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Cuando se empiecen a cuantificar los daños que deja la pandemia y la cuarentena, los ratio de deuda y exportaciones sobre PBI saltarán de su variable y habrá que renegociar nuevamente con los acreedores. Todo lo que promete el ministro Martín Guzmán frente a los bonistas extranjeros y locales, no es más que una ficción.
Una rápida cuenta nos lleva a colegir que la Argentina ha perdido un trimestre de actividad, de producción y de generación de riqueza. Eso significa que sobre un PBI de unos 450.000 millones de dólares a fines de 2019, la Argentina ha perdido la cuarta parte de ese monto, esto es, unos 115.000 millones de dólares.
Claro que a fuerza de ser estrictos, no todo el aparato productivo del país ha estado parado durante el trimestre pandémico. De manera que tomando en cuenta la caída en la recaudación, la actividad industrial y la facturación del comercio que alcanzó al 50% respecto del año anterior, se puede concluir el PBI se redujo en igual proporción.
Esto significa que la Argentina perdió 1/8 de su PBI en el lapso en el cual está vigente las restricciones o las medidas de bloqueos. Esta cifra equivale a computar que sólo en los 100 días de confinamiento, el PBI de la Argentina se contrajo en un 12,5% que se suma al arrastre estadístico de la caída del PBI en 2019, lo que representa entre 2 y 3 puntos adicionales.
Es decir, que en el primer semestre de 2020, el país acumula una baja de su PBI de alrededor del 15%. Como no nos gusta hacer futurología, aquí nos detenemos.
Sin embargo, debemos aclarar que todo dependerá de una continuidad de las restricciones sanitarias, el saldo final de empresas que se presentarán en concurso de acreedores o en quiebra, por los costos derivados de la pandemia y las excesivas medidas de confinamiento, el aumento del desempleo, la contracción de la demanda y el déficit fiscal que arroje el ejercicio.
Si les molesta a los kichnerista escuchar que el pésimo el tratamiento que hace la provincia de Buenos Aires sobre el virus. Que tienen a Gollán y al ViceMInistro de Salud Pública que actúan más como militantes que como Profesionales de la Salud, lo sentimos mucho, NO LES SIRVEN PARA NADA. Los prefieren a los ciudadanos presos que libres Y si.GUZMÁN dice " El sector público ha podido financiarse durante la crisis del coronavirus en nuestra propia moneda, en pesos " " Esto ha estado funcionando muy bien ".Pregunto, esperan cambie algo con estos DELINCUENTES.
El conicet presentó la creación de tests para detectar el coronavirus en febrero, en abril, el 15 de mayo y hace unos pocos días. ¿Dónde están esos tests? ¿Alguien los usa? Porque si fuera cierto que existen no están siendo usados o se están usando mal. En provincia de Buenos Aires tienen un gobernador de décima, no sabe ni dónde está parado y ya ha demostrado posturas marketineras que sólo intentan manchar a los macristas. ¿Y si en vez de dedicarse a la actuación empezara a trabajar? Esto no se trata de mandarinas o naranjas. Hay un riesgo real que no se está manejando bien. Entiendo que en realidad están haciendo política. Como siempre usan a la gente.
Pregunto porque la gente de la provincia de Buenos Aires no lo enfrenta a ese muñeco de torta de Kicillof , inútil como pocos.También los ciudadanos, les dicen que se tiran desde el techo y se mandan. O se avivan o los tienen presos hasta septiembre.
El Estado está quebrado, pero la secta corrupta quiere manotear los dólares que puede proporcionar Vicentin. Mientras tanto, emiten pesos a lo loco y añoran las épocas en las que había muchas cajas para saquear y el "yuyito" valía mucho más de lo que vale ahora. El tendal de deudas y de quiebras que habrá luego de esto, sumado a todas las empresas que decidan no hacer más negocios en un país en el que rigen la ley de la selva y la corrupción descarada, producirá una estrepitosa caída en el empleo y en el nivel general de vida, de lo que quedarán exceptuadas las castas privilegiadas de siempre (políticos, jueces, sindicalistas y empresarios prebendarios). Panorama desolador, cuyas soluciones una mayoría decidió delegarlas en los que son parte del problema.