Gobierno Mauricio Macri, haciéndole grave reprimenda al juez todo servicio Norberto Oyarbide, quien para evitar continuar el papelón liberó a Ciro James.
Viene al caso señalar que la jueza federal Arroyo Salgado, que entre otras causas sensibles heredó la tramitación del expediente sobre los hijos adoptivos de la Sra. Herrera de Noble, en una causa donde se investiga el supuesto espionaje a funcionarios y personalidades, se haya negado a conceder la exención de prisión de Iván Velázquez, obligándolo a permanecer en Uruguay cuando bien podría regresar al país y colaborar con la investigación. Lo llamativo es que el delito que se le atribuye a Velázquez es excarcelable, pero tal vez su presencia en nuestro país podría ventilar algunas cositas inconvenientes para muchos, incluida la propia jueza.
Por eso queridos conciudadanos, con estas salutaciones por el Nuevo Año 2011 van mis deseos de salud, paz y prosperidad para todos, y con relación a quienes serán víctimas del Servicio de Inteligencia interior, prohibido legalmente pero del cual abusarán Cristina Kirchner, Aníbal Fernández, Nilda Garré abusando de los espías dirigidos por Icazuriaga y Larcher, mis más sinceras condolencias, pues se avecinan carpetazos mucho más insidiosos que los sufridos por Enrique Olivera o Luis Juez, veremos cómo se desentierra una causa judicial donde se investigan irregularidades en el Banco de la Provincia de Buenos Aires y figuran todos los personajes opositores al kirchnerismo, desde Carlos MENEM y Eduardo Duhalde, hasta Domingo Cavallo, Felipe Solá, Francisco De Narváez y demás beneficiarios del otorgamiento de millonarios créditos, nunca devueltos, durante los 90.
Enrique Piragini