Acuerdo pesquero entre la Argentina y China
China lleva años pescando al borde de las 200 millas y violando el mar territorial Argentino. Prueba de ello la cantidad de buques de esa nacionalidad presos por invasión de jurisdicción marítima. China tiene una historia de depredación y violación de la soberanía y leyes en nuestro mar (Zhonz Yuan Yu N° I, Fun-Yuan Nº3 f Zhonz Yuan Yu N°I, Lin Shui… buques poteros que pescan calamar). Paralelamente los Kirchner también tienen una historia de entrega y depredación de recursos naturales y dinerarios que convergen en este acuerdo el cual beneficia a extranjeros por sobre el interés nacional.
En esos buques suceden cosas terribles
El incidente ocurrido en el Lin Shui, buque chino de bandera Argentina, donde se tiraron 10 toneladas de calamar al mar por el peligro de la zozobra, reavivó los fantasmas sobre pesca en el mar argentino. En ese sentido, un marinero que prefirió no hacer trascender su identidad por miedo a quedarse sin trabajo, admitió que: “en esos buques pasan cosas terribles; a muchos garantías (jefes) chinos no les importa que no se termine de procesar, ellos siguen pescando, sin miedo a poner en riesgo el barco y la seguridad de la tripulación”. En otro orden, el marinero comentó que la gente que trabaja en el calamar es literalmente explotada; “desde que se encienden las poteras a las siete de la tarde, hasta las tres de la tarde del día siguiente no tenemos descanso, dormimos generalmente cuatro horas y luego de vuelta a la faena, por eso hay tantos accidentes” remarcó el trabajador, no sin antes agregar que a bordo del barco pueden cometerse atropellos contra la persona y más aún contra el recurso, porque no hay un observador de pesca a bordo.
La conservación de los recursos
Argentina como país ribereño, tiene la obligación de acuerdo a nuestras propias leyes y a la CONVEMAR, de fiscalizar y controlar el cumplimiento de las normas nacionales e internacionales sobre la zona contigua (milla 201). En el año 2003, el Ejecutivo Nacional mostró connivencia para no fiscaliza ni hacer cumplir la ley dentro de nuestro mar territorial, dentro de la zona económica exclusiva y en la zona contigua. Muestra de ello es la pesca masiva e ilegal del calamar que nos llevó en el 2003 a la perdida de capturas por 5 millones de dólares.
En los últimos días, entre 50 y 90 buques extranjeros entraron "en patota" dentro del Mar Argentino para pescar calamar, pero ninguno de ellos pudo ser capturado. El episodio, denunciado por el sector pesquero y admitido oficialmente, dejó al descubierto dos realidades: el calamar es tan buen negocio que atrae a decenas de buques ilegales, y el Estado no tiene recursos para enfrentarlos.
La denuncia surgió de la Cámara de Armadores Poteros Argentinos (CAPA), que agrupa a gran parte de la flota nacional, conformada por 100 embarcaciones. Según informaron los capitanes argentinos, la flota "ilegal" vulneró la Milla 200 en dos ocasiones: entre el domingo 23 y el martes 25 de febrero, fue avistada hasta 60 millas dentro de aguas argentinas. Y repitió su incursión el último lunes.
La semana pasada llegaron a ser contabilizados 90 buques. Y ahora, unos 70. Es decir que, por varios días, la flota nacional convivió con otra flota de parecida envergadura. El daño económico es difícil de determinar, pero como cada barco puede capturar hasta 50 toneladas diarias, se estima que los ilegales se alzaron con calamar por cerca de 5 millones de dólares.
Los marinos argentinos, incluso, lograron identificar a algunos de esos barcos, todos de nombre oriental. Quedó en evidencia que los invasores forman parte de la impresionante flota que cada año —entre febrero y agosto— se instala en la Milla 201, para hacerse del calamar que no logran capturar antes los barcos habilitados por la Argentina o el Gobierno de las Islas Malvinas. En general, esos buques llevan bandera de Taiwán, China, Japón y otros países asiáticos. Fuentes oficiales estimaron que en estos momentos habría allí entre 200 y 300 poteros, aunque este año —por falta de fondos— no se realizó ningún sobrevuelo por esa crítica zona.
