En las próximas horas, la versión será negada con insistencia. Sin embargo, Ricardo Echegaray vive sus últimas horas al frente de la AFIP.
Tal es así que ya hay incluso nombres de sucesores en danza, con una característica común: ambos tienen un vínculo con el actual titular de la AFIP. El primero es Carlos Alberto Sánchez, un contador que ocupó la Dirección de Recursos de la Seguridad Social, y que con la llegada de Jorge Capitanich, pasó a ser vicejefe de Gabinete.
El otro es Guillermo Michel, un joven funcionario que desde 2010 ocupa la Subdirección de Coordinación Técnico Institucional.
"Es cuestión de tiempo", dijo a diario El Cronista una fuente del Gobierno. "No es buena la relación de Axel Kicillof con Echegaray", aseguró la misma fuente.
En el mismo plano, otra fuente del Gobierno dijo que todo lo que tiene que ver con el dominio político está en línea con Cristina-Zannini-Capitanich, mientras que lo que está vinculado a la "caja", la línea es Cristina-Kicillof.
Otra muestra que a Echegaray le están delimitando el terreno está vinculada con la salida de la titular de la Aduana, María Siomara Ayerán.
Ayer por los despachos oficiales se aseguraba que Ayerán tenía reemplazo. Tanto se lo aseguró, que algunos esperaban que Cristina anuncie los nuevos cambios luego del acto de asunción de María Cecilia Rodríguez y Juan Carlos Molina, al frente del Ministerio de Seguridad y de la Sedronar, respectivamente.
Como reemplazante de Ayerán se nombraba a Noemí Rosa Muchnick, una joven ingeniera agrónoma, vinculada a la agrupación política "La Cámpora". Actualmente trabaja en Aerolíneas Argentinas.
Lo que muchos se preguntan en estas horas no tiene que ver con la continuidad o no de Echegaray, sino con su paso por la función pública: ¿Irá preso o no?
María Luisa Torres