En el año 2004 el Congreso de la Nación sancionó la Ley 26.001 que fijó el 22 de Octubre como el día del Derecho a la Identidad, para conmemorar la lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo.
Esta asociación desde su nacimiento dijo buscar 400 bebés arrebatados a mujeres en cautiverio, víctimas de la dictadura militar (1976/1983)
Según un informe impulsado por el Registro Unificado de Víctimas del Terrorismo de Estado (RUVTE), dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, el número total de desaparecidos fue de 6.348 entre el 24 de marzo de 1976 en adelante.
Suponiendo que de los 6.348 desaparecidos, el 50% hubieran sido mujeres, de acuerdo a la información de Abuelas respecto de la búsqueda de 400 bebés, significa que el 13 % de ellas, al momento del secuestro estaban embarazadas.
Estas son cifras imposibles de verificar por cierto, razón por lo cual, la única verdad es la realidad, es decir que de aquellos 400 bebés que mencionaban desde su creación en abril de 1977, hace casi 45 años, Abuelas…encontró sólo 130.
Para esos 130 se creó, con dinero del erario público una infraestructura de empleados públicos, edilicia, de aparatología, de laboratorios, de vehículos, de sueldos, de viáticos, de mobiliario, de computadoras, de subsidios indescriptible, en este título se puede ver en detalles: “DD.HH – Un cuento de lobos y caperuzas…sólo para entendidos”
También la creación de leyes especiales, como es la que designa los delitos sobre estos 130 bebés recuperados como casos de lesa humanidad, con más una ley 26.548, absolutamente inconstitucional, mediante la cual se arrogaron el derecho de uso exclusivo, para esas 130 personas, del Banco Nacional de Datos Genéticos que había sido creado, originalmente para todos, según la Ley 23.511.
Mientras en 13 provincias argentinas se comercializa en la actualidad niños recién nacidos y que tan sólo en Santiago del Estero desaparecen un promedio de 12 bebés por mes, toda la infraestructura creada por Abuelas está exclusivamente reservada para los 130 nietos, que dicen haber recuperado.
Lo que usted acaba de conocer no es ideología sino información susceptible de constatación.
Veamos ahora qué es el derecho a la identidad
Las leyes están confeccionadas para resguardar bienes y valores. Un ejemplo nos servirá para comprenderlo: la violación sexual de una persona es delito por cuanto el bien jurídico protegido es el derecho a la libertad sexual y la víctima, en el momento del hecho, no pudo ejercerlo.
Vamos ahora al caso del derecho a la identidad. El bien jurídico protegido es el derecho a tener un nombre, una identificación particular que nos diferencia de las demás personas dentro de una sociedad dada.
Ese bien jurídico, en el caso de los desaparecidos de todos los tiempos ya lo tenemos, nuestros apropiadores o criadores, en nombre nuestro ya lo ejercieron. Pedir que nos lo cambien, so pretexto de nuestro derecho a la identidad sería ridículo ya que sólo lograríamos una identificación diferente, siendo las mismas personas, dentro de la misma familia y Comunidad.
Un ejemplo, yo para todos soy Julio César Ruiz, con un número de DNI, nacido como hijo biológico de mis apropiadores el día 5 de Enero, acto del cual dan fe dos testigos en la partida de nacimiento.
Es decir a ese derecho ya lo tengo, ya lo he logrado, al punto que cuando alguien menciona mi nombre por la calle me doy vuelta para saludarlo.
En el caso de los millones de Buscadores de Todos los Tiempos, no hubo un bien jurídico que haya estado protegido, por ello vivimos nuestras vidas queriendo saber quiénes somos o qué fue de la vida de nuestros hijos.
Esto es así porque el Derecho a Ser Hijos o el Derecho a Ser Madres o Padres no fue protegido por el Ordenamiento Jurídico de nuestro país, Argentina
En mi caso, una mujer, mi madre, me tuvo dentro de su vientre 9 meses. Me compartió su oxígeno, su comida, su sangre, sus miedos, sus temores, sus alegrías, la deformación de su físico, su riesgo de morir en el parto, tan sólo por amor, por necesidad o por lo que sea, pero, estaba usufructuando el Derecho Natural de ser mamá y yo de ser su hijo.