Antecedentes de acuerdos marco de pesca firmados por la Argentina
En 1986 Argentina firmó con la URSS y Bulgaria, acuerdos marco de pesca. Por la falta de controles se llegó a altísimos niveles de depredación que permitieron al Reino Unido, bajo el amparo del derecho internacional, formar una zona de conservación FICZ alrededor de las Islas Malvinas, en detrimento de nuestros reclamos soberanos y la pérdida de posibilidad de pesca en nuestro caladero malvinense. Estos acuerdos también contemplaban que ésta flota recalase en puertos argentinos. Estos acuerdos nos dejaron un montón de buques como chatarra y el enorme negocio a funcionarios que hicieron millones con la retransferencia de esos permisos de pesca, no por nada los funcionarios de la Subsecretaria de Pesca de la Nación como asesores, integrantes del Consejo Federal son los mismos siempre, cambiando de sillones cuando no a través de consultoras trafican el poder haciendo caja para Néstor Kirchner.
La política en Chile respecto a la milla 201
Chile impulsa a causa de una política que llevó a la depredación y quebrantos económicos en su industria pesquera, cerrar los puertos y complicar, de alguna manera, el trabajo de flotas extranjeras. La industria pesquera sostiene que los barcos con bandera de países como Rusia, China y de la Unión Europea ya depredaron el recurso frente a sus costas y ahora buscan llenar sus bodegas cerca de Chile. Hace más de dos años, el Gobierno chileno decidió, junto a Australia y Nueva Zelandia, buscar regular la pesca en alta mar fuera de las 200 millas. Para esto, Chile patrocinó la creación de una Organización Regional de Pesca (ORP). Y es que fuera de las 200 millas de Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la mayoría de los países costeros, en el Pacífico Sur, nunca ha existido un acuerdo de regulación, y barcos factoría, provenientes de Rusia, la Unión Europea, China y otros países que llegan a aguas cercanas a Chile porque ven una buena oportunidad de negocio.
Organizaciones regionales buscan proteger los intereses de los países ribereños, la protección de la biomasa y la regulación de la pesca para todas las flotas. Es el caso de OLDEPESCA (Organización Latinoamericana de Desarrollo Pesquero), de la que es parte nuestro país, que entre sus objetivos busca que se tengan en cuenta criterios que privilegien la sostenibilidad de los recursos pesqueros, la conservación del medio ambiente, el desarrollo sostenible; y las buenas prácticas de comercio. También, promover la adopción del principio de tratamiento diferenciado de los países en desarrollo en las disciplinas de la OMC (Organización Mundial del Comercio) sobre subvenciones a la pesca. Otros ejemplos regionales: CPPS (Comisión Permanente del Pacifico Sur), CIAT (Comisión Latinoamericana del Atún Tropical), etc. Esta representación nacional, sirve como apostadero de funcionarios del poder que sin registros de oposición, llegan a cargos de relevancia en los cuales podrían de querer, hacer mucho por el caladero argentino, además de ser turistas de lujo viviendo en hoteles de primera, pagos por todos los ciudadanos para que nada cambie.
La contaminación de las aguas y puertos
Los buques chinos pesqueros que ingresan a nuestras aguas, en su mayoría no se ajustan a estándares internacionales ambientales. Ingresan a nuestros puertos con la seguridad de la falta de controles y corrupción. Estos buques evaden los puertos donde se controla que los separadores de agua de sentina que evitan vertidos de hidrocarburos en el mar, sean de 0 partes por millón, condición para operar en aguas Antárticas o de Malvinas. Muchos de ellos tienen estos dispositivos fuera de uso, obsoletos o con tuberías clandestinas que permiten que líquidos contaminantes de sala de maquinas, drenen en forma directa al mar. La mayoría carecen de distritores que reprocesen evacuaciones liquidas y sólidas humanas, transformándolas en inocuas para el medio ambiente, ni poseen moledores de desechos sólidos de alimentos ni tampoco cumplen la normativa internacional de MARPOL. Cargan aguas de lastre en Asia y traen plagas y otras bacterias que tampoco se controlan antes de vaciar los tanques en puertos, radas y antepuertos de nuestro país. Ejemplo de ello, es la plaga undaria, alga de origen asiático que invade desde hace más de diez años el fondo marino de los golfos Nuevo y San José, donde provoca graves perjuicios ecológicos y económicos, traída por buques asiáticos ante la falta de control en nuestros puertos. Esta plaga llegó por la falta genuina de controles de bromatología y sanidad sobre las aguas de lastre.
