El escenario electoral, lejos de esclarecerse, cada vez se vuelve más enrevesado, a tal punto que no se entiende, ni se sabe con exactitud, cómo van a llevarse adelante las elecciones presidenciales este corriente 2019.

Dicen que el único precandidato establecido es el actual presidente Mauricio Macri y que no hay chances de llevarse a cabo lo que se conoce como “Plan V”. En buen romance, fue ratificado por la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal; el alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña; el ministro del interior, Rogelio Frigerio; el ministro de trabajo de la provincia de Buenos Aires, Marcelo Villegas; incluso por el mismísimo jefe de Estado, entre tantos otros funcionarios.

La cuestión es que a Macri le están pidiendo un cambio desde el círculo rojo, incluyendo el mercado (interno y externo) y el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI), dependiente de Americas Society, quien a su vez se encuentra bajo la órbita del CFR.

Cabe detenerse en esta instancia, ¿Qué es el CFR? ¿Por qué es tan importante que el CARI le pida un cambio de Gabinete al actual mandatario argentino?

El CFR se muestra como un órgano de debate para el mejoramiento de la calidad humana alrededor del mundo, sin embargo, en la sombra, se trata de una organización creada por las familias más importantes del mundo (Rockefeller, rothschild, entre otras) con el mero objetivo de generar y mantener la globalización en su afán de controlarlo todo.

Desde este lugar se explican creaciones como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial e incluso la injerencia de la Reserva Federal en las políticas monetarias alrededor del globo.

Evitando el explayamiento, que desde el CARI, es decir indirectamente desde el CFR, le pidan a Macri un cambio, implica que al presidente no le quedan muchas opciones.

En ese sentido, ¿Vidal aparecerá en la fórmula presidencial ya sea para la presidencia o la vicepresidencia?

Desde el oficialismo insisten en que no existe chance alguna de que eso ocurra, no obstante, con la presión que recibe el ingeniero, parece no quedarle otra opción, entonces, ¿Cómo se entiende que el Gobierno proteja tanto esta probabilidad?

Algunos funcionarios simplemente hablan desde la incredulidad al aseverar fehacientemente que no hay posibilidad de un cambio (paradójicamente) dentro de Cambiemos en su fórmula presidencial, ello, tras creer las “irrefutables” palabras mencionadas tanto por el más alto funcionario del país como de su gobernadora bonaerense.

Entonces, la otra incógnita que surge es: ¿Por qué Macri y Vidal rechazan la propuesta tan vehementemente a todo aquel que se los sugiera?

La respuesta es sencilla: mientras más tiempo permanezca la gobernadora como precandidata presidencial, mayor es la probabilidad de que pierda apoyo social, es decir, votos.

Es dable destacar que nunca en la historia de la política argentina debió ratificarse tanto a un precandidato presidencial, no es casual que así sea en estos tiempos, como tampoco lo es el hecho de que un secretario del Ejecutivo Nacional le mencione a Tribuna de Periodistas que poner a Vidal en la fórmula para la presidencia “no es lo que más nos convence, pero es por una cuestión de necesidad” ya que “no podemos dejar que el kirchnerismo vuelva”.

Todo, menos los funcionarios, cuya confianza quedó sobremanera debilitada, demostraría que todo terminaría con la gobernadora de la provincia de Buenos Aires en la fórmula, ya sea como presidenta o como vicepresidenta.

Solo el tiempo dirá, después de todo, tal cual lo dijo la escritora Maya Angelou, “Todos los grandes logros requieren tiempo”.