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Es sabido que el cuerpo humano acude a sus reservas cuando comienza a perder energía, entonces todo su sistema se coloca en alerta. Es así que cuando se encuentra convaleciente y comienza a “apagarse”, el propio cuerpo le va pidiendo a cada uno de sus órganos un último esfuerzo para salvar el todo, requiriendo de todas sus reservas para evitar la muerte.
Cuando el ejército de un país se halla combatiendo y comienza a sufrir bajas considerables, la decisión que suele adoptarse es apelar a los reservistas para evitar el colapso final. Se demanda a esas reservas en momentos críticos antes del último desenlace.
El concepto de reservas surge claro, es el último refugio donde se acude para eludir la catástrofe.
Nuestro actual gobierno, que rige los destinos del país desde hace 7 años, también pretende hacerse de las reservas para salvarse del cadalso. El llamado modelo (un conjunto de improvisaciones, para definirlo mejor) ha fracasado rotundamente. Se han dilapidado los presuntos superávits, se ha generado más pobreza e indigencia, se nos aisló del mundo, se destruyó la producción en toda la escala económica, se han deglutido todos los recursos, y ahora como corolario pretenden apropiarse de “nuestras” reservas para seguir por el mismo camino llevándonos a la bancarrota y a la muerte civil de cada uno de nosotros donde la clase política parece no haber advertido que este trance es crucial.
Si deben usar las reservas para recrear el empleo, aplicarlas a planes sociales, a salud, a educación, a seguridad, a sostener los déficits provinciales y la burocracia improductiva que existe en toda la administración. Entonces, ¿qué han hecho con todo el dinero que nos han sacado vía impuestos, estatización de las AFJP y todas aquellas retenciones aplicadas al sector productivo?
Quizá muy pocos se han puesto a pensar que no importa si es con un DNU o con una ley por la cual vayan a disponer de “nuestras” reservas. Si eso ocurre, por un lado estarán aceptando que gobernaron equivocadamente, pero por el otro, estarán suscribiendo la sentencia de muerte de nuestro país.
La advertencia está sobre la mesa, ahora le toca mover a la clase política en su conjunto.
Mucho cuidado, ¡jaque mate en dos jugadas!
Muy buena comparación!!. Esperemos no terminar como Usted lo anticipa. saludos.
Son muy claros y didácticos los artículos del dr., me preocupa que los medios estén entretenidos con Menem mientras muchos se preparan para vaciar las arcas y robarnos el futuro. Uds. son periodistas independientes que pueden alertar al resto de lo que se cocina en el mundo del poder.Espero nos ayuden.Gracias
Cristian : Gracias por tu opinión.Preferiría que la situación no se desmadre, pero creo que cuando termine su mandato este gobierno caeremos en la cuenta de que nos dejaron tierra arrasada. Costará mucha reconstruir la economía y las instituciones, pero no va a ser imposible. Verónica : Agradezco tus conceptos y te aclaro, por una cuestión de respeto a este sitio libre e independiente, que no soy periodista, ni formo parte del staff de Tribuna. Pero soy muy agradecido por la publicación de mis pequeños aportes que quedan siempre a consideración de los responsables del sitio y de todos los lectores. Muchas gracias.
Muy buena la comparación del uso de las reservas porque creo que el fin para el cual se van a utilizar no es el que dicen los K sino que serán fondos destinados a subsidiar a su clientelismo político. Sufrimos un atropello constante a nuestras instituciones y esperamos que la diligencia política se haga cargo de sus dichos opositores en las campañas . Me queda la amarga sensación de que la presidente ya nos sentenció cuando dijo en un discurso " Yo me acuerdo que la villa 31 era en su origen chaperío y cartón, prácticamente, y hoy, lo que es eso que a muchos tampoco les gusta, revela también como ha crecido la República Argentina....." considerar un avance a construcciones amorfas, fueras del margen de toda ley social refleja el perfil de país que tienen los k .