Funcionario k: favorecido por ser empresario amigo
Los empresarios funcionarios amigos del poder, cooptan todos los negocios como ostentación de la impunidad.
Nuestros puertos carecen de controles medioambientales dispuestos por normativa nacional e internacional para buques en puerto. Los buques coreanos amarrados en predio del Astillero SPI de Mar del Plata, son el ejemplo la contaminación que se permite por falta de controles. Al final de cada zafra se amarran aproximadamente más de 15 buques coreanos, con una tripulación aproximada a 40 personas cada uno, aproximadamente 600 tripulantes por zafra, los cuales arrojan diariamente evacuaciones humanas durante los meses que están amarrados, sin tener ningún tipo de manguera sanitaria que evite la contaminación de la costa, además de arrojar metales pesados, producto del picareteado, pinturas y demás desechos corrosivos como la purga de sistemas de amoníaco con mangueras al mar. El propietario de este astillero es el Ingeniero Tetamanti, Consejero Federal Pesquero por la provincia de Buenos Aires, hombre K empresario beneficiado ahora con el ingreso de la flota China a sus astilleros que son operados por cooperativas truchas.
Este tipo de acuerdos debe contemplar toda la normativa internacional expresada en el mismo, no sólo para llenar artículos de la ley que las encuadre legalmente. Hay que ser sumamente cuidadoso. La ley exige sacar contramuestras de agua de lastre y tomar muestras del aceite sucio a desembarcar con contramuestra para evitar descarga de PCV y otros contaminantes altamente peligrosos, así como desechos químicos y biológicos. Éstas son normas internacionales que no se cumplen; por ello Argentina es un destino permeable para estos actos de corrupción a sabiendas de las navieras, que en materia portuaria, nuestros funcionarios permiten el ingreso de containers que se encuentran depositados durante años sin que nadie revise contaminación alguna.
Las ilegalidades ligadas a los buques chinos
Es conocido el tráfico de inmigrantes ilegales que ingresan a puertos desde buques de origen chino y los trasbordos en alta mar de personas de buques que operan en la milla 201 y se trasbordan a buques de empresas Chinas, radicadas en Argentina que maniobran con bandera nacional para que los mismos ingresen ilegalmente. No se controla en nuestros puertos a los tripulantes, menos a chinos que arriban de un buque pesquero.
El consumo mundial de estupefacientes sintéticos ha superado este año, por primera vez, al de cocaína y heroína juntas, en especial, porque la población del Sureste Asiático y Oriente Próximo ha multiplicado la demanda de pastillas de éxtasis, informó en estos días la oficina sobre control de drogas de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
China exporta la ketamina, que también se emplea como anestésico general en algunos países desarrollados. Es ahora la principal droga que se consume en Hong Kong, de acuerdo con un comunicado publicado por la UNODC, que señala que también gana popularidad en todo el sur de China, y su uso se extiende por Asia Oriental, Australia, Europa y Norteamérica.
Tampoco se controla lo que se carga a estos buques antes de zarpar. Los ejemplos de esta operatoria los encontramos en la Escollera Sur y Norte de Mar del Plata, el puerto de Necochea, los puertos de la ribera del Río Paraná y patagónicos donde llegan vehículos que descargan bultos sin controles. Nuestro país es parte del narcotráfico a escala mundial, y la venta de paco es el índice de la manufactura de cocaína dentro de nuestras fronteras, droga que en Asia llega a valer 40 veces más que en el mercado local.
El arrendamiento de buques (charteo)
Si bien la Cámara de Armadores CAPECA, expresa su disconformidad con este acuerdo, año tras año se asocia a empresarios asiáticos para llevar adelante el charteo de buques de pabellón extranjero, con tripulación extrajera para la pesca de calamar; negocio para funcionarios pesqueros y armadores argentinos especuladores. Los chinos se asocian con empresarios argentinos para pescar calamar, así obtienen el permiso nacional para pescar en nuestras aguas. Este acuerdo de Cristina Kirchner claramente no los favorece, porque los empresarios chinos obtendrías sus propios permisos.
