La corrupción integra el podio de las preocupaciones de los argentinos, junto con la inflación y la inseguridad. Pero ningún candidato promete medidas concretas para frenar lo que nos significa pérdidas que oscilan entre 5 y 6 puntos del PBI.
En otras palabras, el déficit fiscal nacional quedaría licuado si, como dijera Luis Barrionuevo “dejamos de robar”.
Las medidas que tienen a mano hoy las administraciones públicas, gracias a la inteligencia artificial, son enormes, pero ni los PJ, ni los de JXC, ni Milei o la izquierda tienen intención de utilizarlas.
Concretamente: por primera vez en miles de años de historia humana, la tecnología puede superar a las defraudaciones contra la administración pública. El Estado usa tecnología del siglo XXI para controlar a la ciudadanía:
–Drones y fotos satelitales para detectar nuevas construcciones,
–Lectoras lasers para patentes de autos
–Anillos digitales para detectar irregularidades en las chapas de dominio,
–Videocámaras de última generación para comprobar excesos de velocidad
–Reconocimiento facial de posibles contraventores o delincuentes.
Sin embargo, las “leyes de compras estatales” en el país se emitieron hace décadas y los políticos se niegan a aggiornarlas:
-La ley de compras es de 1947. Permite que en cada secretaría, dirección o ministerio exista un Lázaro Báez.
-El Código Penal es de 1921. Se lo quiso cambiar en 18 oportunidades de manera infructuosa. Las penas para corrupción son demasiado leves.
-La Ley de Obra Pública ya cumplió más de 60 años.
Con la aplicación de apenas diez ideas podríamos salir de casi todos nuestros problemas:
1-Como en Chile, sistemas estatales de compras online
La empresa más valiosa de la Argentina es Mercado Libre porque la gente consulta esta página varias veces antes de comprar. Sin embargo, la Nación sigue utilizando una ley de la primera presidencia de Perón, cuando no había computadoras ni internet.
El vecino Chile-compras logró bajar un par de puntos de PBI en gasto gracias a una plataforma con 100 mi oferentes donde el 60 por ciento de los que gana son pymes (cuatro veces más que en Argentina). Además, ganan en la mitad de las ocasiones empresas armadas por mujeres (cinco veces más que en Argentina).
2-Como en Estonia, controla la relación publico-privado
Primer país completamente digital. transparentar datos de quienes reciben dinero y subsidios del Estado
Cada persona que recibe sueldo, pensión, jubilación, ayuda o subsidio por parte del estado municipal, provincial o nacional debe figurar en internet. El rápido entrecruzamiento de datos daría por tierra con centenares de miles de injusticias, ya que muchos cobran varias veces del erario público.
El gasto corriente del Estado ya supera el noventa por ciento. Apenas el cinco por ciento se utiliza para la inversión pública. La infraestructura se está desintegrando ya que no alcanza ni para mantenimiento. Hoy, 27 millones de personas reciben dinero del Estado luego de las IFE y las ATP.
3-Como en España, controla el ingreso al Estado
Congelar los ingresos al Estado, establecer concursos para incorporaciones y reducir los cargos políticos en los parlamentos y legislaturas
Se deberían llamar examen solamente para los cargos que sea imprescindible cubrir. Además, no se controla el presentismo como en una empresa privada.
Deberían existir controles biométricos de ingreso y egreso a los trabajos y difusión pública de los concursos y exámenes para pedir personal profesional.
Proporcionalmente, tenemos 50 % más de agentes estatales que Chile, Brasil o Uruguay.
4-Como en el primer mundo, controlar el crudo
La industria petrolera se controla con caudalímetros para evitar que los holdings del “oro negro” subfacturen lo que se llevan de cada yacimiento. Pero, en Argentina esto casi no ocurre ya que los pulpos practican casi todas sus operaciones con meras “declaraciones juradas”. Se llega al extremo de que Miguel Galuccio, el mago, ex presidente de YPF con los K, sea el dueño de los pozos más productivos de Vaca Muerta. Con el diario del lunes, compró a título personal esas perforaciones y hoy su Vista Oil vale más que la petrolera re estatizada.
5-Como en Chile, controlar el litio y el oro
Las empresas de China y Gran Bretaña que exportan el “oro blanco” desde Jujuy y Catamarca hacen todas sus operaciones sin control y pagando apenas el 3 % (es lo que establece nuestra ley de minería, promulgada durante el menemismo).
Lo mismo ocurre con las explotaciones auríferas en San Juan, Catamarca, La Rioja o Santa Cruz.
Sin embargo, cruzando la cordillera, nos trasandinos le cobra en 40 por ciento de las ganancias, por ejemplo, a las empresas de litio. ¿Por qué le regalamos el material básico para la electromovilidad a las grandes potencias?
6-Como en Noruega, controlar la pesca
Noruega exporta por valores siete veces más grandes que Argentina a pesar de tener un litoral marítimo más pequeño.
¿Qué ocurre? Las naves de ese país están controladas por satélite y también tienen registros audiovisuales en tiempo real para saber qué pasa en cada cubierta.
Ergo, no se pueden desechar especies como se hace en nuestras costas y se debe declarar el peso real de lo capturado.
7-Como en EEUU, controlar esferas de competencia
Es vital saber quién hace cada cosa, algo que aquí brilla por su ausencia.
Que los municipios se dediquen a la asistencia social
Que las provincias hagan lo propio con la seguridad, la salud y la educación
Que la Nación atienda los problemas federales más importantes, como el contrabando, el narcotráfico, las posibles agresiones externas.
Cada persona que recibe sueldo, pensión, jubilación, ayuda o subsidio por parte del estado municipal, provincial o nacional debe figurar en internet. Hoy, no existe trazabilidad.
El rápido entrecruzamiento de datos daría por tierra con centenares de miles de injusticias, ya que muchos cobran varias veces del erario público.
8-Como en Escandinavia, controlar a la “casta”
La política le cuesta a los países con gobiernos populistas varios puntos del PBI.
Se deberían eliminar:
-los pasajes aéreos gratis,
-el alquiler y compra de aviones,
-los autos oficiales con y sin choferes
-la mayoría de los inmuebles alquilados
Existen miles y miles de rodados dedicadas a simples concejales, diputados y empleados de segundo nivel. En las empresas privadas estos privilegios se le otorgan en contados casos a los directores o a los CEOs.
Se debería impulsar de manera enérgica el home office para desalquilar miles de inmuebles inútiles.
9-Como en Valencia y Barcelona: buzones para denunciar anónimamente la corrupción
Crear el Satan (Sistema de Alertas Tempranas Anticorrupción) y adoptar la “ficha limpia”
En un gobierno open data, donde todos los datos están en la red, los algoritmos encontrarán de manera temprana todas y cada una de las irregularidades.
Esto incluirá la “ficha limpia” para que no pueda ingresar al Estado por concurso o por elección popular ningún aspirante que haya tenido condenas por corrupción.
En Cataluña, existen buzones públicos para denunciar corrupción. Aplicar el sistema de smartphones para conocer irregularidades
La sociedad civil española vigila y denuncia a través de un sistema llamado Tor Project que permite navegar de manera anónima en la red para desenmascarar a los corruptos.
10-Como en Inglaterra: eliminar los narcos con delaciones premiadas
Sistema de seguridad basado en las delaciones premiadas y denuncias normales de los propios ciudadanos
Existen más teléfonos inteligentes que personas en el país: 60 millones contra 45 millones.
Sería sencillo armar una red con una aplicación para denunciar todo tipo de ilícitos en la actividad pública y privada.
El yonqui, vecino, policía o el integrante de una banda podría denunciar a los dealers sin dar su identidad. Deberá aportar un código alfanumérico a un buzón establecido por la justicia. Si la información es relevante y efectiva, cobra de manera anónima en Rapipago o Pago Fácil su aporte.
Además, en Helsinski, Finlandia, la mejor policía del mundo tiene la netpolisi que patrulla la red.
Allì, en la deep web està el noventa por ciento del delito: trata de personas, tràfico de drogas y animales, venta de armas, contrabando, etc
Yapa: como en Perú, muerte civil de empresas corruptas
Las firmas condenadas por ilícitos no podrán ser contratadas por ninguna oficina pública. Se les impedirá presentarse en licitaciones y se impedirá el ingreso al Estado como funcionario a sus directivos.
Todo esta al alcance, gracias a las nuevas tecnologías. Todo sera olímpicamente olvidado. “Muchachos, hoy no nos volvemos a ilusionar” y por ello el 40% de los votantes ni se acercan a las urnas.