La posibilidad de la existencia de vida en otros lugares del cosmos, es cierta. La vastedad del universo de galaxias conocido, nos hace pensar que, de la misma forma en que el proceso que generó la vida en la Tierra se abrió paso aquí, podría haberse dado en algún otro planeta o quizá se esté desarrollando en este mismo momento en algún alejado mundo que orbite alrededor de alguna estrella.
La vida en nuestro planeta tiene características propias, que son el fruto de haberse desarrollado aquí. Nuestra estrella, el Sol, los componentes del suelo, los océanos, el tamaño del planeta, la acción volcánica, los asteroides que colisionaron y lo siguen haciendo, son solo algunos de los millones de factores que influyeron para que la vida de nuestro mundo sea como es y no de otra manera.
Si pudiéramos observar por medio de algún medio fantástico, cómo son los seres vivos de estos otros mundos hipotéticos, veríamos seguramente algo muy distinto a lo que hoy conocemos como "vida".
No existen los iguales en el universo. Así como no hay dos árboles, ni personas, ni animales, ni rocas idénticas en la Tierra, tampoco podremos encontrar un planeta cuyas características sean demasiado similares a las del nuestro. Podría darse la existencia de agua, incluso de una atmósfera bastante similar, pero la variación en la cantidad de gases componentes, ozono, por ejemplo, haría que los rayos ultravioletas penetraran más hasta la superficie y eso influiría sin dudas en el desarrollo de cualquier tipo de ser viviente. Es imposible, entonces, que la vida de cualquier otro mundo sea similar a la de la tierra. Los factores que se combinarían allí y desencadenarían en vida nunca podrían ser los mismos que vemos en la Tierra. Esa vida sería el fruto de una biología diferente, de trillones de accidentes microscópicos combinados distintos a los que se dieron aquí. Sería única.
Las adaptaciones que vemos en los animales terrestres, sus extremidades, su pelaje, sus ojos, incluso sus órganos internos, como los pulmones adaptados para respirar el aire propio del planeta, son justamente eso: propios. Nuestros.
Son el fruto de nuestra gravedad, de nuestra química atmosférica, nuestro suelo, nuestra distancia del Sol, etc. También podríamos llamar propios a los accidentes que influyeron en el desarrollo del proceso viviente. El asteroide que por azar chocó con la tierra y extinguió a los dinosaurios fue sin dudas un factor determinante para que la vida sea hoy como es. Si este cuerpo estelar hubiera tenido menor tamaño o se hubiera desviado algunos kilómetros de su trayectoria, el planeta hoy estaría dominado por seres muy diferentes a nosotros.
Es por eso que llama poderosamente la atención que cuando se reporta que alguna nave espacial de origen extraterrestre ha descendido a la Tierra, y se pretende haber visto a sus tripulantes, las descripciones que se hacen de estos seres extraterrestres, los presenten, como se ha dado en llamar con una forma "humanoide".
Estos extraterrestres caminan en dos piernas, tienen dos ojos, dos brazos con dedos, una boca, etc. O sea, se parecen mucho a los habitantes de la tierra. Y es que aquí, bajo las mismas condiciones se han desarrollado seres de las más variadas características morfológicas.
Una araña y un mono, no se parecen, un mosquito y un elefante, un pulpo y un pájaro, no son similares, pero tienen en común el ADN que los "dibuja" entre millones de posibilidades dentro de (reitero) nuestro ecosistema.
¿Acaso podemos pretender que seres evolucionados en lejanas galaxias, planetas de diferentes suelos, atmósferas, afectados por diferentes accidentes, seres derivados de una manera absolutamente singular dentro de las posibilidades existentes, tengan, por ejemplo cuatro extremidades, al igual que los primates terrestres?
Es imposible.
Por ejemplo. La atmósfera terrestre hace que, con su composición, cierta parte de la luz irradiada por el Sol, llegue a la superficie y rebote sobre los objetos, generando lo que nosotros vemos como "colores". Los componentes químicos de los materiales terrestres (sea una roca, una manzana o una moneda) absorben cierta parte de la luz y rechazan otra, esta parte del espectro que es rechazada genera el color de cada elemento (las plantas absorben todo menos la luz verde, es por eso que se ven verdes, una rosa rechazará la luz de los tonos rojizos hacia el exterior, etc)
Esto equivale a decir que los órganos que evolucionaron como "ojos" en la tierra sólo sirven para captar la luz que nos llega a nosotros, de hecho, hay una gran parte del espectro lumínico (esto es la radiación solar) que no vemos. No vemos los rayos infrarrojos, no vemos las ondas de radio (las ondas más anchas de la luz)
Pero los supuestos extraterrestres que bajan de las supuestas naves, lo hacen con sus "dos ojos" abiertos para mirar alrededor. Demasiado humanos resultan ser estos seres.
En pocas palabras, si los extraterrestres existen, es imposible que se trate de humanoides. Este hecho en sí sería una contradicción total. Casi una paradoja.
Sin embargo allí están. Los seres grises (¡como si este color de piel les diera realmente una característica que los diferencia de los seres de la tierra!) descendiendo, muchas veces, como se dice, en busca de ADN humano para sus experimentos genéticos, o raptando humanos mientras duermen para abusar sexualmente de ellos dentro de sus naves.
Como dijo Carl Sagan, el eminente astrónomo norteamericano: "La posibilidad de que un extraterrestre tuviera relaciones sexuales con un humano es la misma que podría darse entre un humano y una petunia..."
Es decir. Seres de evolución diferente, provenientes de mundos diferentes, con una composición química diferente y con una fisonomía absolutamente independiente nunca podrían combinarse en este tipo de prácticas.
Una vez más, analizando las características de estos supuestos "extraterrestres" que nos visitan, nos damos cuenta de que la imaginación de los hombres a la hora de la inventiva es pobre. Somos demasiado antropocéntricos, demasiado chauvinistas como para inventar seres que difieran de nosotros aunque sea en lo físico.
Dejaremos de lado en esta nota el hecho de que su tecnología no parece ser tampoco muy diferente a la nuestra. Más allá de que se pretenda que son capaces de viajes interplanetarios, estos seres aun necesitan "experimentar" con nuestro ADN, copular con nuestras mujeres para ver los resultados.
En la tierra, ya hemos desarrollado la inseminación artificial y puede estudiarse el ADN de un ser con solo poseer una sola de sus células. No hace falta raptar a nadie para tomar muestras de tejido.
Y así es. Si seguimos avanzando en el análisis llegaremos a la conclusión de que la imaginación humana no va más allá de lo que ya conocemos de antemano, con algunas posibles variantes.
El universo, con sus trillones de posibilidades, de haber dado el fruto de la vida en otros mundos, seguramente lo ha hecho de un modo mucho más variado e impredecible que el que podamos imaginar.
Sería maravilloso que algún día tengamos la posibilidad de llegar a conocer a esos seres. Los otros habitantes del vasto cosmos. Nuestros vecinos y compañeros en la aventura poco común de la vida.
estaba en la carretera perdido solo caminando me dieron las 11:30 de la noche estaba solo yo y en eso me rodea una luz bien blanca y en eso eran tres tipos no los recuerdo bien su cara pero si me recuerdo de sus naves eran grandes y en eso solo recuerdo que amaneci en una zona desertica junto a una playa y pedi ayuda y en eso vino la policia y me socorrio por eso tube un presentimiento de andar solo antes de eso pedi a mi novia que me acompañase aquella noche y ella se nego me dio muxchisimo miedo que me habran dado o me habran puesto