El hotel de la familia presidencial, el cual compró Néstor Kirchner en 2008, al parecer está pasando por un mal momento económico. Ya que en recientemente, solo se pagó una parte de los haberes a su personal.
Según detalló el medio OPI Santa Cruz, hay anuncios extraoficiales de que la situación podría empeorar.
Fuentes del sector turístico de la provincia, le indicaron a ese medio que en el hotel adquirido por Néstor y valuado en 30 millones de pesos, “había problemas con los sueldos”, principalmente por la caída en la actividad turística de Santa Cruz y El Calafate, más precisamente, producto de la temporada baja.
Sin embargo, algo que pareciera ser común en los hoteles de 4 y 5 estrellas que no son promovidos en época invernal, se guarda celosamente entre los funcionarios de Turismo con especial advertencia de que no se filtre a la prensa. Y es que según altas fuentes le confiaron a OPI “en (el hotel) Alto Calafate están pagando el 50% del salario del mes de julio, el cual se lo han desdoblado a los empleados sin que sepan cuándo o si le van a pagar el resto; y ya les dijeron que esto seguirá sucediendo al menos por dos meses más”.
“Esta agencia pudo corroborar que el día 14 de agosto la empresa abonó el 50% de los sueldos del mes de julio, pero a la vez no se les comunicó al momento de la liquidación, si el otro 50% lo van a cobrar y de ser así, cuándo. Sin embargo nuestra fuente nos aseguró que al menos por un mes más, se aplicará esta reducción de sueldo, maniobra que han implementado varios hoteles de alta gama, quienes, además, redujeron las horas de trabajo y suprimieron servicios”, contó OPI.
Desde la Gerencia del hotel habrían hablado personalmente con los trabajadores para “recomendarles discreción” y tranquilizarlos de que “la medida es solo circunstancial y producto de la baja temporada”.
Según los gremios relacionados con la actividad, no han recibido quejas ni reclamos por parte de sus afiliados a raíz de esta situación; sin embargo, OPI conoce que en este caso puntual la “recomendación” efectuada desde el hotel, implica no difundir esta información, no solo para preservar la imagen del hotel, sino porque se ve involucrada la propia presidenta Cristina Fernández, actual propietaria de la imponente posada.
Alto Calafate fue adquirido en el año 2008 por Néstor Kirchner, luego de que consiguiera hacerse de 2 millones de dólares en medio de una crisis internacional para concretar la adquisición del paquete accionario de Hotesur S.A, propietaria del inmueble hotelero. El expresidente terminó sospechado de traficar influencias por haber manejado información económica privilegiada.
Recientemente, el hotel recobró importancia mediática por reservarse el derecho de admisión con el periodista Jorge Lanata, quien recorría el lugar para investigar las propiedades de los Kirchner en Santa Cruz.
Carlos Forte
Twitter: @fortecarlos