En busca del voto joven, el Gobierno viene cometiendo una serie de errores imperdonables al considerar que los votantes de menor edad son maleables e idiotas.
Hace clientelismo barato, humillando a los supuestos inexpertos, relativizando sus conocimientos, desvalorizándolos y subestimándolos.
Ello quedó más que claro cuando el Gobierno de Axel Kicillof anunció que les regalarían el viaje a unos 220 mil egresados. ¿Realmente cree que es esto lo que los jóvenes quieren?
Una vez terminado el secundario lo que un egresado busca es, naturalmente, un trabajo. Pero no sólo falta empleo, ni hablar del registrado, sino que los salarios tienden a perder sostenidamente frente a la inflación y al aumento de la canasta básica.
Ello se observa al comparar el salario mínimo, vital y móvil; que en febrero de 2022 tras la última escala acordada llegará a 29.160 pesos, con la canasta básica, la cual hoy roza los 70 mil pesos. Es decir, aquel que se inserta en el mercado laboral no logrará independizarse porque, salvo excepciones aisladas, es pobre.
Por otro lado, el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Cultura a cargo de Tristan Bauer, creó el programa “Más Cultura Joven”, el cual se encuentra dirigido para jóvenes de entre 18 y 24 años.
El mismo tiene como objetivo la entrega de 5 mil pesos para acceder a “servicios y bienes culturales”. Si bien algunas de las propuestas de la cartera son enriquecedoras, como la visita a museos, o la compra de libros, hay otras que resultan, por lo menos, un poco más polémicas.
Es que ese dinero puede ser utilizado para ir al cine, concurrir a recitales o participar en ferias. Este, además, en un plan un poco más extenso, ya que pueden acceder a él personas que estén por fuera del rango etario antes mencionados.
Estos son: los beneficiarios en alguna de las modalidades excepcionales del Progresar o que tengan hijos menores a cargo en hogares monoparentales, personas trans, pueblos originarios, personas con discapacidad, personas refugiadas.
Pero es tan patética la campaña del Gobierno en busca del voto joven que ahora el presidente Alberto Fernández se reúne con L-Gante, como tratando de encontrar aprobación por ese costado.
Pero se insiste, están subestimando a los jóvenes y se nota el hartazgo de estos en referencia a la dirigencia política.
Es que, de hecho, mientras el jefe de Estado recibía al cantante de cumbia, en La Matanza se llevaba a cabo la Expo Joven que fue organizada por la Municipalidad.
Fue allí donde Emiliano Bondarchuk, de 17 años, dijo lo que acaso resulta ser un pensamiento bastante general: “Sueño con ser chorro y vago, como ustedes”, en referencia a los funcionarios matanceros que se encontraban presentes.
Pero no es la única muestra del agotamiento que llevó a los jóvenes a descreer de toda dirigencia política. Nótese que los seguidores del candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires, Javier Milei; quien tiene un discurso “anti casta política”, son, justamente, los votantes de menor edad.
La campaña con la que se busca el apoyo de los jóvenes es patética y, es dable destacarlo una vez más, humilla y subestima a quien se trata de convencer.
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Estos populistas, sean k, peronchos, no convencen a nadie, porque desde que Perón no existe ninguno de los políticos del movimiento logró cumplir lo prometido, lo mismo pasa con los sindicalistas. Para los jóvenes son solo ejemplo de lo que dijo cinceramente ese pibe en la matanza: "chorro y vago"... Que pongan otra cumbia, que ya son las 12 menos 5 para Alverso y su gobierno de mentirosos, chorrros y vagos!!!!
Alguno de esos "asesores" que tanto le cuestan al contribuyente, en determinado momento le susurró a la Exitosa Abogada el nombre de este cumbiero L -Gante que, hasta poco tiempo antes, era casi un desconocido para la mayoría de la gente. Creyeron que lo iban a comprar y con él al "voto joven", ya que dentro del declive cultural de la sociedad, que haya tantas personas escuchando bazofias como la llamada "cumbia villera", el reguetón y el trap, es un signo inequívoco de esa degradación. El populismo, inevitablemente, produce un notable descenso en el nivel cultural y material, porque en los terrenos de chatura, de conformismo y de mediocridad, se siente a sus anchas y puede gobernar sin mayores dificultades. Como dijo el panzón indigno, la clave está en hacerle creer a la masa que "el mérito no nos hace evolucionar."
En realidad, el gobierno no conoce lo que los jóvenes o la gente en general quiere. Sólo actuan según como ellos son. Son coimeros, extorsionadores y prostituyen todo lo que tocan. Las medidas para captar votos no son mas que un espejo de lo que son nuestros funcionarios.