En el momento del nacimiento, cuando ella podía abrazarme, junto con el mío a ser abrazado, alguien, por el motivo que nunca supe, interrumpió, arbitrariamente ese derecho y la Ley no estuvo allí para protegernos.
Cómo será que nunca pensamos en defender nuestro bien jurídico como es el derecho a ser hijos, o papás, que hasta hoy, 22.10.2020, robar un niño en Argentina no es delito.
El verdadero bien jurídico que debemos reclamar los Buscadores de Todos los Tiempos es el Derecho a ser mamá, papá o hijos. Debemos comprenderlo, si verdaderamente deseamos, que alguna vez esta desgracia humana del robo de bebés deje de ocurrir.
A la altura de su conocimiento, ¿me puede explicar por qué y en homenaje a quién festejamos el 22 de octubre como el día del Derecho a la Identidad?
A no ser, por cierto, que usted, privilegiadamente haya sido invitado a la fiesta de cumpleaños de Estela de Carlotto, que no por casualidad es hoy y yo no lo sepa.
El problema actual son los aparecidos, los triplicados y los cuadruplicados. Están entregando identidades como si fueran cuentas de correo electrónico. Lo que nadie dice es que cada identidad cobra planes y vota. No es nuevo que algunos van con una pila de tarjetas al cajero. O se la pasan viajando el día de la votación.
Esas madres y abuelas pasaron las de Caín. Sufrieron y todos participamos de su sufrimiento, no es fácil perder un hijo y sin saber si está vivo, muerto, cómo, cuándo. No se lo deseo a nadie. Pero lamento que tanto Carloto como Bonafini hayan ensuciado su causa. Y es cierto los desaparecidos no son 30.000 eso lo usaron en su momento para conseguir apoyos en Europa, pero ahora, TODOS sabemos que el número es 6.348 desaparecidos. Y no debería haber NI UNO. No es que se trate de pocos o muchos. El daño que tanto los terroristas montoneros y del ERP como la dictadura nos hicieron a todos es irreparable. Y si todavía en las provincias se roban muchos bebés es porque las provincias argentinas viven todavía en el medioevo, son feudos.
Es cierto que sufrieron y mucho, pero la venta de niños en el norte , mesopotamia y en la patagonia argentina es conocida por todos, pero evidentemente solo se buscan a los nacidos entre 1976 y 1982, el resto es visto como algo normal su venta y tráfico.Carlotto festejaba haber recuperado a su nieto, pero se le realizaron estudios genéticos para demostrar su parentesco o solo por haber aparecido y decir que era su nieto lo es. Hay hechos que ponen en duda la veracidad de algunos casos, y deberían ser investigados, por mas que estén rodeados de fanfarrias partidarias.
El tema es delicado por sí, y abarca una serie de matices interminables. Por un lado, históricamente hubo apropiación de bebés. Como la adopción nunca es simple, se abre un "mercado" ilegal de compra-venta de personas. Ahora con el análisis de ADN es mas difícil, pero en su momento le preguntabas a cualquiera que trabajara en un hospital, desde el director hasta la gente de la limpieza, y te podían contar con lujo de detalles que había madres quienes, luego de parir, abandonaban a su hijo en el baño, en el placard de la pieza, o en el tacho de la basura. Y como adoptar es una burocracia eterna, al chico que lo ponían a disposición de la Justicia (lo cual era lo correcto) le arruinaban la vida, porque pasaban años y años y no se adoptaba, porque los padres postulantes quieren bebés y no nenes de seis años. Lo habitual era que buscaran rápidamente a alguien que estuviera interesado en adoptar, le daban el bebé recién nacido ($$) y le hacían los papeles para que lo anotaran como si fueran los padres biológicos. En la dictadura obviamente se agregan a estos casos habituales, los de aquellas madres secuestradas.