No quedó claro el objetivo del triunvirato opositor, al cabo de la conferencia de prensa del miércoles 26. Sacamos entradas para ver "Día de la Independencia", pero el operador del cine nos pasó, otra vez, como en Santa fe, y como en la noche del ballotage porteño, "La Armada Brancaleone".
Stolbizer, Macri, y Massa dejaron flotando una sensación de orfandad que, de tan preocupante, es casi desoladora. Para denunciar un gran fraude en Tucumán, pero no tanto.
Sin precisiones contundentes, sin evidencias irrefutables, sin denuncias claras y determinantes, sin urgencias ni exigencias sólidas...salieron a mendigarle transparencia nada menos que al kirchnerismo, que es una calamidad política por donde usted la mire, pero también es un peso pesado de las trampas electorales, y discursivas.
Los tipos construyeron su épica falseada, a lo largo de 12 largos años, casi exclusivamente desde el relato; y estos pibes, que ni siquiera se pueden expresar con claridad, se juntan, crean grandes expectativas, pero terminan con un aburrido cero a cero.
Para colmo de males, la única dirigente que puede salirse del esquema y meterse a pelearle al kirchnerismo en su mismo fango, ha quedado obliterada ante la coyuntura que ella misma creó.
Carrió ya no puede aparecer en este nuevo contexto de unidad opositora, (ante la desgracia), sentada junto a quien siempre calificó como traidora, y a quien calificó como narcocandidato.
Justo cuando el kirchnerismo se disfraza de justicialismo del año ´46, estos tipos se le presentan exactos como la Unión Democrática de Tamborini y Mosca.
Con Macri queriendo convertirse en un preceptor cívico, que te amenaza con amonestarte si no te cortás el pelo, y te pide por favor que tengas la amabilidad de no quemarle urnas, aunque esté preso por pirómano electoral precisamente un candidato de su espacio.....con Massa dilapidando votos a lo pavote, y recibiendo gratuitamente un baldazo de antiperonismo de parte del cronista de TN...
A veces uno cree que los dirigentes opositores viven atrasados. El triunvirato que debió reunirse para figurar juntos en las boletas, antes del 30 de Junio, se reúne recién después de la PASO, con todo el pescado vendido, y cuando ya nada puede hacerse más que contar votos ajenos.
Pidiendo el cambio absoluto del sistema electoral, que debio exigirse 6 meses atrás, y que, ahora, se parece demasiado a la exteriorización de un gran fracaso.
La verdad es que no se puede comprender que, en medio del lapso más importante entre elecciones fundamentales, estos muchachos sigan tan estructuraditos, guionados, y sean así de diet.
No puede ser que lleguen a la presidencial navegando a media agua entre el antikirchnerismo y el antiperonismo, especulando con que cada palabra les agregue o les quite un voto.
Exasperan, por momentos, como esos equipos que van perdiendo 2 a 0 y tocan el fulbito para los costados, mientras usted se muerde los puños para que ataquen.
Tampoco se puede entender que tengan tanta falta de coordinación con los medios opositores y los grupos de poder real, que les arman jugada tras jugada para que ellos definan, pero sistemáticamente pifian, y el kirchnerismo vuelve, tranquilo, a sacar del arco.
Cuando en horas de la tarde Chapa 01 les respondió, sencillamente, señalándole que ellos no reconocen los triunfos ajenos, vale decir "estas son las reglas del juego, y mínimamente ustedes deberían conocerlas, criaturas", uno sentía que estaban sobre el ring Rocky frente a Kid Cachetada.
Uno mira hacia el kirchnerismo y ve que son una calamidad política que ejerce el poder con contundencia. Pero cuando lo mira a Macri recuerda a Carlos Reutemann en el ´74, quedándose sin nafta a media vuelta del final.
La verdad es que los antik deberán encender velas para que Scioli cometa más errores no forzados, como el del viaje a Italia.
Porque así como están las cosas, solamente un milagro puede hacer que estos muchachos le ganen la elección.