Este sábado, Cristina Kirchner y el papa Francisco mantuvieron un amistoso encuentro a agenda abierta. Allí, la presidenta dijo que el sumo pontífice "no está preocupado por la gobernabilidad del país".
A su vez, la mandataria se mostró, como pocas veces, dispuesta a responder preguntas de los periodistas que cubrieron el almuerzo, en la residencia Santa Marta.
Asimismo, Cristina destacó que "el punto 56" de El evangelio de la Vida, que escribió el papa sobre la especulación financiera, "parece haber sido escrito para la Argentina".
Para la jefa de Estado, la situación a la que exponen los tenedores de bonos a países como la Argentina "es una preocupación constante de su santidad", por lo que coincidieron en la necesidad de lograr reformas profundas en la organización de la economía mundial.
"El está muy preocupado por la situación que atraviesa el mundo. Y los próximos días va a seguir viajando por los países de Europa", señaló.
Más allá de las palabras de Cristina, se armó una inesperada polémica cuando el diputado camporista Andrés "Cuervo" Larroque le entregó a Francisco "todos los libros" sobre la agrupación kirchnerista La Cámpora y una camiseta de La Cámpora. Inmediatamente las redes sociales estallaron: