Hace unos años fue noticia Petroquímica Río Tercero por la vinculación con la explosión del 3 de noviembre de 1995, cuyo presidente de Directorio es un personaje llamado Pedro Vara.

    En Serrezuela se realizaron pericias que forzaron la hipótesis que la explosión fue provocada y direccionada en sentido opuesto a las instalaciones que tienen Atanor y Petroquímica Río Tercero en el lugar. Publicó Clarín, el sábado 20 de diciembre de 2003, que un tribunal de Córdoba ordenó investigar la explosión del 3 de noviembre de 1995 como un atentado, hecho tendría que ver con el ocultamiento de pruebas por la venta armamento a Croacia y Ecuador.

    Petroquímica Río Tercero es, desde 1982, la única productora en Argentina de Disocianato de Tolueno 80/20 – más conocido como TDI 80-, y lo exporta mayoritariamente a Brasil, donde tiene oficinas.

    El antecedente de su creación data del año 1930, cuando mediante el decreto del 12 de julio de 1947 se creó el Grupo Químico Río Tercero, en tanto que en 1954 se unificaron las fábricas mecánicas y químicas en Fabrica Militar Río Tercero, produciéndo ácido sulfúrico desde 1958, y amoníaco y ácido nítrico desde 1960. Formaba parte de un predio de 450 hectáreas de Fabricaciones Militares, que por ley 23.696 de emergencia económica fue privatizada.

    El real accionista de esta empresa el Grupo Moneta. La primera prueba la constituye una nota de Pagina/12, donde Susana Viau asegura que“el edificio construido por el laureado César Pelli le dio múltiples satisfacciones al cuestionado banquero (Moneta). La mayor: transformar su valuación de 45 millones en una hipoteca de 98 para reunir las condiciones exigidas para quedarse con los dos bancos de Mendoza”.
    En la parte que nos interesa escribió: “Según la escritura, los 8 millones que costaba el terreno se pagaron en efectivo. Otras versiones sostienen, en cambio, que éste habría sido canjeado por las acciones de Petroquímica Río Tercero que Moneta tenía en su poder y se cotizaban a precio vil en el mercado”.

    La segunda prueba es el informe de lavado de dinero de la Cámara de Diputados de la Nación que también atribuye esta empresa al Grupo Moneta, e investigada por múltiples operaciones financieras sospechadas de lavado de dinero. Hasta el mismo Ámbito Financiero hace un tiempo ponía en duda el origen del dinero para la construcción de una inversión en la Petroquímica que alcanzaba la suma de 40 millones de dólares estadounidenses. Otra información de fuentes empresariales no dejan dudas que el accionista oculto de Petroquímica Río Tercero y Acerbrag S.A. es el Grupo Moneta. Ambas empresas tienen en el mismo edificio, pero en distintos pisos. El domicilio legal: 25 de Mayo 565 de la ciudad de Buenos Aires.

    La Dra. Ana Gritti, querellante en la causa de la explosión que dejo siete muertos y numerosos heridos, se entrevistó con el Presidente de la Nación, y logró el dictado del decreto 789, que abría los archivos de la SIDE, pero nada de importancia había registrado en ese organismo, aún cuando agentes estuvieron en el lugar. Partiendo del hecho probado que la explosión fue dirigida para evitar daños a Petroquímica Río Tercero, la pregunta es: ¿Sabían sus directivos que esa explosión iba a suceder?. Nuestra conclusión es que sabían, considerando las relaciones políticas y económicas que mantenían no sólo con Fabricaciones Militares, sino principalmente con el Gobierno Nacional. El Congreso de la Nación ha consensuado la creación de una Comisión Bicameral que investiguará esa explosión intencional, y seguramente este interrogante tendrá respuesta.

    La parte querellante posiblemente investigue esta faceta que hace cómplices o encubridores a los directivos de Petroquímica con Pedro Vara a la cabeza.


Una larga Vara

     Piero Vara, para los bragadenses conocido por el marketing político desarrollado en torno a su figura, como el dueño de H-Acer Brag y Colchones Piero. En Río tercero no le conocen ni la cara pese que allí funciona la privatizada Petroquímica Río Tercero III de la cual es “directivo”. Para sus amigos locales Costa y Elías vino a salvar a Bragado, y no importa de donde salió el dinero: el fin justifica los medios.

    Pero para los que están informados (agoreros según el gobierno municipal) no es así la cosa. El futuro es incierto. Días pasados en la City se reían: ironizaban que “se le había caído la sopa a Piero”.

    La olla de la colada continúa se había roto hace días, y está confirmado que por falta de mantenimiento por más que algún infeliz se empeñe en decir lo contrario.

    No sólo eso, sino que después de una discusión entre Brito y Paez, dos hombres de solo confianza de Piero, este último después de un ataque de presión es trasladado a Buenos Aires y fallece. Lo real es que muchos se alegraron. También hay que decirlo: Paez estaba amenazado, y cada tanto encontraba detrás de la puerta un anónimo que indicaba su muerte.

    Además, en la canasta del guinche pintaron una seria advertencia, que borró el personal de seguridad de la empresa. Su manejo le generó enemigos, principalmente en la UOM por no contabilizar horas extras. Lo cierto es que lejos estamos de la salvación. Esta empresa tiene problemas de organización: la gente capacitada no está y Piero no entiende de Siderurgia. Únicamente cree que todo el mundo quiere robarlo y por eso no paga. Y por ahí consulta algún amigo de la SIDE para saber quién es el gaucho.

    A nadie le gusta hablar con él. Tiene a consecuencia de ello problemas de producción, y otros estructurales.

    ¿Cuánto tiempo aguantará Piero si se le sigue cayendo la sopa?

Gustavo Arabia