Acceder al feed de los comentarios de este artículo
En las últimas horas, el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, salió al cruce de las declaraciones de la ministra de Seguridad, Nilda Garré, en la polémica por el creceinte narcotráfico en esa provincia y le recordó a la funcionaria que "la droga entra por la frontera".
De esta manera, Bonfatti retrucó a Garré, quien había renovado las críticas de la Nación a Santa Fe por el "accionar de bandas de narcotraficantes" en la provincia, al señalar que el despliegue de esa actividad en la provincia "suena a zona liberada".
Y allí, el mandatario dijo lo que todos saben pero pocos quieren escuchar, al menos en Casa de Gobierno: "La droga no se produce en Santa Fe, entra por algún lado. Tenemos que radarizar las fronteras, controlar los barcos".
Más adelante, Bonfatti hizo una crítica velada a la falta de coordinación para la lucha contra el narcotráfico: "Entre todas las provincias, tenemos que tener un programa de abordaje integral de este tema", aseguró.
Esta discusión ocurre en el marco del gran papelón cometido por el Gobierno nacional en torno a la investigación del supuesto narco comisario Hugo Tognoli, quien solo estuvo unos pocos días en prisión y ya recuperó la libertad al comprobarse que la principal prueba contra su persona era falsa.
Lo que tal vez debería investigarse son los aportes de campaña del kirchnerismo, ya que al menos de los financiaron a Cristina en 2007 eran narcotraficantes reconocidos. Uno de ellos, Ibar Esteban Pérez Corradi, hoy está imputado incluso por el triple crimen de General Rodríguez ocurrido en 2008.
A eso debe sumarse la acusación que hizo la embajada de Estados Unidos respecto a la misma elección del Frente para la Victoria, algo que surgió de los famosos cables de Wikileaks. Allí, quedó al descubierto que las dos principales fuentes de financiamiento de la hoy Presidenta, fueron las sospechosas valijas de Hugo Chávez y los dineros aportados por el cartel mexicano de Sinaloa, dedicado al tráfico de drogas.
Con esos antecedentes, a los que se suma la falta de radarización del territorio argentino y la falta de campañas alertando por el consumo de estupefacientes, ¿con qué cara pueden hablar los funcionarios del kirchnerismo sobre el tema?
Carlos Forte
Seguir a @ForteCarlos
