Mientras en Latinoamérica vemos, por un lado, a países como Brasil, Colombia, Chile y Uruguay transitando un camino hacia el desarrollo, por otro, vemos que tanto Argentina, como Venezuela y Bolivia van por el camino inverso, acercándose cada vez más a la decadencia cubana de los Castro, especialmente en lo político y social, donde constantemente se acentúan las persecuciones a la prensa, el populismo y el totalitarismo.
En este mismo sitio digital, se ha publicado un artículo titulado: “Argentina K, un país cada día más bananero” donde se demostró con algunos ejemplos muy simples -pero no por eso menos válidos y elocuentes-, la decadencia por la que estamos atravesando.
No es ninguna casualidad, entonces, que quienes son los principales aliados de la Argentina experimenten lo mismo.
En realidad, sería muy extenso hablar de lo que está ocurriendo en Venezuela bajo el gobierno de Hugo Chávez, hijo putativo del máximo dictador de la historia de Latinoamérica, Fidel Castro, aunque lógicamente, si uno escucha uno de esos inefables discursos pronunciados por Chávez, escuchará, como con los discursos de Cristina, que sus países son lo más parecido al paraíso, gracias, por supuesto, a sus excelentes actos de gobierno, cuando la realidad, por lo menos, indica otra cosa. Como por ejemplo que sus ciudadanos sufren, principalmente, los altos índices de delincuencia, desocupación, inflación y especialmente crisis energética.
Un dato curioso es que quien oficia de presidente de Cuba, Raúl Castro, que permaneció en Venezuela después de las conmemoraciones por el Bicentenario para cumplir luego “una visita de trabajo, una visita oficial, para seguir alimentado y conformando la unidad” entre los dos países, afirmó: “Cuba y Venezuela cada día son más la misma cosa”.
Claro, quién lo puede negar, especialmente se parecen cada vez más en cuanto a tratar de eliminar la libertad de expresión se refiere.
No por casualidad Chávez creo a los “guerrilleros mediáticos”, que es, ni más ni menos que un grupo de jóvenes adolescentes, uniformados, que juraron su adhesión a los “comandos juveniles de guerrilla comunicacional” que promueve el gobierno bolivariano de Hugo Chávez.
Estos jóvenes forman parte de la operación “Trueno Comunicacional”, dirigida a combatir los mensajes que difunden los medios de comunicación privados, que para Chávez es el “aparato de dominación de los pueblos” operado desde los centros de poder.
Según afirmaciones del propio Presidente venezolano, “la guerrilla comunicacional, o guerrilleros mediáticos deben tener la creatividad, la movilidad y la rapidez que caracterizan a la guerrilla para, al estar en el seno del pueblo, interpretar y expresar las necesidades de ese pueblo y llevar este mensaje a todo el mundo y comunicarlo democráticamente, de manera oportuna y veraz”.
En la Argentina, obviamente, también existe la “guerrilla comunicacional”, que fue fundada por los intelectuales oficialistas de Carta Abierta, además de otros medios subvencionados por la pauta oficial como los diarios El Argentino, Página/ 12, las revistas XXIII, Siete Días, entre otros y lógicamente los medios oficiales, como Radio Nacional la agencia de noticias TELAM y por supuesto Canal 7, donde se destaca el programa ultra K 6, 7, 8 cuya productora, PPT, además realiza los también programas oficialistas Duro de Domar y Televisión Registrada, que se emiten por lo que podríamos llamar la “sucursal” de Canal 7, Canal 9 y lo más gráfico, la televisación del fútbol, instrumento este utilizado para difundir propaganda oficial.
Es así como no podemos olvidar el refrán que dice: “Dime con quién andas y te diré quién eres”, entonces, no podemos dejar de lado al Presidente de Bolivia, Evo Morales, quién en el marco de la Conferencia Mundial sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra, afirmó: “el pollo que comemos está cargado de hormonas femeninas. Por eso, cuando los hombres comen esos pollos, tienen desviaciones en su ser como hombres”. Pero no conforme, fue más allá, y dijo: “de aquí a 50 años todo el mundo será calvo, tendremos una sociedad de calvos, por lo tanto no habrá peluqueros, tendremos desempleo” y lo justificó asegurando que “la calvicie, que parece normal, es una enfermedad en Europa, casi todos son calvos. Y es por las cosas que comen”. Pero además, puso como ejemplo su caballera para resaltar que él es la prueba de que comiendo alimentos saludables se puede conversar el cabello.
Realmente, ¿puede el presidente de cualquier país del mundo decir semejante estupidez?
En fin, como dijimos, “dime con quién andas y te diré quién eres”, y estos son los socios políticos – ideológicos de los Kirchner: los Chávez, los Castro, los Morales.
Por eso, así como en la segunda guerra mundial existía el “eje del mal”, no tengo ninguna duda de que estos personajes han revivido ese eje, que si bien por ahora, solo por ahora, no podemos calificar del todo como “eje del mal” bien lo podemos catalogar como el “eje del bananerismo latinoamericano”.
Pablo Docimo
Toda la razón, uno escucha esas cosas y no puede entender como jefes de estado, no un ciudadano común, no, ¡¡¡JEFES DE ESTADO!!! salen a decir todo tipo de gansadas. De más creo que está decir que , o están locos, o lo hacen porque son personas escasamente instruídas, o mal instruidas. Y con eso no estoy diciendo que una persona sin preparación no pueda llegar a ningún lado, porque si no, Lula no sería hoy el presidente de Brasil. Hablo de que al menos, si ellos no pueden o no saben, deberían rodearse de personas que les indiquen objetivamente qué es lo que sucede a su alrededor. Sin embargo, esto parece más el entorno de un programa de entretenimientos, que grupos de gobierno de cualquier país. Por más que quieran parecer descontracturados, son absurdos, y la gente, no necesita una caterba de payasos al mando, porque al final, parece la película "Idiocracia", donde el menos idiota les saca las papas del fuego a todos los demás.
Gabriela, creo que es un error considerar que Lula "no tiene preparacion". Saludos atentos.
Simplemente me tienen cansado los periodistas de estar comparandonos con Brasil o Chile. Ningun país latinoamericano esta desarrollado más que otro. Sistema carcelario, pobreza, educación siguen siendo los mismos problemas de siempre.