En las últimas horas, Marcos Peña recibió de manos de Graciela Camaño el documento que compromete a su propio espacio. El paper donde se revela uno a uno quiénes manejarían ese entramado en Twitter y cuánto cobrarían por eso (ver documento completo al pie).
Fue al finalizar su discurso de este miércoles: allí, la jefa del bloque del Frente Renovador le entregó al jefe de Gabinete un pormenorizado informe sobre el “troll-center” de Cambiemos, que trata sobre “la industria del escrache” y detalla con nombre y apellido quiénes manejarían ese entramado en Twitter.
“Cada vez que alguien critica al gobierno se convierte en víctima del troll-center. Los coordinadores definen una línea de escrache, los trolls preparan materiales y coinciden en una fecha y hora para salir todos juntos a destruir al objetivo en redes sociales”, arranca el documento que Camaño le dejó a Peña.
Allí se sostiene que en montar ese sistema “se gastan 205 millones de pesos por año, contratando trolls que inscriben formalmente como empleados públicos”.
Uno de los datos principales que se pretende denunciar es que “Marcos Peña es el cerebro de este gabinete en las sombras”, ya que “comanda al menos cuatro grandes estructuras creadas por funcionarios en campaña, que ahora le responden desde que son financiadas por el Gobierno nacional”.
Se identifica a Octavio Paulise como la persona que “se dedica a construir fakes para falsear la opinión pública con intenciones políticas”. Según el informe, Paulise responde al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y cobra “53 mil pesos” mensuales mediante un “convenio de cooperación”.
Otros de los operadores nombrados son “Lucho” Bugallo, Carlos Correa Arias y Nazareno Etchepare, “tres asesores de (Elisa) Carrió y también impulsores del #Cacerolazo convocado por las redes sociales contra el gobierno de Cristina Kirchner”, que cobrarían “60 mil pesos mensuales” provenientes de diferentes dependencias.
“A ellos se le suman Mariana Torres y Marcelo Moran, ambos trabajando originalmente bajo el mando de Patricia Bullrich y su partido porteño. Ambos administraban el perfil ‘El Anti K’ y desde ahí se encargaron de posicionar a Bullrich y a Carrió como las principales protagonistas de las marchas”, agrega el informe del Frente Renovador.
También se hace un detallado análisis del hashtag #MassaEsK, donde se concluye que los trolls combinaron “utilización de un mismo hashtag, concentración de menciones, coordinación horaria y elevado promedio de menciones” por cuenta participante.
Por último, se mencionan como ejemplos las campañas contra la vedette Pamela David, el papa Francisco y el conductor Marcelo Tinelli; y se cita un informe de Amnistía Internacional sobre ciberataques contra once reconocidos periodistas, como Hugo Alconada Mon, Carlos Pagni y Marcelo Longobardi.