Las actividades educativas oficiales y de universidades públicas y privadas para celebrar los 200 años de creación del Estado argentino serán una buena oportunidad para ahondar, desde una perspectiva histórica, el papel de la enseñanza en la unificación del pueblo y la Nación, la masividad primaria, el elitismo del nivel medio y desafíos de la educación superior en el futuro. Uno de los foros más relevantes que tendrá lugar por estos días con la presencia de ministros del área y pedagogos será el Congreso Nacional de Educación del Bicentenario, que desde el lunes y por tres días sesionará en Entre Ríos, y tendrá como nota distintiva que estará dirigido a más de 1.000 docentes de institutos de formación del país.

La educación argentina en perspectiva histórica, la educación y trabajo, los problemas del presente y caminos del futuro, la juventud y la escuela secundaria, y la educación superior, entre otros temas, serán expuestos por especialistas y debatidos en la Escuela Normal de Paraná, la primera escuela formadora de maestros del país que fundó Domingo Faustino Sarmiento en 1870.

Allí se promete generar un espacio de debate amplio y plural en el que ingresen diversos enfoques y perspectivas sobre cuestiones que giran en torno al desarrollo del país, a partir de la Revolución de Mayo y la Independencia, hacia los diferentes campos del quehacer social.

Entre Ríos, sede de este Foro, entre sus notas distintivas reúne el ser la tierra de muchos abuelos, que llegaron producto de dos corrientes inmigratorias de Europa, huyendo de la guerra mundial y del nazismo.

Muchos de ellos se constituyeron en "gauchos", judíos mayormente, y también de comunidades alemanas, y que entre sus primeras acciones fundaron bibliotecas y teatros en las principales ciudades y más tarde, levantaron sus casas y las cooperativas.

Estas notas culturales, más la voluntad de superación personal, llevó a enseñarles las letras a muchos peones, que de otro modo hubieran permanecido en el olvido. El subsecretario de Cultura de Entre Ríos, Roberto Romani, expresó que "este Bicentenario nos tiene que encontrar recordando lo que hicieron nuestros abuelos, pero también pensando que está en nuestras manos trasladar a las generaciones venideras esa fuerza y esas convicciones, que no solamente sea recordar cómo empezó la historia, sino cómo avanzamos en el futuro".

También Entre Ríos tiene otros antecedentes de relevancia con respecto a la historia de la educación nacional.

La vicepresidenta de la comisión de Educación del Senado nacional, Blanca Osuna, explicó que "después de 1810 cuando todavía no estaba constituida la Nación argentina, el referente entrerriano, Francisco `Pancho´ Ramírez instituyó en el articulado del Reglamento para la República de Entre Ríos y con mucha contundencia, la educación gratuita y obligatoria para los niños".

Y también incluyó en esa normativa el caudillo "la responsabilidad del Estado de preservar la obligatoriedad y de construir escuelas".

"Estas definiciones en el devenir histórico tomaron una potencia y una fuerza muy grande y en ese sentido la Escuela Normal de Paraná es señera en el país y en América Latina", destacó la legisladora entrerriana.

Osuna subrayó también la importancia de "la Escuela de maestros Rurales Alberdi que comienza a formar pocos años más tarde maestros para esas zonas".

Qué papel cumplió el Estado respecto a la educación argentina en 1810 cuando aún no estaba constituida Argentina, cuál fue su responsabilidad en el cumplimiento de la obligatoriedad, en la integración de las clases sociales, los inmigrantes y los pueblos originarios y en el mantenimiento de la gratuidad, serán parte de las preguntas.

Otros interrogantes buscarán develar qué desafíos e inversiones promete la Nación en el presente y en el futuro para todos los niveles, para la formación docente, el acceso de niños, jóvenes y maestros a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, en el freno a la deserción en el nivel medio y superior.

Laura Hojman