Dicen, personas cercanas a Cristina, que para el final de su mandato piensa llevarse puestos a todos.
Dicen, además, que ante la imposibilidad de ganar las elecciones, Cristina quiere que Mauricio Macri sea electo presidente para hacerle la vida imposible.
Dicen, que para eso, piensa dejarle un campo minado al próximo gobierno.
Ese campo minado serán una serie de medidas fundamentales que se deban tomar para comenzar a corregir la desastrosa herencia que dejará el kirchnerismo, para lo cual si o si habrá que pagar, indefectiblemente un costo político.
Vamos a detallar, entonces, los cinco puntos más salientes, urgentes e importantes que deberá solucionar la próxima administración.
Pago de deuda
El pago a los ahorristas, tras el fallo del Juez Thomas Griesa es ineludible.
Como hemos visto, hasta ahora, el kirchnerismo busca cualquier tipo de excusa para justificar lo injustificable, pero la sentencia fue dictada, y las sentencias hay que cumplirlas, si es que pretendemos ser un país medianamente serio, cosa que hoy no somos.
Retraso cambiario
Este será, sin dudas, el punto más conflictivo a resolver, principalmente por el impacto que trae, tanto en lo material como en lo psicológico, corregir el precio del dólar. Eso se llama devaluar, palabra que ningún gobernante quiere utilizar, y que no por casualidad, nadie de este gobierno la pronuncia.
El valor ridículo del dólar oficial está perjudicando de manera implacable a todo el sector productivo exportador, y eso se traslada, indefectiblemente en la economía doméstica.
Tarifas
Otro punto inevitable será el sinceramiento de las tarifas públicas.
Un simple ejemplo, mínimo, sería que hoy un viaje en colectivo debería costar alrededor de diez pesos, sin el subsidio, obviamente, y así podríamos seguir con una lista larguísima, desde las tarifas de luz, agua y gas hasta el precio de la leche, solo por citar algunos ejemplos.
Gasto público
El gasto público lo podríamos denominar como el emblema del kirchnerismo, ya que fue esta su principal "política de estado", por llamarlo de alguna manera.
Evidentemente, parecería que todavía nadie dentro del Frente Para la Victoria se enteró de que el gasto público sin respaldo es lo que genera inflación, y recortar ese despilfarro de fondos que va desde el gasto en propaganda, pasando por la cantidad descomunal de empleados públicos hasta el engendro del "Fútbol para Todos" -entre tantísimas otras cosas- recibirá, como es previsible, gran resistencia por un sector importante de la población.
Planes sociales
Si bien, el gasto de los planes sociales lo podríamos encuadrar dentro del gasto público, este es un tema mucho más complejo, ya que trae aparejado un problema social que no es necesario aclarar.
No es ningún secreto que los planes son la principal herramienta del kirchnerismo para generar clientelismo. No es ningún secreto que quienes reciben planes sociales son rehenes del gobierno, y son utilizados no solo a l hora de emitir un voto, también son utilizados para concurrir a los actos públicos para "hacer número" para la foto.
Más allá de otras muchas cuestiones, como la principal que deberá solucionar el próximo gobierno que es la inseguridad -problema número uno hoy por hoy para la inmensa mayoría de la población- este es el panorama que deberá afrontar el próximo gobierno, y todos sabemos que por más que se tomen las decisiones correctas, cuando se requiere de cirugía mayor para curar al enfermo, siempre, indefectiblemente, hay un costo político.
Todo dependerá de cómo estas intervenciones quirúrgicas se hagan y de cómo lo asimile el paciente, o sea, el pueblo argentino.