El enfrentamiento al coronavirus plantea dos tipos de estrategias. Una es la mitigación que se basa en poner en cuarentena a los infectados y las personas cercanas. La otra es el confinamiento que consiste en encerrar en su casa a toda la población.
La primera apunta a que la cantidad de nuevos casos cada día sea inferior a la del día anterior y así converger en el mediano plazo a que no haya más infectados. La segunda, el confinamiento, es más ambicioso porque apunta directamente a cortar el contagio.
Argentina optó por el confinamiento. La decisión fue atinada porque se hizo de manera temprana y aprovechando varios feriados, lo que reduce las pérdidas económicas. Sin embargo, el confinamiento no puede extenderse por mucho tiempo. Además de que irá creciendo el hartazgo de la población, la capacidad del Estado para asistir a las empresas formales y los trabajadores informales, que son casi la mitad de la fuerza laboral, es muy limitada.
Un informe de la consultora IDESA explica el “enorme desafío” que esto representa por lo cual recomienda observar el avance de la enfermedad en otros países: “La experiencia de Corea, Italia y España puede ser ilustrativa”, explica. Según la Organización Mundial de la Salud se observa que en los últimos 14 días:
-En Corea la tasa promedio diaria de nuevos casos fue de 2% y la cantidad de test realizados para detectar el coronavirus es de 6.150 x millón de habitantes.
-En Italia la tasa diaria de nuevos casos fue de 20% y la cantidad de test para detectar el coronavirus es de 3.500 x millón de habitantes.
-En España la tasa de nuevos casos fue de 36% y la cantidad de test realizados para detectar el coronavirus es de 650 x millón de habitantes.
Estos datos muestran una alta correlación entre la cantidad de test para detectar el coronavirus y la desaceleración de nuevos casos reportados: “Mas allá de que operan una multiplicidad de factores, la correlación no es casual. La Organización Mundial de la Salud y las sociedades científicas en epidemiología recomiendan que la estrategia más efectiva es la aplicación masiva de test de detección del coronavirus en la población”, explica IDESA.
Los test son centrales en la lucha contra el coronavirus porque mucha gente, especialmente niños, jóvenes y adultos en edad activa, es portadora asintomática o con síntomas de gripe leve: “Mientras que mayoritariamente entre ancianos y enfermos crónicos con bajas defensas la enfermedad se presenta de manera severa y crítica. Con el test se puede detectar a los portadores asintomáticos y focalizar sobre ellos el confinamiento, liberando a las personas no afectadas para volver a la actividad productiva y a la vida social normal. Planteado en otros términos, el confinamiento masivo es una costosa medida generada por la ignorancia de quiénes son los infectados. Los test permiten superar esta ignorancia”, avanza el informe.
El principal problema es que la logística que se requiere para hacer los test de manera masiva es muy compleja: “Países altamente organizados, como los europeos, no lograron montarla a la velocidad que requiere la pandemia. Este es un punto meritorio del sistema sanitario coreano y una gran debilidad en la Argentina. Actualmente el test se hace sólo en una institución pública de la Ciudad de Buenos Aires y recién se está trabajando para hacerlo en algunas provincias. Si se acelera el ritmo, se podría relajar el confinamiento”, de acuerdo a IDESA.
Y culmina: “Sin dudas que la pandemia va a dejar muchas enseñanzas. Una de ellas es la importancia de ordenar las acciones del sector público en función del régimen federal previsto en la Constitución. En materia de salud no hay un sistema, sino 24 sistemas a cargo de cada una de las provincias”.
Una tontería monumental con un costo elevadísimo y como medida aislada no garantiza nada más que un aestadística. Si hay otros factores los datos no muestran una correlación. Es tan simple como que hacer un test y dar un negativo no garantiza que media hora después esa persona se infecte y siga infectando a otros. También hay una correlación entre la altura de los edificios y la tasa de test reaizados pero eso no permite recomendar edificios altos para combatrir la pandemia. Hay que tener cuidado con lo que cualquiera puede decir en nombre de una sigla como OMS o UN o la que sea.
Eso también ocurrió en España. Los milenials saturaban las guardias buscando su test negaivo de coronavirus como si fuera una entrada a un boliche o un registro de conductor. Si pensás que estás a salvo y seguís de reuniones, nada te garantiza que dejes de ser negativo un par de horas después.
En Argenzuela el sistema de salud es un gran curro $$$ que hace millonarios a sindicalistas, gobernadores y políticos nacionales. Los gobiernos provinciales jamás van a querer centralizar el sistema porque pierden caja $$$.