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La reunión del diablo

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"EL DEMONIO QUE CADA UNO LLEVA ADENTRO"
“EL DEMONIO QUE CADA UNO LLEVA ADENTRO”

Ficha técnica:         

 

Título para Latinoamérica: La reunión del diablo

Título original: Devil

Dirección: John Erick Dowdle, Drew Dowdle

Guión: Brian Nelson; basado en un argumento de M. Night Shyamalan

Género: Suspenso, Terror – Solo apta mayores de 13 años.

Reparto: Geoffrey Arend, Bojana Novakovic, Chris Messina, Logan Marshall-Green, Jenny O’Hara, Caroline Dhavernas, Bokeem Woodbine, Jacob Vargas.

Montaje: Elliot Greenberg - Fotografía: Tak Fujimoto

Producción: M. Night Shyamalan y Sam Mercer – Música: Fernando Velázquez

País: EE.UU. - Año: 2010 - Duración: 80 min.- Estreno Argentina: 2-12-10

Un thriller conformado por una estupenda historia, muy bien narrada que se articula a un sólido guión. Es interesante propuesta fílmica de jóvenes cineastas talentosos, de promisorio futuro.

Muy poco se puede describir de la trama para no develar los secretos más íntimos de la película. La sinopsis nos remite a 5 extraños quedan misteriosamente atrapados en un ascensor. Luego de la falla eléctrica de rigor, extraños eventos empiezan a despuntarse. Una historia de permanente suspenso se abre ante nuestros ojos; la historia de los demonios internos de cada uno de los protagonistas.

Una lectura rápida de la obra, nos hace perder elementos discursivos importantes: ¿es un thriller sobrenatural con atisbos policiales? ¿Será el verdadero Lucifer que maneja a estos desdichados en un ascensor como marionetas? Estos y otros interrogantes, se develarán (¿?) a concluir el rodaje.

Es en este punto, la virtud esencial de la dupla de directores John y Drew Dowdle. La duda propuesta por estos talentosos cineastas, es el ariete que atraviesa las capas de sentido de un guión atrapante.

 La fuerza del mal que capta a estos desconocidos no es antojadiza. Cada uno de ellos tiene una historia que contar. Y vaya si la tienen. Golpeadores, violentos, psiquiátricos, uno tras otro, muestran lo peor de sí en la interacción de sus relatos. Por tanto, hay un determinismo que lleva a Lucifer a elegirlos. Justamente el mito de “la reunión del diablo”, nace en la confrontación de seres intrínsicamente malos, a los que el hijo del averno elige para su entretenimiento maléfico. Dicha argumentación, la sostiene uno de los grandes protagonistas del film: Ramírez, un encargado de seguridad del edificio que contiene al embrujado ascensor de marras. El nos explica en pantalla, y también como voz over – esa voz omnisciente, atravesada en el relato -, se transforma por mérito propio, en ariete de suspenso contínuo. Al hacerlo legitima su rol.

 Ramírez, el personal de seguridad, es una pieza clave que para muchos indolentes pasará desapercibido. ¡Craso error! Esto se podrá corroborar al hacer la síntesis final el espectador. Cada vez que pensemos si el fantástico Leviatán de azufre, posee existencia física o metafísica, remitiremos a Ramírez. El otro protagónico es el detective al cual se le da este caso. Esta encrucijada de vidas, nos dará las respuestas que ansiamos. Nos tranquilizará el saberlo.

 La reunión del diablo, es una muestra acabada de la asociación de bajo presupuesto, pero de ideas fuertes y talento apriorístico. No es indispensable cuantiosos gastos de producción. De nada sirve si no hay conceptualización sólida. Con poco, se hizo mucho. Gran mérito para los creadores.

 En la estética de la cinta, no hallamos los clásicos exorcismos para don Satanás, ni la parafernalia a que nos tiene acostumbrado Hollywood. La atmósfera es el suspenso dentro del policial característico. Posee sí, un enclave que nos remite a lo fantástico: la conjunción de planos de búsqueda insondable. Por Ej.: planos en contrapicado y en picado (enfoques de la lente desde abajo y desde arriba respectivamente), dando sensación de encriptamiento, encierro, en una sola dimensión. Todo un logro por cierto.

 La conjugación de distintos dispositivos – del lenguaje y técnicos-, son de gran valía a la hora de meritar el film. Los conectores de sentido visuales, caratulan a cada escena. Siempre retoma la escena, con la imagen de un cielo encapotado y chaparrones muy sonoros, nos ponen en una atmósfera tensa de suspenso e incertidumbre. Son imágenes cristalizadas que definen el tipo de relato que se nos presenta.

 

Dos protagonistas: el detective - Chris Messina- (centro), de estructura escéptica; Ramírez (primero derecha), un agente de seguridad – con su voz over – imprimirá suspenso al metraje. 

 Pistas para entender al film: al iniciado el metraje, nótese cómo se conocen sin querer la tripulación del ascensor embrujado. Por otro lado, como se entrecruzan las distintas personalidades, ninguno son “nenes de pecho”. Poseen una maldad intrínsica que se manifiesta al estar encerrados y el miedo será el detonante para…

 En conclusión: la maldad sin límites, a veces es el reflejo de lo peor que algunas personas poseen en su interior. El demonio está en cada uno de nosotros. Sólo es cuestión de exteriorizarlo o reprimirlo según criterios. ¡Piense que el próximo, puede ser Ud.!

 

Gustavo Contarelli

Puntaje del film: 4Tribunas.
Puntaje actor protagónico: Chris Messina 5 Tribunas

Referencias:
5 Tribunas: excelente/imperdible
4 Tribunas: muy buena
3 Tribunas: correcta - buena
2 Tribunas: regular
1 Tribuna: mala/pésima 

 

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