La Ciudad de Buenos Aires volvió a definirse hoy principalmente antikirchnerista, según se desprende del desempeño electoral de Mauricio Macri y Daniel Filmus en el balotaje, pero el impacto nacional tiene sus limitaciones.
Macri, quien había obtenido un respaldo a su gestión del 47 por ciento en la primera vuelta y 19 de ventaja sobre Filmus, ahora se valió de ese sentimiento porteño para ampliar la diferencia con el senador del Frente para la Victoria a casi 29 puntos.
El contundente mensaje del electorado de la Ciudad deja prácticamente sin sustento la hipótesis de algunos encuestadores que mostraban a un grupo importante con intenciones de votar a Macri y luego a Cristina.
Sin embargo, la derrota porteña no significa un daño irreparable para la candidatura de la mandataria.
En 2007, cuando se impuso con el 45,24 por ciento de los votos en todo el país, la jefa de Estado había recolectado apenas 24 por ciento en la Ciudad y había finalizado segunda detrás de la candidata de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.
Lo que sí, este resultado y el de la semana próxima en Córdoba —donde el kirchnerismo no lleva candidato a gobernador— contribuirá a fortalecer el espíritu opositor de cara a las primarias del 14 de agosto.
Ese día habrá dos escenarios distintos si Cristina llega o no al 40 por ciento de los votos. Si lo hace estará cerca de su reelección, en caso contrario la compulsa estará abierta.
Gabriel Profitti
NA