Sabido es que los sistemas de salud que rigen a los trabajadores hoy declarados esenciales, presentan graves falencias.
Desde hace décadas los servicios y prestaciones sufren progresivos deterioros, ya que la asistencia que se brinda a los miembros de las Fuerzas Armadas, de Seguridad y Policiales, ha adoptado una forma restrictiva y burocrática que para colmo de males, responde a lineamientos, presiones y condicionamientos institucionales, que pretenden evitar deserciones aún a riesgo que los pacientes no se curen o que las verdaderas causas de sus dolencias salgan a la luz.
Las pautas y prioridades se han tergiversado, y el cuidado objetivo de los pacientes que debiera primar, y por el cual ellos mismos "pagan religiosamente" al Estado y diferentes Obras Sociales, se han trastocado por visiones patronales que subordinan y priorizan la continuidad ininterrumpida de tareas y labores, ante que la atención sanitaria profesional, integral y transparente, de la cual debería gozar todo ser humano.
Muchísimas cuestiones controvertidas podrían ponerse sobre la mesa, cómo por ejemplo que la atención sanitaria de ciertos sectores como las policías, bomberos, médicos, defensa civil, entre muchos otros, no prevén mecanismos especiales de atención, contención o intervención temprana para problemáticas de salud mental, entre los cuales se destacan los casos suicidios, ya que no existen centrales de atención exclusiva que funcionen las 24 horas los 365 días del año, con personal especializado que conozca íntimamente cada ámbito.
Lo expuesto se sabe, no es responsabilidad de nadie pero a la vez es responsabilidad de todos, y más aún cuando el cargo, la función o la competencia, obliga a realizar estas y otras preguntas molestas y urticantes que inexorablemente apuntan a como funciona el poder y las estructuras. gubernamentales, y a quienes tienen las atribuciones legales y las herramientas, para permitir que todo continúe igual ocultando la verdad a la opinión pública, o de promover acciones contundentes que mejoren la calidad de vida de los trabajadores y servidores públicos, lo cual en definitiva redundará en una mejor prestación de los Servicios Públicos.
El desarrollo precedente conlleva por lo tanto, a un cuestionamiento que quizás ha pasado por la cabeza de muchos de nosotros:
¿Se han implementado en el contexto de la Pandemia del COVID-19, algún Programa Asistencial de Salud a Distancia, que opere vía telefónica, WhatsApp, Skype u otra modalidad, para asesorar, atender, y proporcionar contención psicológica y psiquiátrica a quienes nos cuidan?
No es solamente la salud de los trabajadores Giles. Los mal llamados trabajadores esenciales son los que desempeñan actividades que se consideran necesarias imprescindibles o impostergables. La esencia es otra cosa y habrá que ver la esencia de qué. Como sea, la característica de los trabajadores que siguen en actividad no es su “esencia” sino que no están en aislamiento preventivo y siguen manteniendo contactos con muchas personas por día. Por eso, no es la esencia ni la persona, es la actividad que desarrollan lo que los pone en mayor riesgo de contagio y por lo tanto en riesgo de contagiar a mayor cantidad de gente. Cualquier análisis de las posibilidades de contagio indicaría no ahora sino desde que se descubrieron las epidemias, que las personas y actividades donde hay que poner más énfasis en la prevención son precisamente las que mantienen contacto en mayor cantidad con otras personas. Es elemental, pero ya hemos visto hasta el cansancio que las cosas más elementales son totalmente invisibles para la gente que se limita a manejarse con prejuicios ajenos y con miedo a los hechos. No hay duda que no se animan a hablar de las personas que están en situación de contagiar a muchos por miedo a “discriminarlos” o a “estigmatizarlos”, por una falsa condescendencia que fuerza a la gente a fingir que no se da cuenta que hay diferencias objetivas entre las personas y también entre sus actividades y que habría que actuar en consecuencia. Como siempre, porque siempre es así, no hay nada mejor que la corrección política para favorecer la negligencia sistemática. Antes no se animaron a decirle a los turistas que no salgan de la casa por unos días después de volver, ahora no se animan a ponerle obligaciones a los sanatorios, o a los comerciantes, o a cualquiera que esté en la calle, o atendiendo en una ventanilla, o detrás de un mostrador. Mientas tanto cada vez que pueden los mandan a mentir “el manejo ejemplar del gobierno en la crisis”. Fuerte el aplauso de las nueve y sigan haciéndose los boludos como los cabeza de termo que son. El himno nacional sigue siendo Que me Pisen de Sumo. No es necesario poner etiquetas como super propagadores, pero hay actividades que lo son y si bien los particulares pueden reclamar es la misión y obligación del gobierno su regulación y control antes que se generen conflictos y más víctimas. https://www.infobae.com/america/the-new-york-times/2020/04/16/una-de-las-principales-empresas-farmaceuticas-estadounidenses-se-convirtio-en-super-propagadora-del-virus/ https://www.infobae.com/coronavirus/2020/04/16/coronavirus-en-argentina-al-ritmo-del-aumento-de-casos-entre-el-personal-de-salud-crecen-las-quejas-por-la-falta-de-insumos/ https://www.infobae.com/sociedad/2020/04/16/coronavirus-en-argentina-al-menos-36-trabajadores-de-una-clinica-privada-de-balvanera-contrajeron-la-enfermedad/
A la Enfermera de la foto, la reemplazó el Tapaboca o sea, cuidadito con hablar y relacionarte.
Las obras sociales en general son la caja de los sindicalistas,simplemente busquen los archivos del Diario Hoy de La Plata sobre la estafa del IOMA entre fines del 2015 y principio del 2016 hay una serie de publicaciones que complican a el gremialista Baradel,del suteba,y a los de ATE t CTRA, ambulancieros,ortopedistas,medicos ,farmaceuticos ,esos expedientes judiciales estan cajoneados desde que Scioli era gobernador y nadie los volvio a sacar a la luz,Si alguien de la justicia hiciera una auditoria seria en las obras sociales de los mas importantes gremios veran que no les cierran ni el blanco,cuantos de las O.S. lavaban cheques en cuevas de la City,recuerden el caso de la campaña de Cristina-Cobos donde estan los culpables,Zanola,Capacciolli,Lorenzo y las cuevas que ellos vendian los cheques y agreguenle los remedios truchos, La Justicia ? bien muchachos sigue de vacaciones,