Con la normalización de las relaciones diplomáticas entre EEUU y Cuba luego de más de 50 años de interrupción, finaliza la última experiencia socialista a nivel mundial. El capitalismo estadounidense otorgó el golpe de muerte a un modelo estatista cuyo devenir era la crónica de una muerte anunciada.
Muere cualquier intento de plantear una alternativa a la sociedad mundial. Cayó la última trinchera que sostenía los viejos ideales de una sociedad más justa, de privilegiar a la comunidad por sobre el individuo, de contrarrestar la lógica de la ganancia frente al bienestar vital de una sociedad.
Fluirán hacia Cuba los dólares, los turistas estadounidenses, las inversiones en hoteles y casinos. Cuba será más alegre y más linda. Las jineteras cobraran más caro, pero quien sabe si vivirán más dignamente. Cada cubano podrá comprar coca cola y destapar felicidad o tal vez podrán atiborrarse de “Mc combos” hasta quedar hechos unos obesos. Un nuevo y brillante mundo les espera.
Más allá de las ironías habrá que reconocer las falencias del modelo socialista cubano, su crisis habitacional, la violencia intrafamiliar por hacinamiento, el déficit en el transporte público. Pero también debemos destacar sus logros, su sistema de salud universal y ejemplar, la inexistencia del analfabetismo, la inexistencia, también, del tráfico de cocaína y de la drogadicción, entre muchos otros galardones.
Pero quedó claro que Cuba necesita a EEUU para lograr un nuevo despegue económico, necesita exportar sus habanos, el ron, el tabaco, el azúcar y los productos naturales de la isla. Pero convengamos que Cuba quedará baja la órbita del capitalismo más salvaje que es el de EEUU ¿Podrán sostenerse los excelentes sistemas sociales de salud y educación? ¿Podrá contar cada cubano con un mínimo para su supervivencia? Probablemente se caiga en el reino de la desigualdad y poco a poco el país se transforme en lo que era antes de 1959, una colonia estadounidense, un lugar de juegos, turismo, divertimento y lupanar. Pero quizás así los ciudadanos sean más felices, respiren libertad, puedan salir de la "isla cárcel", y se desprendan de un modelo dictatorial y autoritario.
Es el fin del último torreón en donde se escondía la utopía. Con esto se reafirman las ideas de Bauman, el fin de la idea de comunidad, el surgimiento del hiperindividualismo y la libertad total del hombre para empobrecer o enriquecerse. Es un trofeo enorme para las multinacionales. Un McDonalds en La Habana, hecho histórico equiparable a la caída del muro de Berlín. El capitalismo triunfó y desarticuló al proletariado. La colonización de la subjetividad por parte de los Mass Media es un hecho concreto. Cada hombre tendrá que valerse por sí mismo a como dé lugar, como diría Eric Hobsbawn "Una carrera abierta al talento", al talento de desarrollar una profesión virtuosa o al talento para traficar, trampear, serruchar y estafar.
En palabras de Heiddeger diremos que "el tecnocapitalismo norteamericano se adueñó del mundo" y que la burguesía, representada por las multinacionales, realiza su última gran conquista. Aunque el mismo filósofo nos diga que el sujeto se apropió del ente, con la consiguiente pérdida del Ser. Es decir que el hombre se apropió de la naturaleza transformándose él mismo como Sujeto en pura materialidad superflua, sin alma, sin esencia. Con esto deviene la muerte del Ser y el triunfo del “dios dinero”. Lloverán los verdes en Cuba y todos saltarán contentos.
El acercamiento de Obama cuenta con una mirada estratégica fenomenal. Raúl Castro se estaba vendiendo al mejor postor, China primero, luego Rusia, pero le entregó la bombacha al macho más lindo del baile. EEUU se lleva a una bella morena caribeña quitándole la posibilidad de conquista de la fémina isla tanto a China como a Rusia. Tampoco estas dos potencias euroasiáticas tenían verdadero interés en lograr una mayor injerencia en Latinoamérica ya que la verdadera lucha para ellos está en Asia Central, el Cáucaso, el Medio Oriente y en toda la zona del espacio post-soviético. Allí se encuentra el centro de gravedad de la batalla a decir del estratega alemán Vonn Klausevitz.
Cayó la dinastía Castro, pronto caerá Maduro en Venezuela y las FARC en Colombia son una raza en extinción ¿Con estos hechos consumados, se concretará el ALCA? ¿Significará el triunfo del capitalismo más salvaje sobre Latinoamérica entera?
Obama confirma su papel de estratega. Ya no existe ningún modelo alternativo capaz de frenar el desastre ecológico. El sujeto capitalista se devorará al mundo. La revolución permanente sigue en marcha y me refiero a la permanente revolución comunicacional y de la microelectrónica. Cada vez más instrumentos de consumo/dominación estarán diseminándose en cada rincón del mundo, internet, redes sociales, celulares, mass meddia, etc.
Los anhelos Trotkystas de "la revolución permanente" son concretados de hecho por, según Marx, la clase más revolucionaria de toda la historia de la humanidad: la burguesía.