Una vez más la intolerancia y el desprecio a las instituciones republicanas se dieron cita en un singular aquelarre de contracultura posmoderna. El lugar, el Palacio de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El martes 18 de septiembre del corriente año, a las 18 hs., se iba a realizar en ese escenario, una charla sobre «Adoctrinamiento en las Escuelas», organizada por la ONG Ciudadanos Libres por la Calidad Institucional. El fanatismo del gremio UTE-CTERA (Unión de Trabajadores de la Educación / Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina, respectivamente), que creen que pueden imponer al soberano creencias y modos de pensar, no lo hizo posible. ¿Qué ocurrió? El lobby de estos grupos reaccionarios presionó para que se censure la exposición sobre un problema educativo manifiesto. Resulta curioso que sean los gremios docentes, los mismos que adoctrinaron niños con la operación “Maldonado”, quienes ahora se quejan de la desconfianza que generan en la sociedad.
La Legislatura porteña expuso la causa de la suspensión de dicho evento: “Por cuestiones vinculadas a la seguridad y a la necesidad de evitar el uso de la fuerza contra los gremialistas, que iban a hacer desmanes – porque era lo que buscaban–, se suspende la charla.” Las distintas fuentes autorizadas de información a las que accedió Tribuna de Periodistas, revelaron la crónica de una censura anunciada:
-“Que la charla fue convocada con más de una semana de anticipación y publicada en redes sociales durante un plazo similar”. -“No obstante, la presentación de los gremios se hizo el mismo día de la charla para evitar un razonable margen de respuesta”.
-“Que ya el día anterior, comenzó una operación en medios kirchneristas y sus operadores, trabajaron en redes sociales acusando a la ONG organizadora falsamente de ‘negacionista’ de la dictadura y del número fetiche de los 30 mil desaparecidos”. Ver el artículo del house organ kirchnerista Página/12.
-“No es ‘negacionista’ pedir al Estado el número de desaparecidos, y que el resultado de un número similar a CONADEP, o al que sostiene Fernández Meijide".
-“El día 18, los sindicatos fueron a la Legislatura y a la Comisión de Educación; que previamente a eso estuvieron operando en toda la Legislatura, presentando notas y paralelamente amenazando”.
Con todo, este portal de información consultó al Dr. José Magioncalda, Presidente de la ONG Ciudadanos Libres por la Calidad Institucional, que auspició el encuentro y quedó en el ojo de la tormenta por la coacción a la libertad de expresión: “Los peronistas no conocían el número de desaparecidos, porque se negaron a participar de la CONADEP y apostaban a la autoamnistía / Agradezco al Legislador radical Guillermo ‘La Cuca’ Suárez, que es el que había pedido el Salón Pte. Alfonsín para la actividad y que es el único que entiende la importancia de discutir sobre Adoctrinamiento”, concluyó.
En fin, la constitución de una república moderna se funda en el respeto de la libertad de pensamiento y opinión, sin adoctrinamiento político de ningún tipo. Todavía persisten los sindicalistas que infectan la cultura, oponiendo la marginalidad como lógica en las relaciones sociales. Ellos aborrecen el conocimiento científico por considerarlo un disciplinador social. Así, jamás habrá desarrollo y ahogados en su propia mishiadura dialéctica, se condenan al atraso y la dependencia. A no hacerse los distraídos, ¡el pueblo quiere saber de qué se trata! La educación bien lo merece. Ya lo expresó sabiamente el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa: “El populismo es el camino de la autodestrucción de la democracia”.
La Intolerancia y anticiencia del gremio UTE-CTERA, asociado al patoterismo sindical cultural. Un lobby peligroso para la salud de una República moderna libre de mesianismo y contracultura. Casualmente, son los mismos que se oponen a las pruebas internacionales de medición del conocimiento escolar: PISA, TALIS, PIAAC, IEA, PIRLS, TIMSS. ¿Comparemos el desarrollo de los países que apuestan al conocimiento? Ej.: Japón, Finlandia, Singapur (líderes en ciencia). Claro está, allí no hay gremios que apuestan a la violencia, al odio, al resentimiento social y no censuran debates de educación como objeto de estudio.
Gustavo Contarelli