El pasado 6 de febrero, informamos sobre la difícil situación que estaban pasando un grupo de 1.400 docentes de la Provincia de Buenos Aires, que pertenecen al área socioeducativa y que fueron desplazados por el Gobernador Axel Kicillof.
La situación lejos está de solucionarse y los gremios docentes siguen mirando para otro lado. No obstante ello, a falta de dirigencia sindical que se ponga a la cabeza del reclamo, fue la concejal de José C. Paz, Daniela Grana, que pertenece a Juntos por el Cambio, quien se apersonó acompañada de un grupo de damnificados al Concejo General de Educación de la Provincia de Buenos Aires, con sede en La Plata.
Allí fue recibida por un funcionario de dicho ente, Diego Martínez, a quien le entregó un petitorio firmado por docentes, auxiliares, padres y vecinos de las regiones educativas 9 y 10 (ver al pie).
En el mencionado petitorio se sostiene que “para nuestras comunidades, asentadas en distritos con problemas socioeconómicos estructurales de décadas, es de suma importancia seguir contando con espacios públicos de desarrollo humano y contención social, tal como son las Escuelas Abiertas, los Coros…” entre otras actividades. “Miles de niños y adolescentes en toda la provincia y, particularmente en nuestros barrios del conurbano, esperan una respuesta.”
Luego de que la Provincia destruyera, con el aval sindical, acuerdos destinados a mantener el valor del salario de los maestros, hoy 2 de marzo, comenzarán las clases en las escuelas bonaerenses.
Lamentablemente, lo harán sin ese particular refuerzo que, por vía de actividades culturales, brindaba el área socioeducativa a los niños y adolescentes de los sectores más postergados.
Extraña “solidaridad” la del oficialismo bonaerense.