El Subsecretario de Pesca de la Nación, Norberto Yahuar, precisó correcciones efectuadas sobre el plan para prefinanciar exportaciones de pescado. En particular, señaló la necesidad de dar incentivos para la pesca de calamar con el propósito de evitar que la flota permanezca inmovilizada durante esta temporada. Según el informe de la Auditoria General de la Nación, “su explotación en cuanto a volumen, es la segunda en importancia dentro de las capturas totales realizadas en el mar argentino”. El informe también alerta respecto a la sobreexplotación que ha sufrido este recurso. Los incentivos de Yahuar van a colaborar con varias empresas asiáticas, dado que se otorgarán créditos también a empresarios extranjeros, con buques propiedad de sus gobiernos. La ayuda K es concedida para favorecer a multinacionales que compiten pescando calamar en las 200 millas con los buques argentinos. Esta prefinanciación beneficiará a coreanos, chinos, españoles que poseen pabellón argentino y que llevan a bordo tripulantes extranjeros, que además poseen buques operando en Malvinas desconociendo la soberanía nacional sobre las islas. Nuestros funcionarios todo lo permiten mientras declaman por las Malvinas favorecen a que las perdamos. Reeditan acuerdos depredadores y negocian con empresas que poseen permisos de pesca ingleses, todo ante nuestros ojos y ante el concierto de las naciones.
No obstante, Yauhar aclaró respecto al acuerdo firmado por Cristina, que sólo podrán ingresar aquellos barcos chinos que no mantengan lazos comerciales con el Gobierno de las Islas Malvinas, y el control de esta aclaración de Yahuar es la propia declaración jurada de los chinos que no pescan en Malvinas. Es más, si por éstas casualidades, su declaración china no es un cuento chino, es porque sus prácticas son depredatorias. No pescan en Malvinas porque no los dejan. "China tiene a favor que hace dos años que no pesca en la zona controlada por los británicos y el acuerdo sólo será válido si continúan así”, enfatizó Yauhar.
Yahuar no mas iniciada su gestión, sacó los pocos controles que subsistían en nuestro mar y habilitó la pesca sin protección a juveniles. Aún los barcos no tienen las cámaras filmadoras y siguen teorizando respecto a qué sistema de protección de juveniles va a remplazar el anterior que nunca usaron. Para Yahuar no existe emergencia pesquera y ni bien asumió reconoció que en nuestro mar se pesca sin controles. Otro funcionario K desvinculado de su responsabilidad, porque recauda fortunas y porque la única política de Cristina y su consorte, prioriza la caja por sobre el interés nacional, recursos y trabajadores. Basta con ver el aumento de la pobreza en las poblaciones costeras que trabajan en el sector, el cual en estos años no dejó de exportar a valores internacionales, aun en los momentos de la crisis mundial; sector que genera divisas millonarias que engrosan las cifras de los capitales en fuga. En el último enero: 1.000 millones de dólares.
Estamos viviendo el nacimiento de instituciones que funcionan, un Congreso dispuesto a dialogar, a discutir proyectos y una Justicia dispuesta a juzgar. Las pruebas contra Yaguar están evidentes en el estado del caladero nacional, profundizador del modelo articulado por su antecesor Gerardo Nieto, con la participación necesaria del Consejo Federal Pesquero, por acción y omisión, todos comandados por el matrimonio presidencial. Los K no escuchan el mensaje del pueblo argentino, cada acto eleccionario es interpretado como una venia para la ilegalidad y escuchan sólo los aplausos que ellos mismos pagan. Ciegos y “enfermos de poder” construyéndose como víctimas, viendo enemigos en cualquier voz que se les opone, van prestos a ocupar un lugar en las cárceles comunes por empobrecer a sus representados, con el fin de enriquecerse a sí mismos.
Roberto V. Maturana
Oficial de Marina Mercante – Investigador
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=684132
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https://periodicotribuna.com.ar/1586-mas-pruebas-del-delito.html