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El informe que confirma que vamos camino a la hiper: 2 de cada 3 pesos emitidos son rechazados por la gente

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La larga historia de altos y persistentes déficits fiscales financiados con emisión explican el rechazo al peso que tiene la gente. Este rechazo es el que hace que la emisión monetaria sea inflacionaria. En este marco, pretender que la inflación baje cuando se reedita el dólar-soja –que aumenta la emisión– es muy contradictorio.
La larga historia de altos y persistentes déficits fiscales financiados con emisión explican el rechazo al peso que tiene la gente. Este rechazo es el que hace que la emisión monetaria sea inflacionaria. En este marco, pretender que la inflación baje cuando se reedita el dólar-soja –que aumenta la emisión– es muy contradictorio.

La emisión monetaria genera inflación cuando la gente no la acepta. Si el Banco Central emitiera pesos y los ciudadanos los conservaran, esta emisión no generaría inflación. Pero con el antecedente de más de medio siglo de sistemáticos déficits fiscales y fuerte tendencia a financiarlo con emisión monetaria, naturalmente se tiende a rechazar los pesos. El rápido desprendimiento de los pesos genera presión sobre los precios.

 

Una de las maneras de paliar los impactos inflacionarios de la emisión excesiva es induciendo a que los bancos usen el dinero que captan por los depósitos a suscribir títulos de deuda del Banco Central (Leliq). Esto le permite al Banco Central sacar de circulación la emisión excedente atenuando su impacto inflacionario. El dinero sigue siendo de la gente, pero los bancos en lugar de usarlo para prestárselo a las familias o las empresas se lo prestan al Banco Central. Esto retroalimenta la emisión monetaria porque el Banco Central emite pesos para pagar intereses a los bancos por las Leliq.

Para dimensionar el rechazo a conservar los pesos resulta pertinente comparar del total de pesos emitidos cuántos están en circulación y cuántos fueron rescatados por el Banco Central a través de las Leliq. Según revela un informe del Instituto de Desarrollo Social de la Argentina (IDESA) sobre datos del Banco Central:

  • El total de pesos emitidos por el Banco Central asciende a $14 billones.

  • Circulando en manos de la población hay sólo $4,5 billones.

  • Los restantes $9,5 billones fueron sacados de circulación por el Banco Central a través de las Leliq.

Estos datos muestran que sólo 1 de cada 3 pesos emitidos está en manos de la gente, mientras que los restantes 2 pesos tuvieron que ser rescatados por el Banco Central con Leliq. El año pasado la distribución de los pesos emitidos, entre los que estaban en circulación y los rescatados por el Banco Central, era aproximadamente por mitades. Es decir, que el rechazo de los pesos, además de alto, es creciente. El panorama se agrava porque los excesos de emisión no solo son función del déficit fiscal que no se logra financiar con deuda sino también de los crecientes intereses que devengan las Leliq.

En este contexto el gobierno instrumentó una nueva versión del dólar-soja. El objetivo es evitar las presiones inflacionarias que generaría una eventual devaluación del dólar oficial. Con el dólar-soja el Estado compra dólares a $230 y los vende a los importadores a $170. Esto obliga a emitir $60 por cada dólar que liquidan los exportadores. Como esta emisión es rechazada, el Banco Central la tiene que absorber con Leliq. En la primera versión del dólar-soja, instrumentada durante setiembre, la cantidad de pesos en poder de la población se mantuvo constante en aproximadamente $4 billones mientras que las Leliq subieron de $7 a $8,5 billones. Es decir, todos los pesos emitidos por las pérdidas que generó el dólar-soja fueron rechazados y tuvieron que ser absorbidos con Leliq.

Es muy inconsistente pretender reducir la inflación mientras se sigue acumulando emisión monetaria no deseada. Las Leliq devengan un interés superior al 100% anual. Esto obliga a una emisión adicional que le pone un piso muy alto a la inflación. Por eso, aun suponiendo que se cumpla con las metas del FMI en materia de déficit fiscal, la inflación se mantendrá alta por la emisión monetaria que generan los intereses de las Leliq y las pérdidas que generan los dólares diferenciales.

El gobierno apela a acuerdos de precios, tipos de cambios diferenciales, profundizar el cepo para administrar la escasez de reservas y multiplicar las Leliq para absorber los excesos de emisión. El resultado será más inflación y recesión. Para revertir esta decadencia se necesita un cambio de enfoque que tome como eje central un ordenamiento integral del Estado. Con una estrategia de transformación del Estado ambiciosa y creíble se puede recuperar la solvencia financiera y la capacidad de gerenciamiento público. Además, dejará de ser necesario que el Banco Central siga endeudándose con Leliq porque aumentaría la predisposición de la gente a conservar los pesos en su poder.

 
 

8 comentarios Dejá tu comentario

  1. A partir de 2008 / 2009 empezaron a "solucionar" la ineficiencia (déficit) con emisión. Podrían haber administrado como corresponde (impensable), podrían haberse endeudado con entes externos (pero es muy facho) entonces decidieron emitir; empobrecer a la gente. Pasaron 14 años y seguimos pagando aquella decisión.

  2. Juanjo, no se puede mentir lo hechos o repetir como loro lo que otros le digan. No hace falta ir muy lejos ya que entre menem y cavallo negociaron la deuda al viejo estilo peronista pateandola para adelante y cambiando bonos por bonos. Despues el nestor y lavagna estuvieron de acuerdo con lo que se llamo el "megacanje" de de la rua volviendo a cambiar bonos por bonos y le agregaron el "blindaje" que era un diario mojado en el que se comprometian a todas estas exigenciias. Reforma previsional: eliminar la Prestación Básica Universal y elevar la edad jubilatoria de las mujeres. Racionalización de la administración pública. Reducción del gasto público: en el segundo semestre de 2001 el gobierno ajustaría el gasto en 4.000 millones de pesos, cifra equivalente al 1,5% del PBI. 2.100 millones de esos 4.000 serían recortados a las provincias. Las otras dos partidas ajustadas serían las prestaciones a la seguridad social (jubilaciones) y los salarios del sector público. Reestructuración de la ANSES y del PAMI: se le agregaba la desregulación de las obras sociales. Congelamiento del gasto primario público de la Administración Nacional y Provincial. A esto se agregó el club de paris y los famosos fondos buitres y la deuda popr la expropiación de YPF que hizo el enano mental de kichilof

  3. En vez de buscar acuerdo con los yanquis para ver las cuentas en dólares de los argentinos se deberían preguntar porque se la llevan afuera. Yo como otros miles de argentinos sufrimos el saqueo de nuestras cuentas en dolares con el cepo creado por caballo como consecuencia de la caída del 1 a 1 creada en tiempos de menem. Cepo, corralito son palabras del diccionario peronista y hoy ya jubilado Anses dice que no puedo comprar dólares porque de poder hacerlo sería un oligarca al servicio del imperio. En cualquier otro lugar de America salvo en los paraísos marxistas, cualquier ciudadano puede usar dólares o cualquier otra moneda extranjera sin problemas. Tengo casi 83 y me comí el rodrigazo, después la crisis del 2001 y ahora este mamarracho y todo ocurrió y ocurre cuando los peronistas están en el gobierno

  4. JUANJO NO ENTENDES UN CARAJO EL PRESTAMO DEL FMI SE USO PRINCIPALMENTE PARA PAGAR DEUDA ANTERIOR EN PARTE TOMADA POR LOS K

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